Si José Manuel Mora y Carlota Ferrer aplicaron en su último montaje su particular mirada al drama lorquiano de La casa de Bernarda Alba, ahora dirigen su atención a El pequeño Eyolf, un texto que Henrik Ibsen escribió en 1894. En él se basa José Manuel Mora para reconstruir libremente ese drama existencial y acercarlo a nuestros días bajo el título de ‘El último rinoceronte blanco’. Junto a Carlota Ferrer, que dirige el montaje, han levantado una dramaturgia en la que se funden palabra, danza, música e imagen con los viejos y los modernos problemas íntimos del ser humano que, aunque adoptan nuevas formas, 125 años después, en el fondo siguen siendo los mismos. La propuesta escénica puede verse hasta el próximo 12 de mayo en la Sala Negra de los Teatros del Canal
Carlota Ferrer, además de dirigir el montaje, firma también la escenografía, el vestuario y la abundante coreografía que atraviesa un montaje lleno de aciertos estéticos que culminan con una emocionante escena final en la que Rita -inmensa Julia de Castro- interpreta una canción tristísima que pone punto y final a una intensa, tortuosa y egoísta relación matrimonial con Allmers (Cristóbal Suárez). Y junto a ellos, completan el reparto Verónica Forqué (brillante, intencionado y graciosísimo su monólogo inicial), micrófono en mano), Carlos Beluga, Lucía Juárez, Alejandro Fuertes Marciel / Mateo Martínez y Emilia Lazo.
Allmers y Rita llevan ya varios años casados y tienen un hijo, el pequeño Eyolf, al que esta no ha prestado nunca mucha atención. El marido, escritor, está entregado a la elaboración de un libro sobre la educación de los hijos hasta que un buen día, en medio de un viaje familiar, decide que es mucho mejor llevar a la práctica todas sus teorías. Esa decisión hace que Rita se sienta progresivamente mucho más sola (“jamás existieron lazos de amor entre nosotros…”), y, entre el matrimonio, se vaya abriendo una brecha que se hace cada vez más infranqueable.
La hermosa iluminación de David Picazo, el exquisito sonido de Sandra Vicente, junto a la labor de ingeniería de Fernando Valero, en medio de una sencilla pero efectista escenografía de Ferrer, dejan la libertad necesaria para que los actores pongan su voz, su cuerpo y su emoción al servicio de una historia dolorosa que cuestiona a los personajes (y a nosotros mismos) sobre las relaciones personales, familiares y sociales, y a la herencia que vamos a dejar a nuestro alrededor. Un montaje interesante en medio de una propuesta llena de belleza.
‘El último rinoceronte blanco’
De José Manuel Mora. Inspirado en ‘El pequeño Eyolf’, de Henrik Ibsen
Dirección: Carlota Ferrer
Intérpretes: Verónica Forqué, Cristóbal Suárez, Julia De Castro, Carlos Beluga, Lucía Juárez, Alejandro Fuertes Marciel / Mateo Martínez y Emilia Lazo
Dramaturgia: José Manuel Mora y Carlota Ferrer
Ayudante de dirección: Enrique Sastre Escandón
Diseño de Iluminación: David Picazo
Diseño espacio sonoro: Sandra Vicente
Diseño de espacio escénico y vestuario: Carlota Ferrer
Ingeniería: Fernando Valero
Coreografía: Carlota Ferrer
Diseño gráfico: Luis Camafreita
Fotografía: Ilde Sandrín
Producción Ejecutiva: Fernando Valero
Producción: Teatros del Canal, Draft.inn (Meine Seele Teatro), PREVEE S.L., Artífice Escénico
Distribución: Clara Pérez – info@claraperezdistribucion.com
Teatros del Canal, Madrid
Hasta el 12 de mayo de 2019
Más información en https://www.teatroscanal.com/espectaculo/carlota-ferrer-draft-inn/