viernes 07 de marzo de 2008, 21:12h
Esta ha pretendido entrar en campaña electoral, pero es más que dudoso que lo haya conseguido. El asesinato del ex concejal socialista de Arrasate (Mondragón) en el País Vasco, cobarde y vil, solamente demuestra que los etarras, hoy, son unos asesinos repugnantes nada menos. Pero nada más.
ETA está vencida y sus miembros, la mayoría, lo saben, pero todavía continúan con el soniquete revolucionario y con unos planteamientos del siglo pasado que no soportan el más mínimo análisis.
Pero siguen queriendo amedrentar y, si no lo han hecho en más ocasiones y con más contundencia, es simple y llanamente porque no han podido. El estado democrático español es fuerte y las bombas ya no lo pueden desestabilizar como ellos quisieran y quisieron en el pasado. No. Entonces ¿Por qué siguen matando? Porque mantienen un discurso de trogloditas políticos que ni su mismo entorno comparte, aunque el miedo les haga mantener silencios cómplices en público.
Yo creo honestamente, que este crimen no va a tener ninguna consecuencia electoral el domingo día 9 de marzo. Es más, me parecería indecente entrar en es valoración. Lo que si creo es que los etarras están enfermos. La sociedad española, no.