La maltrecha situación de la defensa del Real Madrid ha llevado al club blanco a pensar en acudir, por primera vez en mucho tiempo, al mercado de invierno.
La nueva lesión de Eder Militao para toda la temporada, como ya ocurrió la anterior, ha dejado al equipo de Carlo Ancelotti con un sólo central disponible, el alemán Antonio Rüdiger.
Con el central David Alaba fuera de la ecuación todavía y el lateral derecho Dani Carvajal ausente toda la campaña, sólo quedan laterales izquierdos 'sanos' (Ferland Mendy y Fran García), puesto que Lucas Vázquez también cayó tocado ante el Osasuna el sábado y será baja unas semanas.
Plan A y Plan B
El plan A de momento pasa por retrasar a posiciones de central al mediocentro Aurélien Tchouaméni, con experiencia en esa posición y talento para ello, según Ancelotti. En todo caso, está tocado, aunque podría volver a estar disponible pronto.
Para ganar efectivos, se tiraría de cantera, con Raúl Asencio y otras opciones para ayudar en esa línea del equipo.
Luego está la alternativa más arriesgada, la del joven de 17 años Jesús Fortea, lateral derecho de gran proyección y que parece que podría ser un crack de futuro, pero al que todavía se le ve muy joven para dar el salto directo a la élite, ya que ni siquiera juega en el Castilla o el Real Madrid C, sino que lo hace en los juveniles.
A Ancelotti le gustaban Joan Martínez y Jacobo Ramón, pero ambos se lesionaron de gravedad, continuando con el gafe madridista con sus defensas.
Sin embargo, el plan B pasa por fichar en el mercado de invierno, de ahí que se abriera una especie de casting de actores, pero para defensa del Madrid.
Laporte, el gran deseado
El primer nombre que surgió es el del hispanofrancés Aymeric Laporte, internacional indiscutible con La Roja de Luis de la Fuente, pero algo inalcanzable para el club blanco. El defensa de raíces vascas juega en el Al Nassr de Cristiano Ronaldo, en Arabia Saudí, club que tuvo que pagar 27 millones para ficharlo procedente del Manchester City inglés.
Además, Laporte cobra unos 24 millones de euros netos al año, una ficha imposible e inimaginable en Europa, sobre todo para un Madrid instaurado en la austeridad permanente, sobre todo para los jugadores que no son piezas esenciales del equipo. Ancelotti lo quería como única opción viable, al ser un defensa de máxima garantía y con experiencia contrastada com para rendir desde el primer día en el Madrid, pero ya le han comunicado al italiano que no será posible su incorporación. Sin embargo, el central sí estaba deseando volver a Europa para fichar por un grande.
Las otras opciones
Además, están circulando otros nombres. Parece que el de Sergio Ramos, sin equipo pero negándose a la retirada a sus 38 años, es el primero en descartarse. Nadie en el club le ve de vuelta tras su salida por la puerta de atrás y además se considera que sería una opción de riesgo para todas las partes, por mucho que haya algo de nostalgia en todo lo que rodeaba a esta posibilidad de regreso.
Así que el casting se completa con el alemán Jonathan Tah, central del Bayer Leverkusen; el portugués Antonio Silva, del Benfica; y el francés Castello Lukeba del Leipzig.
La ventaja de Tah, de 28 años, es que acaba contrato el próximo verano y podría negociarse su salida en invierno a mínimo coste. Es compañero de Rüdiger en la selección germana y llegaría con esa garantía.
En cuanto a Lukeba, gusta mucho su rendimiento, pero se precia como una opción cara, ya que se asegura que el equipo alemán pediría como mínimo unos 40 millones por su traspaso. Tiene 21 años.
De Antonio Silva ni hablamos... el Benfica tiene una alta cláusula para su talentoso central y pediría casi 100 millones. Tiene 21 años también.
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