Escena de 'Neva'

Crítica de la obra 'Neva': teatro y vida con humor de fondo

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sábado 18 de febrero de 2023, 18:11h

Tres soberbios actores, Marta Cuenca, Julia González Enriques y David Hernando Vargas protagonizan ‘Neva’, del dramaturgo chileno Guillermo Calderón, fiel exponente de la llamada Generación del 2000, una serie de dramaturgos chilenos empeñados en renovar formas, temas y su abordaje en la escena de los mismos en su país. Puede verse durante unas semanas más en el Umbral de Primavera, dentro del VIII Ciclo de Teatro Argentino.

‘Neva’, es la opera prima de Calderón, un texto inteligentemente escrito y sutilmente dirigido por Jorge Sánchez en el que durante toda la representación sobrevuela la figura de Chejov, en medio de tres actores que se encuentran en pleno proceso de ensayo de El jardín de los cerezos, en la que hacen mucho más que jugar en escena sobre los límites del teatro y su interconexión profunda, radical, íntima con la misma vida de quienes lo hacen posible –autor, director, actores, equipos y público–. “…No me vengas a decir que en el escenario se sufre, porque no se sufre; se sufre en la vida. Odio al público que viene a entretenerse mientras el mundo se acaba. Vienen a suspirar, buscando cultura. Debería darles vergüenza; debería darle el dinero a los pobres que se están muriendo de hambre; a los niños que se les caen los dientes de leche y ya no les vuelven a salir…”.

La fábula se sitúa en San Petersburgo, Rusia. Mientras las tropas reprimen a los obreros que se manifiestan en las calles para mejorar sus condiciones de vida, dos actrices y un actor tratan de ensayar en un teatro situado frente al río Neva. Allí su vida, solo pretendidamente ajena al entorno, gira en torno a ese nuevo ensayo de Olga Knipper, viuda de Antón Chéjov, intentando meterse en el corazón de su personaje para reverdecer las mieles del éxito, buscando no renunciar a la vida de otro tiempo, ni al flirteo con los actores, pero ese empeño vuelve a situarla en el corazón de la existencia, que es lo mismo que decir en el corazón del teatro. En una y en otro sobrevuelan siempre los mismos temas, las mismas dudas sobre el amor, la muerte, la verdad, el sentido del arte en general como bálsamo de la vida, y del teatro en particular. Y allí están presentes las luchas de los egos de los actores, sus pasiones, el fino sentido del humor y los romances entre los propios actores.

LA CANTERA exploraciones teatrales, compañía creadora y productora del espectáculo, firma también la escenografía, la iluminación y el vestuario, que conforman un espacio a media luz, muy realista, que transporta al espectador a la Rusia de principios del siglo XX donde Olga, Masha y Aleko hablan, opinan y ensayan en un ejercicio en donde el espectador, y los propios personajes, no llegan nunca a delimitar en cual de los tres registros se encuentran en cada momento de la obra.

La crítica, la autocrítica y los resortes más íntimos de toda creación escénica salen aquí a flote en esta propuesta de teatro dentro del teatro verdaderamente fascinante. ¡Imperdible!