Los mercados prefieren no posicionarse antes de la Fed. Ayer, por ejemplo, los bonos estadounidenses operaban con poco volumen y con unos precios relativamente estables, aunque tras los datos del fin de semana que mostraron un crecimiento de la inversión y de la producción industrial de China más débiles de lo esperado, se ha elevado su demanda. Aunque las cifras han renovado la preocupación sobre la desaceleración de la segunda mayor economía del mundo y la incertidumbre sobre si el Banco Popular de China implementará nuevas medidas de política, la atención hasta que el jueves la Fed adopte su decisión, va a estar en los datos económicos que se publiquen y su influencia en la reunión. Ventas minoristas, producción industrial y precios al consumo serán vistos con esta perspectiva. Como adelanto, la encuesta publicada ayer por la Fed de Nueva York, según la cual los estadounidenses ven menores presiones inflacionistas. La encuesta mostró que las expectativas promedio de inflación a tres años cayeron a un mínimo histórico de 2,87% desde el 2,96% del mes anterior. La expectativa a un año también cayó, a 2,79% desde el 2,96%. Mientras tanto, las elecciones del próximo domingo en Grecia comienzan a buscar su cuota de interés en los mercados. Los pesos pesados políticos del partido izquierdista Syriza y del conservador Nueva Democracia seguirán buscando una ventaja que pueda romper el empate que dan los sondeos de opinión.