Después del intensivo de ayer, toca conocer la ciudad y hacer un poco de turismo. El ayuntamiento de San Francisco, toda la zona de casitas victorianas tan típicas de las películas y, por supuesto, el Golden Gate. Hemos tenido mucha suerte y no hay nada de bruma en la bahía, por lo que se ve el otro extremo sin ningún problema.
Antes de volver al hotel, unos cuantos tenemos reservada una visita turística por Alcatraz. La famosa bruma de la bahía comienza a surgir y cuando ponemos pie en la isla la ciudad de San Francisco ha desaparecido del horizonte. No se puede tener mejor ambiente para disfrutar de esta mítica prisión.