El de Galapagar fue el gran triunfador en Barcelona
Clima de gran emotividad y tristeza y toros sin trapío para una efeméride así
25/09/2011@19:31:50
Y
seis siglos después, el nacionalismo catalán, representado por sus
políticos y apoyado por los antitaurinos, apuntilló a la Fiesta. La
última corrida, con un gran triunfo de José Tomás, que volvió a erigirse
en sumo sacerdote de esta religión olorosa y flamígera, echó el cierre a
una historia que comenzó oficialmente en 1687 en Barcelona con Juan I
como rey de la Corona de Aragón Eso sí, es justo y necesario destacar
que el encierro de la divisa de El Pilar fue indecoroso e impropio por
su escaso trapío no sólo para esta especial efeméride, sino para un coso
de primera categoría como La Monumental. Tal y como sucedió en el festejo anterior, los tres toreros por la puerta grande y fueron acompañados por los aficionados hasta el hotel.