Viejos asuntos, nuevo escenario
domingo 09 de marzo de 2008, 23:07h
El PSOE ha vuelto a ganar las elecciones en España, de modo que habrá una segunda legislatura de Zapatero, como ya las hubo antes de Suárez, González y Aznar. No estamos ante un cambio radical del escenario político español, pero sí para el equipo de Mariano Rajoy, que no ha sabido recuperar la posición victoriosa del PP de Aznar en 1996 y en el 2000. La clara victoria de Zapatero, próxima a la mayoría absoluta, es ante todo un triunfo de los socialistas pero también es una oportunidad para el PP de replantearse su estrategia y de aportar nuevas ideas al país. Todo ello bajo la presión asesina de ETA, la gran asignatura pendiente de la democracia española.
Mientras el Partido Popular medita sobre su futuro, donde no es difícil intuir cambios de personas, de ideas y de estrategias, se supone que irá desapareciendo la crispación -últimamente ya insoportable-, de modo que el nuevo Gobierno de ZP pueda afrontar los grandes retos que le aguardan, empezando por los problemas económicos y sociales, que no son pocos ni menores. Es hora de mirar adelante.
Para los nacionalistas y otros partidos minoritarios, dañados por la exagerada polarización de la campaña, también se abre una nueva etapa, con un marco de juego que puede ser favorable a sus intereses, si saben administrarlos. En ese sentido, también es un buen y novedoso escenario, con viejos asuntos, para medir el verdadero talante del aún joven presidente Zapatero.