Un juez forense del Reino Unido ha hecho este martes pública la autopsia de la cantante irlandesa Sinéad O'Connor, que murió el pasado julio en Londres a los 56 años de edad, dictaminando que se debió a "causas naturales".
La artista fue encontrada muerta el 26 de julio en su domicilio del sur de la capital británica, ciudad a la que se había mudado a vivir ese mes desde su Irlanda natal.
Un comunicado de la Corte Forense de Southwark ha dado la confirmación este martes que O'Connor "murió por causas naturales" y, por tanto, el juez "forense ha concluido su implicación" en este caso.
Pocos días antes de su muerte, la cantante dublinesa había escrito un mensaje en su cuenta de Facebook donde informaba a sus seguidores de que se había marchado a Londres y estaba finalizando un discos para publicarlo este año.
Esta instancia judicial ya aseguró el pasado julio que llevaría a cabo una autopsia para determinar las causas del fallecimiento, después de que la Policía metropolitana (MET) comunicara entonces que no se consideraba "sospechosa".
Activismo y polémicas
O'Connor fue una de las mejores cantantes de su generación pero no solo se destacó por su talento musical, dejando grandes discos como 'The Lion and the Cobra' o 'I Do Not Want What I Haven't Got' (que incluía su mítica versión del 'Nothing Compares 2 U' de Prince), sino también por su activismo y valentía al abordar temas controvertidos. Desde denunciar los abusos en la Iglesia Católica hasta su lucha contra la discriminación y la injusticia, siempre defendió sus convicciones y utilizó su fama como plataforma para el cambio social.
Para siempre quedará su imagen ante las cámaras rompiendo una foto del por entonces papa, Juan Pablo II.