El balance de la situación de la limpieza viaria en Madrid que ha elaborado el Grupo Municipal Socialista indica una serie de 'puntos negros' que lastran la limpieza viaria en la ciudad.
Excrementos caninos
Según el documento, los 200.000 perros censados en la capital dejaron el año pasado más de 70 millones de excrementos en las calles de la ciudad, de los que el Ayuntamiento recogió a través de los "sanecanes", las motocaca, y la limpieza ordinaria sólo el 40 por ciento (28 millones de deyecciones caninas, con un peso total de 2.400 toneladas). Otras 3.400 toneladas de excrementos caninos no se han recogido. El 99,99 por ciento de las infracciones cometidas en esta materia quedaron impunes en 2007.
El concejal socialista Pedro Santín asegura que "la inhibición del gobierno de Gallardón respecto a este problema ha provocado un aumento de un 10 por ciento anual de la suciedad por excrementos caninos, hasta llegar al punto de encontrar una caca cada 50 metros.
El Grupo Municipal Socialista denuncia además que sólo salen a la calle 28 de las 54 motocacas que posee el Ayuntamiento y el resto se quedan en cantones de limpieza por estar averiadas o por no existir personal suficiente para conducirlas. Esto provoca que haya distritos como Moratalaz, Vicálvaro o Vallecas Villa en los que no se recogen excrementos con este servicio caninos porque no disponen de motos.
Contenedores de obra
Los socialistas aseguran que más de la mitad de los 200.000 contenedores de obra que se instalan cada año en Madrid incumplen el artículo 170 de la Ordenanza de Medio Ambiente que obliga a taparlos cuando estén llenos y a retirarlos en un plazo máximo de 24 horas.
Limpieza de contenedores y papeleras
Los 300.000 contenedores de basura, envases, papel, vidrio y excrementos caninos y las 53.000 papeleras de la ciudad no se lavan con la debida frecuencia asegura el PSOE. Ocurre a pesar de que se invierten 27 millones de euros cada año en esta tarea a través de empresas concesionarias. Según Pedro Santín, la situación es especialmente grave en la limpieza de los 2.500 'sanecanes' instalados por toda la ciudad, que deberían ser vaciados a diario y lavados al menos cada diez días. El Ayuntamiento invierte 1.200.000 euros anuales en esta tarea.
Otros elementos preocupantes para los socialistas son el vaciado de contenedores de papel, la recogida de muebles y enseres viejos