El actual número uno del mundo y el catorce veces campeón de 'Grand Slam' ya visitaron Bangok en 2008 y 2010 respectivamente cuando disputaron el Abierto de Tailandia, y este viernes disputarán un partido de exhibición con el que se pretende impulsar la confianza en la seguridad del país tras la bomba que explotó en Bangok.
La explosión, que ha sido calificada como el peor incidente de este tipo en la historia tailandesa, ha perjudicado en el turismo del país y sucedió cuando Tailandia comenzaba a levantarse de las protestas políticas que tuvieron lugar el año pasado.
Nadal y Djokovic, ataviados con la ropa tradicional de Tailandia, obsequiaron con sendas raquetas a Prayuth Chan Ocha y tras la conversación, donde el Primer Ministro tailandés les pidió ayuda para promover el turismo del país, y visitaron el lugar de la explosión, el santuario de Erawan, donde depositaron guirnaldas de flores en medio de una lluvia torrencial.