La firma, un proyecto de Úrsula Ponce, nació a raíz de la necesidad de la propia fundadora, ya que “tenía un día a día repleto de reuniones, viajes y eventos que finalizaba muy tarde”, indica la compañía en un comunicado.
Este ritmo le dificultaba la tarea de encontrar zapatos cómodos y elegantes, por lo que decidió lanzar esta nuevo concepto de zapatería en línea.
“Aportamos un valor, intentamos a través de nuestros diseños de zapatos que las mujeres se sientan femeninas y coquetas sin renunciar a los tacones ni a su ritmo de vida”, indica Ponce.
La compañía, que nació con un capital inicial de 75.000 euros, prevé facturar 100.000 en su primeraño, triplicar esta cantidad durante 2016 y abrirse al mercado europeo en el futuro próximo.
Una de las particularidades de Ursulitas es que el proceso de fabricación de los zapatos es artesanal y con una calidad “100% española”.