Gran decepción en la portada de
¡Hola! Pensaba yo que Sonsoles Suárez escapaba al circo de vender las bodas
pero no, ahí la tenemos sonriente con su guapo y gentil Wilson (su novio desde hace
12 años) Se nota la mano de la ambiciosa Susana Urribari, representante de
famosos y más conocida por dar exclusivas cada dos o tres meses diciendo si se
casa o no se casa con su novio Darek. A este paso la pobre irá a todas las
bodas excepto a la suya. Normal que se le haya quedado la caracartón que luce
actualmente. Siempre he pensado que las mujeres con curvas y rellenas tienen
mejor semblante que las que se someten a dietas draconianas. En el fondo
esconden idéntica frustración: se mueren de hambre pero lo controlan.
Guti y Romina, también vía
exclusiva, anuncian futura paternidad. En el caso de estos dos tórtolos no
extraña que lo vendan y lo cuenten. Y ya podemos dar gracias a Dios a que no
nos detallen cómo fue la concepción dada su afición a contarnos vía twitter con
pelos y señales cómo es su día a día. Dicen que su boda será íntima y que la
contarán cuando ya haya sucedido. Claro, como siempre. Se casan y luego nos lo
cuentan vía Hola una semana más tarde. Apenas está de siete semanas pero han decidió
hacerlo público. Arriesgados sí son los muchachos.
Penélope Cruz concede una
entrevista que Love ha comprado. Es tan densa y dice tan poco que hasta pereza
da leerla. Al final no dice nada. Como siempre. En la misma revista sale su
marido Javier Bardem posando, pero no se pongan nerviosos, lo hace porque le
interesa. Si no hay película no hay posado. Así de claro lo tienen.
El hijo de Ortega Cano empieza a
trabajar y por ello ha concedido su primera exclusiva. En ella rememora a su
madre Rocío Jurado, de su hermana, de su padre...de la vida en general. Pronto aprende
el muchacho a ganarse la vida.
Alba Carrillo sigue empeñada en
ser la mujer que más titulares bobos proporciona. Entra al trapo de contestar a
la ex mujer de su pareja y al final consigue lo opuesto a lo deseado: quedar en
evidente ridículo. Que se lo mire.
Felipe y Letizia, empeñados en
dar normalidad a la Casa Real el día de su aniversario se lo pasaron trabajando
en Cáritas. Dentro de poco, como sigan así, terminarán yendo en metro para
darle normalidad a su vida. Criticados, sin embargo, por no haber acudido al
bautizo de la heredera de la heredera al trono de Suecia. ¡¡Baahhh, realeza!!