Se puede
organizar una disputa diplomático-judicial con Argentina
09/05/2013@18:17:40
La jueza
argentina María Servini de Cubría, en cuyas manos cayó la querella por los
crímenes del franquismo tras el procesamiento de Baltasar Garzón, lo tenía todo
dispuesto en Buenos Aires para tomar declaración por videoconferencia a los
denunciantes de los crímenes del franquismo. De repente, llegó la orden: el
Ministerio español de Asuntos Exteriores lo prohibía y amenazaba con rescindir
unilateralmente convenios bilaterales. La jueza dio marcha atrás antes de que
se pudiera iniciar un conflicto de incalculables consecuencias. Diariocrítico
ha tenido acceso a su propio relato.