La UEFA confirmaba ayer jueves la suspensión del partido que tenía que disputar el Real Madrid frente al Manchester City el martes 17 de marzo en el Etihad Stadium, correspondiente a la vuelta de los octavos de final de la Champions League. En su comunicado, UEFA explica que toma esta decisión ante la cuarentena impuesta a los jugadores del Madrid.
Sin embargo, este anuncio, que al principio se unía a la noticia de la cuarentena de todas las plantillas deportivas del club, no es tan negativo si se analiza en clave de intereses deportivos: el Madrid atravesaba en la últimas semanas una crisis de juego y resultados. Exceptuando el resultado positivo del Clásico contra el Barça, que acabó 2-0, el conjunto blanco había perdido 2 veces el liderato de Liga. Una vez, tras perder 1-0 en casa del Levante una semana antes y, el último domingo, día 8, caía derrotado 2-1 en Sevilla ante el Betis.
Además, los de Zidane cayeron 1-2 en el Bernabéu frente al Manchester City de Guardiola tras un tramo final desastroso del partido. Eso le suponía ir a remontar a la ciudad inglesa con malas expectativas. Y por si fuera poco, se le unía la baja confirmada de su portero, Thibaut Courtois, que estaba siendo fundamental para el equipo, sosteniéndolo con grandes paradas y evitando peores resultados.
También fueron baja Carvajal, Nacho e Isco por distintas razones médicas, y Eden Hazard, el fichaje estrella del pasado verano, tiene aún uan larga baja de entre 2 y 3 meses tras ser operado por su lesión de tobillo. Es posible que en no mucho tiempo también regrese a la actividad Marco Asensio, lesionado desde el pasado verano por una grave lesión.
Sí es cierto que el Madrid perderá ritmo de competición, con entrenamientos colectivos ahora suspendidos, y sustituidos por entrenamientos personales en las casas de los futbolistas. Mientras, la liga inglesa continúa y el City seguirá con buen ritmo para afrontar en algún momento el partido de vuelta de Champions. Sin embargo, la liga española está suspendida durante al menos 2 semanas.