El Barça consiguió un buen resultado en el Camp Nou ante la AS Roma, después de los goles en propia portería de los visitantes De Rossi y Manolas y las posteriores dianas de Piqué y Luis Suárez. Aliados con la fortuna, los azulgrana, ponen pie y medio en las semifinales de la Champions de cara a un partido de vuelta en teoría más que asequible en la capital italiana. La única esperanza romanista la puso su delantero centro y jugador estrella, Dzeko, quien consiguió batir a Ter Stegen, ya en el tramo final, pero el resultado sigue poniendo a los de Valverde varias casillas de salida más adelante.
Fue un partido más flojo de lo esperado, con un Barça algo espeso pero que no dejó de presionar a la Roma, timorata. Al final, ese miedo escénico lo pagó con dos autogoles fruto de la defensa desesperada del aluvión culé.
El 0-0 se rompía cuando, en una combinación entre Messi e Iniesta, De Rossi intentaba rechazar el esférico pero éste acababa en el fondo de la red (1-0, min 38). El 2-0 llegaba gracias a la insistencia de Umtiti que, en un saque de esquina picado en corto por Rakitic, forzaba que Manolas marcara en propia portería (2-0, min 56). Posteriormente, en un contragolpe de Messi y en un disparo de Suárez que no ha bloqueado bien Alisson, y que Piqué empujaba para hacer el 3-0 (min 59).
Aunque ya en el tramo final, en el minuto 79, Dzeko recortaba distancias y daba algo de esperanzas a los romanistas, Suárez, con un remate cruzado, acababa con sus esperanzas con un tanto que deja medio sentenciada la eliminatoria (4-1, min 87).
La vuelta será el martes 10 de abril en la capital italiana, con todo casi decidido. Sólo una milagrosa goleada local, casi imposible, acabaría con el Barça.