25/03/2012@12:30:29
Como si sacase unos ajos con los que espantar a los vampiros que trataron de chuparle la sangre en un pasado no muy lejano. Así ha escrito José Miguel Arroyo sus memorias, que publica Espasa bajo el título "Joselito el verdadero". Porque los vampiros muchas veces se llevan dentro y en ocasiones son los propios pensamientos, los recuerdos que duelen, los dolores que no se fueron, la rabia, la impotencia, la amargura. Y la mejor medicina es escupir la hiel para empezar a saborear los postres de una vida cuyos primeros platos José se comió a bocados.