La ciudad asturiana de Oviedo ha sido elegida la nueva Capital Española de Gastronomía para el 2024 y ¡con mucha razón! Las ciudades españolas que han ostentado esta distinción desde su creación en 2012 han sido: Logroño (2012), Burgos (2013), Vitoria (2014), Cáceres (2015), Toledo (2016), Huelva (2017), León (2018), Almería (2019), Murcia (2020/21), Sanlúcar de Barrameda (2022) y Cuenca (2023).
Con el apoyo de la FEPET (Federación Española de Periodistas y Escritores de Turismo), y la Asociación Española de Hoteles, se creó esta distinción para promover el turismo y resaltar las delicias gastronómicas de las distintas regiones del país. En su duodécima edición, la ciudad de Oviedo representa la excelencia de la gastronomía asturiana. Oviedo, la capital del Principado de Asturias, ha sido y es considerado siempre un paraíso gastronómico para los gourmets españoles y ahora aspira a conseguir mayor reconocimiento en el extranjero.
Algunos de sus platos más tradicionales son la FABADA(el emblemático guiso de fabescon compangude chorizo, morcilla, lacón y tocino); el CACHOPO, (un filete de ternera empanado y crujiente relleno además con jamón y queso); y el PITU CALEYA (un plato de pollo salvaje preparado de diversas y sabrosas maneras). Gracias a la riqueza de la tierra y a la abundante lluvia, las carnes también son excelentes y contando con la proximidad del mar Cantábrico, Oviedo ofrece maravillosos platos de pescado y marisco: merluza, rape, salmonete, caballa, centollo, percebes, bogavante, pulpo...
La gastronomía de la ciudad también destaca en el departamento de los postres con los deliciosos carbayones, un rico hojaldre relleno de almendras y glaseado demermelada y clara de huevo. La popularidad de este postre es tal que presta su nombre a los naturales de Oviedo que les llamancarbayones u ovetenses. Otro rico manjar es la moscovita, una galleta de almendra cubierta de chocolate, que pueden encontrarse en pastelerías centenarias como Camilo de Blas y Rialto. Y, por supuesto, está el delicioso arroz con leche y más de 100 quesos diferentes, el más famoso de los cuales siendo naturalmente el Queso de Cabrales.
Aunque los vinos locales son excelentes, no hay nada que se pueda comparar con la bebida más tradicional de la región: la sidra, que no se parece a ninguna otra en todo el mundo. Para poder disfrutar de su verdadera esencia y sabor hay que escanciarlo, como se hace en los chigres (bares de tapas especializados en sidra). Escanciar bien la sidra requiere gran habilidad,pero es la mejor manera de realmente saborear la bebida. Se levanta la botella sobre la cabeza y se echa el líquido dorado a un vaso de cristal muy fino inclinado a la altura de la cintura, de modo que forme un ángulo de 45º. Solo se echa un “culín” que se debe beber de un solo trago. La sidra está en su mejor momento al año de su producción, según nos contaron en la sidrería Llagar Herminio fundada en 1943, que embotella la famosa marca Zythos.
No es de extrañar que Oviedo pueda presumir de una gastronomía local tan extraordinaria, ya que se nutre de una impresionante historia. El rey Pelayo empezó aquí su Reconquistade España en el siglo VIII y, años más tarde, el rey Alfonso II "El Casto" emprendió la primera peregrinación a Santiago de Compostela, donde fueenterrado el ApóstolSantiago hace aproximadamente 1.200 años.
Oviedo es una ciudad bella, encantadora y abierta que posee gran importancia histórica, reflejada en su arquitectura monumental como la catedral gótica de San Salvador, que atesora la Arca Santatraída a Oviedo en el siglo IX desde Jerusalén para custodiar un trozo de la Sábana Santa que cubría la cabeza de Cristo. Se cree que el resto del Santo Sudario se encuentra en la Catedral de Turín en Italia,
Los gaiteros suelen animar el ambiente del casco antiguo, especialmente en la calle Gascona, manifestando así los orígenes celtas de la ciudad. Esta“tuna a la asturiana” no deja de incluir en su repertorio el popular himno de la región: "Asturias, patria querida. Asturias de mis amores...", que puede encarnar los verdaderos sentimientos de cualquier persona que pase algún tiempo en Oviedo, particularmente durante su "reinado" como Capital Gastronómica Española en 2024.
Dónde alojarse: El Hotel Reconquista, un antiguo orfanato que data de mediados del siglo XVIII, reconvertido en un lujoso hotel de cinco estrellas situado en el centro de la ciudad.
Dónde cenar: "Bocamina", una famosa sidería en el centro del pueblo, decorada para recordarnos de los orígenes mineros de la región; "La Finca", ubicado en la popular calle Gascona; "La Corte de Pelayo", para alta cocina tradicional; y "Del Arco", que combina lo tradicional con lo moderno.
Qué ver: Las iglesias prerrománicas de Santa María del Naranco y San Miguel de Lillo, que ofrecen una magnífica vista de Oviedo desde el monte Naranco. La Catedral de San Salvador con su torre gótica (se sube 183 peldañosde una escalera de caracol, perola vista merece la pena), la Cámara Santa que custodia la Arca conun trozo de la Sábana Santa y la tumba de Alfonso II El Casto, entre otras reliquias importantes. Hay que pasear por las calles del centro histórico y visitar su extraordinario mercado de abastos, el Museo de Bellas Artes con pinturas de El Greco, Miró, Zurbarán, Sorolla, Picasso, Dalí, Miró, Barceló, etc., el Teatro Campoamor y más de un centenar de importantes esculturas repartidas por toda la ciudad, entre ellas, una dedicada a Woody Allen. El actor-director se enamoró de la ciudad cuando recibió el Premio Príncipe de Asturias en 2002 y volvió a la ciudad para rodar parte de su película "Vicky, Cristina, Barcelona".