La salud de la familia real británica sigue siendo uno de los focos de preocupación, pues a los cáncer que sufren Kate Middleton y el rey Carlos III, se ha sumado el problema de la reina Camila.
La reina consorte también está en una época complicada al igual que su marido, pues el peso de la corona es mayor a sus edades.
Hace un mes tuvo que suspender toda su agenda debido a una infección pulmonar y aunque en un principio parecía una neumonía pasajera, el problema se está agravando.
La prensa británica muestra la preocupación por la salud de otro miembro de la realeza y de nuevo, los comunicados de Buckingham Palace son muy escuetos y sin apenas detalles.
Desde el anuncio de su neumonía apenas ha aparecido en actos oficiales y cuando lo ha hecho ha sido con un papel menor y con una apariencia preocupante. Además, ha cancelado varios actos a última hora por no encontrarse del todo bien.
Eventos tan destacables como la recepción del emir de Qatar y su esposa, invitados expresamente por el monarca, no va a poder acudir, así como se vaticina que tampoco acudirá al Desfile de la Guardia a Caballo o al almuerzo con el qatarí.
Muchos dan por hecho que la monarca tiene covid y una de las secuelas es la neumonía, pero desde palacio no han confirmado ni desmentido nada, solo se han limitado a decir que padece una infección pulmonar.
¿Complicaciones?
La reina Camila tiene 77 años y el rey 76; por lo que cualquier patología puede suponer riesgos extra.
El monarca está atravesando un cáncer, pero su agenda sigue en marcha, aunque tras la enfermedad de su esposa las alarmas sobre la fragilidad de los monarcas han vuelto a dispararse.
En los medios y en las redes sociales se especula con posibles complicaciones de la infección de pecho de la reina ya que lleva un mes prácticamente de baja. Su edad y la poca información que Buckingham revela hacen que las teorías sobre problemas graves se disparen.
Y es que este mismo año el silencio informativo del principio sobre Kate Middleton acabó desembocando en la confirmación de que padecía cáncer.
2024, sin duda, está siendo uno de los peores años para la monarquía británica en lo que a salud se refiere.