El fenómeno Donald Trump en Estados Unidos no deja de generar polémica. El último revuelo ha sido causado, ni más ni menos, que por su pene. Y no es porque se haya hecho aprecio de sí mismo en medio de un debate o mitin republicano, ha sido un compañero suyo de partido quien insinuó que el magnate tenía el pene pequeño.
El también candidato a liderar el partido republicano para aspirar a la Casa Blanca en las elecciones que se celebrarán a final de año, Marco Rubio, introdujo el miembro de Trump en la mesa de debate republicano que se celebraba este jueves. “¿Saben lo que dicen de los hombres con manos pequeñas?”, dijo el también senador republicano. A lo que Trump salió como pudo del paso, asegurando que lo suyo no era cosa menor: “os garantizo que no hay ningún problema. Os lo garantizo”, sentenció el magnate.
Además, la artista Illma Gore desencadenó la bomba cuando publicó un dibujo del candidato republicano retratado con un micropene y totalmente desnudo, algo que se convirtió viral en las redes.
Esta polémica se une a la ola de críticas que el partido republicano ha lanzado contra su propio candidato. Y es que ya nadie se toma a broma a Trump. El mismo jueves por la mañana, fue el propio excandidato republicano a la Casa Blanca, Mitt Romney quien asestaría un golpe al magnate, calificándole de “fraude” y de “no apto para la presidencia”. Algo que Trump contestó a su manera “le podía haber dicho: de rodillas”, en referencia a cuando en 2012 le suplicó su apoyo para echar a Obama de la Casa Blanca.