Reciclar ilusiones

Estimado Director.
 
De forma constante vemos, oímos, y hablamos de ecología, de cuidar nuestro entorno, de mimar los recursos naturales del planeta para dejar a las siguientes generaciones un mundo mejor. En la medida de nuestras modestas posibilidades, nos esforzamos diariamente por separar el vidrio, los envases, el papel o el cartón de la basura orgánica. Aportamos nuestro granito de arena en esta desigual pelea por mantener límpio el lugar donde vivimos, y nos sentimos un poco mejor cada vez que depositamos nuestra basura debidamente separada en el contenedor correspondiente. Pero ayer me robaron mi aportación, mi empeño y además rompieron mi ilusión por estos objetivos. Bastó con ver cómo el camión que recoge la basura en mi barrio, La Montaña, de Aranjuez, echaba por tierra todos mis esfuerzos, sencillamente porque ellos recogen toda la basura de los distintos contenedores de orgánica y envases y los vuelcan juntos en el depósito del
camión. Nuestro joven barrio no ha sido todavía recepcionado por el Ayuntamiento de Aranjuez, y mientras, una empresa subcontratada por Martinsa Fadesa perpetra esta falta de civismo; y yo les pregunto, ¿quién me va a devolver mi ilusión diaria por reciclar la basura, y por mantener limpio este mundo?

José Luis González Calvillo. Aranjuez