Santo Tomás Apóstol junto a Cristo resucitado (Foto: Ideogram/DC)

Hoy es Santo Tomás (3 de julio): quién fue este santo

redacciondiariocriticocom/9/9/23

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Hoy, 3 de julio, se celebra el día de Santo Tomás según el santoral católico. ¿Quién era este personaje y por qué fue santificado?

Se trata del apóstol santo Tomás, el famoso apóstol que dudó de que Jesucristo resucitara y pidiera meter sus dedos en sus heridas para comprobar que era el mismo que murió en la cruz y lanzeado por los romanos. Entonces Jesús le mostró su costado y dejó esa famosa frase de los Evangelios: "Porque me has visto, has creído; dichosos los que creen sin haber visto".

Vida y obra

La tradición cuenta que Santo Tomás Apóstol fue martirizado en la India el 3 de julio del año 72. Se dice que en sus últimos años predicó en Persia y en la India, donde encontró su martirio. El Evangelio narra tres episodios significativos de este apóstol.

El primero se desarrolla cuando Jesús se dirige por última vez a Jerusalén, sabiendo que será torturado y asesinado. Los discípulos, llenos de temor, le dicen a Jesús: "Los judíos quieren matarte, ¿y vuelves allá?". Es entonces cuando interviene Tomás, llamado Dídimo (nombre griego que significa "el gemelo", equivalente a Tomás en hebreo). Según San Juan (Jn. 11,16), "Tomás, llamado Dídimo, dijo a los demás: Vayamos también nosotros y muramos con Él". Aquí Tomás muestra un valor admirable. Un escritor mencionó que Tomás demostró no solo una "fe esperanzada, sino una desesperación leal". A pesar del miedo, estaba decidido a no abandonar a Jesús. El verdadero valor no implica ausencia de miedo, sino actuar a pesar de él. Tomás es un ejemplo de alguien que, a pesar del temor, hizo lo que su conciencia le dictaba.

La segunda intervención de Tomás ocurre durante la Última Cena. Jesús les dice a los apóstoles: "A donde Yo voy, ya sabéis el camino". Tomás responde: "Señor, no sabemos a dónde vas, ¿cómo podemos saber el camino?" (Jn. 14, 15). Los apóstoles no comprendían el camino de la Cruz que Jesús debía seguir. Tomás, sincero y serio, expresa su incapacidad para entender, buscando siempre la certeza.

La respuesta de Jesús a la duda de Tomás es una de las declaraciones más importantes del Hijo de Dios: "Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida. Nadie va al Padre sino por mí". Esta frase ha sido meditada diariamente por santos como el Padre Alberione, fundador de los Padres Paulinos. Es una afirmación que impresiona tanto a los que la escucharon en ese momento como a nosotros hoy. Jesús habla de tres conceptos cruciales para los israelitas: el Camino, la Verdad y la Vida. En sus viajes por el desierto, equivocarse de camino significaba perderse, mientras que seguir el camino correcto los llevaba a su destino. Jesús no solo muestra el camino, sino que declara ser Él mismo el Camino, la Verdad y la Vida, garantizando la llegada a la felicidad eterna si le seguimos.

Nadie ha pintado a Santo Tomás, cuya festividad se celebra #Taldíacomohoy , 3 de Julio, como Caravaggio. Cuadro pintado en 1602, se encuentra en el Palacio de Sanssouci (Potsdam, Alemania). (sigue) pic.twitter.com/uqNKXX9pak
— Inma (@isl1965) July 3, 2024

Finalmente, el episodio más famoso de Tomás es su incredulidad sobre la resurrección de Jesús y su posterior confesión de fe. Según San Juan (Jn. 20, 24), Tomás no estaba presente en la primera aparición de Jesús resucitado. Los discípulos le dicen: "Hemos visto al Señor", pero él responde: "Si no veo en sus manos los agujeros de los clavos, y si no meto mis dedos en los agujeros de los clavos y no meto mi mano en la herida de su costado, no creeré". Ocho días después, Jesús se aparece nuevamente y le dice a Tomás: "Acerca tu dedo: aquí tienes mis manos. Trae tu mano y métela en la herida de mi costado, y no seas incrédulo sino creyente". Tomás responde: "Señor mío y Dios mío". Jesús le dice: "Has creído porque me has visto. Dichosos los que creen sin ver".

Esta famosa escena de la duda y fe de Tomás nos enseña la importancia de la sinceridad y la búsqueda de la verdad en la fe, destacando que la duda honesta puede conducir a una fe profunda y genuina.