27/08/2015@10:04:22
Qué duda cabe de que son seres superiores. Los toreros. Un ejemplo más es el de Saúl Jimémez Fortes, que tras su gravísima cornada en el cuello -la segunda esta campaña tras la de San Isidro- que sufrió en Vitigudino y que pudo costarle la vida y de la que es más que posible le queden importantes secuelas, sólo piensa en volver a torear. Así lo ha expresado nada en rueda de prensa en el Hospital de Salamanca nada más recibir el alta médica.