Con estos resultados, Ciudadanos gana en las urnas (37 escaños y más del 25% de los votos) y queda legitimada como fuerza política revolucionaria para cambiar de aires a Cataluña, aunque poco puede hacer frente a la mayoría absoluta independentista. Esta mayoría, aunque menor que en 2015 en escaños pero no en votos, hace frente al Gobierno central de Mariano Rajoy y da la respuesta más contundente posible a la aplicación del artículo 155. Precisamente el partido del presidente, el PP, se hunde y se queda sin grupo propio en el Parlament, al necesitarse al menos 5 escaños, cifra que no alcanzó al sumar sólo 3.
La CUP también tropieza con contundencia y se queda sin grupo propio, pero aportaría sus 4 parlamentarios (antes 10) para formar un nuevo Govern soberanista, que estaría liderado de nuevo por Carles Puigdemont, quien, por sorpresa, ha superado al final a la ERC de Oriol Junqueras: 34 escaños frente a 32. Ni el tirón que ha tenido el republicano preso por su estancia en la cárcel ha sido suficiente para superar al heredero de la antigua CiU, partido que siempre había ganado en las urnas tras el franquismo. Un cambio de planes que apenas se esperaba, que legitima al ex president y le da una fuerza que pocos pensaban que llegaría a ostentar.
Por su parte, los socialistas de Miquel Iceta mejoran sus resultados de 2015 pero sólo discretamente (17 frente a 16), siendo otra decepción electoral más de esta noche. Aunque al menos quedan en mejor lugar que sus rivales de la izquierda, los 'comunes' de Domèmech, Colau e Iglesias. Catalunya en Comú-Podem termina siendo irrelevante en el nuevo Parlament a configurar en enero. Pasa de 11 escaños a tener sólo 8, por debajo de lo esperado.
Conclusiones
La gran conclusión es que el frente independentista ha perdido votos y escaños respecto a las anteriores elecciones y paga su proceso soberanista, pero no lo suficiente como para ser superados por la oposición constitucionalista.
Y es que Inés Arrimadas ha hecho historia siendo la candidata más votada, con más del 25% de los votos y el apoyo masivo de una Cataluña no soberanista ni nacionalista desconocida hasta ahora. Obtiene 37 escaños, 12 más que en 2015. Es el único partido que supera el millón de votos. Impresionante.
Una participación de récord
El nivel de participación ha sido histórica en las elecciones catalanas: un 81,83%, 7 puntos por encima de la alcanzada en las elecciones de 2015. Si bien en el primer avance de las 13h las diferencias con el 2015 no eran significativas, a las 18h la participación ya subía más de 5 puntos. Una vez han cerrado los colegios electorales, las encuestas apuntan a un escenario muy ajustado en el que el independentismo lograría una mayoría suficiente en el Parlament para hacerse con la Generalitat.
Por lo demás, el recuento fue algo lento debido a posibles problemas informáticos tras el ataque hacker a los sistemas de Indra, empresa encargada del recuento provisional y de la distribución a los medios de comunicación.