Un día como este 23 de enero, pero de hace 50 años, el pueblo venezolano vio partir a otro militar empoderado, que había impuesto su tiranía, bastante más clara que esta que vivimos y padecemos medio siglo después. 10 años, desde 1948 hasta 1958, duraron esos tiempos tétricos como son los tiempos de todo déspota. Primero con un Marcos Pérez Jiménez parte del casting de un golpe militar que derrocó al presidente Rómulo Gallegos, y luego, ya en la década del 50, por todo el cañón su impronta tiránica.
Es imposible evadirse de la comparación… Por suerte aún hay muchos que tenían raciocinio por la edad y pueden perfectamente contarnos y hasta trasladarnos vivencias que resultan aprendizajes; y claro, está esa historia, aún escribiéndose, que narra los espantos de aquella tiranía, que con honestidad hay que admitir en fría comparación con el hibrido chavista ese que fusiona con lo que barrunta democracia protagónica, socialismo del siglo XXI y otras marrullerías similares, que Pérez Jiménez encaminó áreas importantes del país como ente social y económico hacia caminos de progreso, a diferencia del régimen de este orate perdido en sus delirios, que cual versión de Midas inverso, destruye, seca, arrasa…
50 años han transcurrido, los mismos casi que ha visto el pueblo cubano, írseles al pozo de las desesperanzas y el horror causado por un longevo y letal tirano, que pasará a la historia por lograr continuar sus torturas y crímenes, aún siendo ya un cadáver insepulto.
Y justo hace 10 años, llegó por elecciones democráticas, el enterrador, el “Terminator” de esa misma democracia, que gracias a Dios, le ha dado a este pueblo nuestro la capacidad para comparar, racionalizar y resistir en una lucha larga contra un militarote empoderado 100 veces más letal e infinitamente más chusco y ridículo que cualquier otro milico de la historia contemporánea de este continente nuestro, tan sufrido por los hechos, las ambiciones y las acciones de los Favoritos del Diablo.
23 de enero de 1958 y 23 de enero del 2008… 50 años y aquí estamos en carrera regresiva hacia los más espantosos días del siglo XIX… Un milico grotesco nos decide insertar nuevamente en las guerras y rencillas del pasado que suponíamos lejano… Chávez el delírico, metiéndonos en un polvorín de violencia y muerte que nos arrebatará vidas, recursos y alegrías… Arrebatos irreparables, después que el vendaval de odios devaste esta pobre tierra secuestrada…
50 años de la caída de Marcos Pérez Jiménez y aquí estamos, presenciando la entrega de nuestro país a cuanto extranjero sirva a los planes de eternidad del teniente coronel, comandante en jefe de asesinos, narcoguerrilleros, terroristas de todos los credos y nacionalidades y chulos ávidos de la parte del botín que es nuestra patria, la gran rehén del tiempo en que los vándalos retornaron al poder.
El milico mandante ahora debe estar más iracundo que nunca… Europa escucha voces de una Latinoamérica democrática e instruida y no las necias referencias y los chillidos histeroides del gran histrión Chávez. En un congreso de víctimas del terrorismo, ese que nuestro militarote quiere por decreto que se le dé condición de honorable beligerancia, está Clara Rojas, la madre del pequeño Emmanuel, también el niño. Está Fernando Araujo, otra víctima, están militares que hace poco estaban encadenados, gracias a las humanisimas prácticas de las FARC y el ELN… Están muchos secuestrados liberados, contando el infierno vivido en “Las selvas de la Felicidad”, que junto con “El mar de la Felicidad” de Castro, son los escenarios que desea para el continente todo, quien después de diez años en poder sigue pretendido la eternidad…
Ellos allá en Madrid y Chávez aquí enfureciéndose más y más por no estar él como el gran benefactor, el bueno de la película, que por culpa de Uribe y los malos del guión no pudo filmar para su gloria, su pana, su incondicional Oliver Stone…
50 años han transcurrido desde la caída de Marcos Pérez Jiménez… Los mismos casi cuentan las víctimas del tirano abyecto Fidel Castro… 40 de ese medio siglo, nos mostraron la democracia y nos condicionaron a vivir y actuar en ella. 10 años de Chávez ya son muchos… empujemos acciones para que este diablo terminé este periodo donde lo menos gordo que se avizora es una guerra que su ambición y locura necesitan…
Eleonora Bruzual
ebruzual@cantv.net
* Trascripción de la Columna Radial que se transmite diariamente a través de los Noticieros de Radio Mambí 710 AM del Circuito Univisión de Miami, Florida