A hombros Simón, El Juli y Garrido en la última del abono
17/09/2015@14:32:00
Los antitaurinos lo tiene fácil, porque, como en el caballo de Troya, el enemigo está dentro de la propia Fiesta. Y en mucha medida en la autoridad, tantas veces incompetente. Como los dos usías del coso de Albacete, sobre todo uno, Joaquín Coy, que con la ayuda de El Juli, incumplió el reglamento al indultar el cuarto de la tarde, muy justo de trapío, de otro de los poderes fácticos de la tauromaquia albaceteña, Daniel Ruiz. Lo más auténtico fue un heroico López Simón, que reaparecía.