El pasado jueves 21 se estrenó en Blanes la película “Tot allò que no et vaig dir”en el OCINE Blanes, con gran asistencia de público (más de 300 personas) y con aplausos al final de la proyección. Una película sostenible, donde todo el personal técnico y los intérpretes son naturales de Blanes, y con el fondo y entorno del mar, lo que implica la belleza de esa zona de la Costa Brava. Las actrices protagonistas son Sandra Cendra, Mireia Bautista, Pili Jiménez y José Gutiérrez, y el director Conrad Son. Rodada en idioma catalán, con duración de 2 horas y media, y como tema central: dos mujeres enamoradas (normalizando ese tipo de relaciones) y un tema de candente actualidad: la salud mental, en este caso la esquizofrenia. Al estreno asistieron: el alcalde de la localidad Jordi Hernández Martínez; el segundo teniente de alcalde y regidor de Cultura Jordi Calvet San José; y el Jefe de Cultura del ayuntamiento de Blanes Pere Box i Grau.
La película es larga, y según el director tiene semejanzas, de alguna forma con “As Bestas”: “No me quiero comparar con Sorogoyen, pero hay muchos silencios, planos secuencia muy largos de 4 o 5 minutos, miradas que dicen mucho...Y en cuanto a la duración, podría haberla hecho más corta, cierto. Pero no me quería dejar cosas en el tintero...Prueba de la respuesta positiva es el silencio que se respiró en la sala, con una pantalla enorme de 18m por 6 de alto”.
En cuanto al tema, se ha querido normalizar la perspectiva de género: son dos mujeres que se enamoran, pero este hecho está tratado con naturalidad, como ocurre hoy en día en gran parte de ocasiones. No es una película considerada LGTBI. Y las enfermedades mentales se centran en la esquizofrenia “pero no como algo que te arrincone, y aparte de la actividad laboral, sino una parte más de la personalidad que debe ser aceptada. En este sentido, la sociedad ha avanzado mucho” (señala Conrad).
Athletic de Bilbao
El director catalán es conocido por mucha gente por su película hablada en catalán “Les excursionistes calentes”, de la que ya han pasado 25 años (la primera película porno rodada en catalán, en 1999), y todavía se le pregunta por ello “ayer mismo salí en un programa de televisión al respecto...Y algo tiene que ver, en el fondo, pues esa película tenía en su entorno las montañas (por ello lo de “las excursionistas” en el título), y en esta se cifra en el maravilloso mar de Blanes...”.
Todos los que salen en el filme son de la localidad costera, tanto el equipo técnico como el artístico: “somos “como el Ahtletic de Bilbao”: en ese equipo todos son vascos, aunque alguno pueda ser de raza negra, porque hoy día en las ciudades hay mezcla”. Ha sido rodada en coworking, para ahorrar gastos, y puede presumir de “película sostenible”.Para Conrad “podría haberse rodado en 25 días, pero se ha hecho en tres meses, porque al ser actores amateurs (previo casting) estábamos a expensas de otros trabajos que cada intérprete tenía en la vida real”.
Conrad Son todavía está bajo los efectos del exitoso estreno, (creo que exagerado”), señala con modestia, y hubo un segundo pase, en el mismo cine el jueves 28 en OCINE Blanes Luego se intentará promocionar en Barcelona. Una escritora tan prestigiosa como Isabel Roma ha dicho en sus medios, del filme:“Quina experiencia i aprenentage. Magistral !” (¡Qué experiencia y aprendizaje. Magistral!).
Argumento
La película está hecha por la productora Smart Cinema Blanes, y se ha rodado entre Blanes y Malgrat con un equipo técnico y artístico km 0 de sostenibilidad. La productora es Eva Fernández, que se muestra satisfecha de la resonancia que ha tenido en el sector audiovisual, siendo una empresa pequeña y modesta. En el último Girona Film Festival obtuvo una Mención Honorífica”, y en el Cerdanya Film Festival fue una de las películas más taquilleras, compitiendo con “La casa en flames”.
La protagonista Noa es una escritora que ha publicado un best seller. Cuando regresa a su pueblo, Blanes, reconoce en una entrevista radiofónica que ella no es la autora del libro sino su madre (fallecida hace diez años)...Este episodio reabre heridas del pasado en la escritora y su entorno familiar. Todo se desarrolla en cinco días de sinsabores, pensamientos culpables, amor y desamor, todo ello entre medias verdades...Los problemas de salud mental complican las cosas, y conducen a un territorio hostil.
“Tot allò que no et vaig dir”, recupera para el cine los monólogos, las conversaciones largas y la importancia, en definitiva, del texto. Unido a ello un entorno bonito con atardeceres, amaneceres, y el mar de fondo de Blanes.