Los madrileños usan más los servicios sanitarios que los inmigrantes que viven en nuestra Comunidad. Así lo pone de manifiesto el estudio presentado este martes por la Fundación Ciencias de la Salud, que ha patrocinado la Consejería de Inmigración y que pretende acabar con los "cliches discriminatorios" sobre los llegados de otros países.
Según explicaron
Diego García, presidente de la entidad, y el profesor
Enrique Regidor, el estudio se basa en cuatro encuestas realizadas entre 2004 y 2006 por el Ayuntamiento de Madrid y los gobiernos autonómicos de Cataluña, Valencia y Canarias, los territorios con mayor población extranjera y por tanto los más representativos.
De las 6.607 entrevistas realizadas en la capital se desprende que el 12'5% de los madrileños habían ido al médico de cabecera en los últimos quince días, por el 9'9% de los inmigrantes. La diferencia es similar en la utilización de servicios de medicina privados, que alcanza el 55'7% por el 47'2% de la población foránea en el último año.
Respecto a las consultas especializadas, las diferencias se amplían del 8'5% de ciudadanos autóctonos frente al 4'7 % de inmigrantes, ya que además solicitan menos servicios preventivos como la mamografía y la citología.
Para el presidente de la Fundación, los datos ponen de manifiesto que es "falso" que los inmigrantes se conviertan en "hiperutilizadores" de la Sanidad por provenir de países donde hay menos prestaciones. Al contrario, su precepción de la salud es "menos consumista" que la occidental, cuyos sistemas generan más demanda cuantos más servicios tienen.
Las excepciones
Madrid cuenta dos excepciones a la regla general. Los ciudadanos de América del Sur y Centroamérica son los que más acuden a los servicios de Urgencias, lo que eleva el porcentaje al 17'3% de utilización en el último año por el 15'7% de madrileños. Respecto a la hospitalización, los inmigrantes africanos son los que acumulan mayor demanda.
Para
Gabriel Fernández de Rojas, director general de Inmigración de la Comunidad, la preferencia por el servicio de Urgencias se debe a que la región ha incrementado su población inmigrante de 150.000 a 1'5 millones de personas en un plazo de menos de 10 años. Esto hace que, en el caso de los latinoamericanos "desconocen el protocolo de acceso ordinario y, por tener mayor traquilidad, van a Urgencias".
Diego García apuntó además que en Colombia y Centroamérica especialmente "está muy presente Estados Unidos, y allí, sólo te atienden sin coste en Urgencias". Así, lo inmigrantes llegan a Urgencias "porque es lo que conocen", situación que, según García, no ocurre con los llegados de Europa del Este, "ya que en sus países sí existe un Sistema de Salud organizado".
Gabriel Fernández adelantó que, para corregir esta situación y que los recién llegados puedan acceder a todos los servicios (empleo, educación, formación) en condiciones de igualdad, la Comunidad tomará medidas concretas en el nuevo
Plan de Integración 2009-2011, cuya elaboración ya está en marcha.