Cierto es que al ministro de Economía le gusta explicar las cosas a las claras: “hay que apretarse el cinturón” es la expresión más utilizada por Solbes para hacer entender a los ciudadanos que no estamos en el mejor momento, pero que tampoco se hunde el barco.
Como “bache” también denomina el vicepresidente a esta “situación de desaceleración del crecimiento muy rápida, con un ajuste importante”. Y esperanza: “a mitad del próximo año, si no nos hemos equivocado con nuestras medidas, volveremos a retomar crecimientos por encima del 3%”, asegura.
En cuanto al paro, Solbes no se atreve a prever su impacto final, aunque “lógicamente será negativo”. “El problema del paro es el más grave de todos. Sería estúpido no reconocer esa realidad”. ¿Y se continuará destruyendo empleo? A eso no contesta, pero “hemos tomado algunas medidas para recolocar a los trabajadores de la construcción”.
El paro de los transportistas lo ve con mejores ojos: “creo que el asunto se ha llevado con sensatez y los resultado para una huelga como ésta no son malos (…) La negociación se ha terminado, que no quepa la menor duda”.
Considera “muy difícil” luchar contra la inflación: “Nuestra preocupación fundamental y la de toda Europa es que se produzcan efectos de segunda ronda, que se quiera trasladar a salarios y márgenes empresariales esta subida de precios”. Para el precio de la electricidad “buscamos un criterio que tome en consideración la evolución de la inflación como un elemento a tener en cuenta. Cuánto va a subir no lo sé, lo decidiremos en Consejo de Ministros”.
Aquí apechugamos todos: “Hace un año el petróleo costaba 65 dólares, hoy 135. Si nos cuesta el doble y compramos la misma cantidad, a los españoles nos queda menos dinero para hacer otras cosas y eso lo tenemos que aceptar”, aunque “hay gente con problemas y ahí es donde estamos intentando trabajar más”.
“Ya hemos puesto en marcha un plan de estímulo de la economía para este año y el próximo”. Y resume: “Ahora estamos en una situación de menor crecimiento que va a suponer que la parte de superávit del Estado posiblemente se quede en torno al equilibrio, la de Seguridad Social estará en superávit y la de las comunidades autónomas… tienen dificultades de recaudación de ingresos, como también las tenemos nosotros”.
La reforma financiera: "Creo que no debería preocuparnos excesivamente cuál es la posición del ciclo económico, lo que debemos hacer es un buen acuerdo que tenga sentido para las comunidades autónomas, administraciones locales y el Estado. (…) Estamos en la primera fase de contactos bilaterales (…) Mi idea es que entre en vigor el año que viene".
Buena relación con Sebastián
“Tenemos discrepancias sobre algunos puntos y yo diría que ahora, por necesidades obvias de unos y otros, tenemos que discutir los temas más desde el principio, y los debates son más técnicos. Nuestras relaciones van bien”.