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Imagen promocional de 'Hysteria' (Foto: Vanessa Rabade)

Crítica de la obra de teatro 'Hysteria': insatisfacción permanente

jueves 26 de septiembre de 2024, 12:26h

El Teatro de la Abadía inaugura su temporada teatral con una propuesta probablemente arriesgada que no sé muy bien si sabrá encajar su público habitual. Se trata de una producción conjunta entre La Abadía y Kamikaze, ‘Hysteria’, con texto y dirección de la joven Carla Nyman (premio hace unos años con Yo sólo vine a ver el jardín, su ópera prima en el Certamen Internacional Almagro OFF). En todo caso, bienvenida la actitud de La Abadía al hacer un hueco a propuestas no convencionales en el campo teatral porque no hay arte sin riesgo.

La y griega introducida en el título de la pieza marca ya la clave de lo que el espectador va a contemplar: un viejo asunto, el de la histeria, pero examinado con ojos nuevos, con nueva mirada, la de una joven artista (dramaturga, directora de escena, poeta y novelista), que lo mismo descubre a muchos espectadores nuevos caminos para enfrentarse al asunto. La propuesta, en todo caso, se apoya en el cuerpo, la voz y la absoluta entrega de otros dos jóvenes, pero, a la vez, experimentados intérpretes: Lluna Issa Casterà y Mariano Estudillo, que dan todo un recital de interpretación y salen muy bien parados de la aventura.

No se dejen engañar por esta breve síntesis de lo que inicialmente se aborda en ‘Hysteria’ porque hay mucho más rodeándola por delante, por detrás, por arriba y por abajo. Pero, en fin, es verdad que la cosa comienza con una mujer, Agustina, que acude a la consulta del Dr. Doctor por un dolor que ha estado albergando en su interior durante mucho tiempo. Tras un exhaustivo y detenido examen de la paciente, el médico acaba siendo literalmente absorbido por el cuerpo de Agustina. Este hecho desemboca en una vivencia íntima a dos voces, a dos cuerpos, a dos sensibilidades sobre un sinfín de malestares, deseos y anhelos reprimidos…

A partir de ahí, y con un tratamiento exquisito de la plástica escénica, la pieza conduce a momentos de una hermosísima belleza levantada al alimón por todo el equipo artístico: la poética luz de David Picazo, la imaginativa escenografía de Monica Boromello, el sonido de Sandra Vicente, el vestuario de Mónica Teijeiro, la coreografía de Juan Pérez, el movimiento de Danielle Mesquita, la asesoría musical y los brillantes arreglos vocales de Ruth Rubio, así como el trabajo del resto del equipo. Todos ellos conducen al espectador en una suerte de “cosmogonía” -como la misma Nyman califica el montaje-, en donde la ‘Hysteria’ se sitúa frente a la lógica, la ensoñación se contrapone a la realidad y todo ello desemboca en un surrealismo explícito y lleno de ironía, sarcasmo y humor como clavos a los que agarrarse para huir de lo impuesto por la lógica de lo biempensante, de lo políticamente correcto.

En la pieza, concentrada en el cuerpo y la voz de los actores, se mezclan personajes y asuntos tan dispares como la Semana Santa sevillana, Marco Aurelio, Stalin, filósofos modernos como Kierkegaard, Samuel, un perro que habla y sabe leer e incluso tiroleses alpinos del Oktoberfest de Múnich... Surrealismo de primera que, como todo surrealismo desemboca en el más absoluto absurdo.

Y, sin embargo, y sabiendo que la pieza huye de cualquier factura clásica del teatro que cuenta una historia de forma lineal (planteamiento, nudo y desenlace), posee un poder de atracción innegable por su inmensa belleza plástica, arropada con un entorno sonoro y musical cautivadores que los dos estupendos actores saben conducir con entrega absoluta de principio a fin del montaje.

Supongo que habrá mil y una interpretaciones de lo que Nyman sugiere en su pieza, pero, al que suscribe, le ha llegado claro el mensaje de que es la libertad del individuo la que ha de imponerse siempre a la norma, a la autocensura, a la represión. Es, quizás, el único camino alternativo para intentar sustituir ese vacío interior del hombre y la mujer de nuestros días.

‘Hysteria’

Texto y dirección: Carla Nyman

Concepto: Carla Nyman y Alejandro Pérez-Paredes

Intérpretes: Lluna Issa Casterà y Mariano Estudillo

Ayudante Dirección: Ruth Rubio

Voz Perro heideggeriano: Marcial Álvarez

Voz Samuel: Samuel Padilla

Creación escénica: Lluna Issa Casterà, Mariano Estudillo, Juan Pérez, Danielle Mesquita, Ruth Rubio, Carla Nyman, Colectivo amor&rabia

Diseño de escenografía: Monica Boromello

Diseño de iluminación: David Picazo

Diseño de sonido: Sandra Vicente

Diseño de vestuario: Mónica Teijeiro

Coreografía: Juan Pérez

Asistencia artística: Lluna Issa Casterà

Ayudante de escenografía: Nuria Díaz-Tejeiro

Asesoría de movimiento: Danielle Mesquita

Asesoría Musical y arreglos vocales: Ruth Rubio

Construcción escenografía: Mambo Decorados

Realización escenografía textil: Estrella Baltasar

Fotografías escena: Vanessa Rábade

Vídeo-Teaser: David González

Producción ejecutiva: Pablo Ramos Escola

Dirección de producción: Jordi Buxó y Aitor Tejada

Distribución: Caterina Muñoz Luceño

Producción: Teatro Kamikaze y Teatro de la Abadía

Teatro de la Abadía, Madrid

Del 25 de septiembre al 13 de octubre de 2024

José-Miguel Vila

Columnista y crítico teatral

Periodista desde hace más de 4 décadas, ensayista y crítico de Artes Escénicas, José-Miguel Vila ha trabajado en todas las áreas de la comunicación (prensa, agencias, radio, TV y direcciones de comunicación). Es autor de Con otra mirada (2003), Mujeres del mundo (2005), Prostitución: Vidas quebradas (2008), Dios, ahora (2010), Modas infames (2013), Ucrania frente a Putin (2015), Teatro a ciegas (2017), Cuarenta años de cultura en la España democrática 1977/2017 (2017), Del Rey abajo, cualquiera (2018), En primera fila (2020), Antología de soledades (2022), Putin contra Ucrania y Occidente (2022), Sanchismo, mentiras e ingeniería social (2022), y Territorios escénicos (2023)

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