artur mas y el rey

La semana termina con un viaje en el tiempo. Desde el presente del Ayuntamiento de Madrid donde no paran de dar carnaza a los tertulianos sin distinción de ideologías con genialidades del calibre de ‘Versión Original’, hasta el pasado reciente con la posible venta del famoso aeropuerto de Ciudad Real, una ronda de 450 millones por cortesía de la Caja de Castilla y La Mancha, a unos avispados chinos por apenas 10.000 euros. A ambas noticias les robó el protagonismo Artur Mas, de nuevo en el ‘candelabro’, o mejor dicho bajo los candelabros de La Zarzuela para una audiencia con Felipe VI en la que se ha presentado con su lista única soberanista bajo el brazo. “¡Estamos en un país tan excéntrico!” La frase de Paco Marhuenda resume perfectamente lo que seguramente deben estar pensado muchos ciudadanos.

Poco más sabemos más que de gestos y ambiente previo en la cita. El presidente de la Generalitat, Artur Mas, has asegurado este viernes antes de ser recibido en audiencia por el Rey Felipe VI en el palacio de la Zarzuela que ha venido "en son de paz". Mas no tiene previsto hacer declaraciones al término del encuentro. Al monarca se le vio serio, y al parecer le dejó salir antes al líder catalán una vez que salieron del despacho, algo inusual y que algunos interpretan como un gesto de cordialidad pero también de posible desafío y ruptura institucional.