Los de Chicago caen 106-101
Sin Gasol, lesionado, no son nada: nueva derrota de los Bulls ante Cavaliers que ya dominan la serie
miércoles 13 de mayo de 2015, 10:46h
La ausencia por segundo partido consecutivo del ala-pívot español Pau Gasol volvió a pesar como una losa en el juego interior de los Bulls de Chicago, que perdieron ante los Cavaliers por 106-101 en el quinto encuentro de la eliminatoria de semifinales de la Conferencia Este, que ahora dominan los de Cleveland por 3-2.
Si
el base estelar de los Bulls, Derrick Rose, dijo al concluir el cuarto
partido que la baja de Gasol, lesionado con una contractura muscular en
la pierna izquierda, había sido "devastadora", en el quinto lo fue
todavía más, pues su sustituto, el ala-pívot Taj Gibson, resultó
expulsado por falta flagrante a dos minutos de haber comenzado el cuarto
periodo.
Es cierto que los Bulls a partir de ese momento
supieron reaccionar y jugaron su mejor baloncesto ofensivo, al reducir
su desventaja de 17 a dos puntos (101-99), con menos de dos minutos por
jugarse. Hasta ahí, todo el mérito para la filosofía del
entrenador de los Bulls, Tom Thibodeau, que no se preocupa por el
jugador que no está en el campo sino por el que sale a competir; pero,
al final, el equipo de Chicago echó en falta no solo los promedios de
15,1 puntos y 9,9 rebotes que ha aportado Gasol en lo que va de la fase
final, sino su clase, su experiencia y su saber definir en los momentos
decisivos.
Cuando se pusieron a dos puntos y volvieron a meterse
en el partido, a los Bulls les faltó el líder que pudiese aglutinar ese
esfuerzo y completar la remontada.
Sí lo tuvieron los Cavaliers
por partida doble, con el alero LeBron James y el base Kirye Irving, que
en los últimos 17 segundos anotó los cuatro tantos desde la línea de
personal que sentenciaron la victoria de su equipo.
James se
comportó en el campo como el mejor jugador de la liga y aportó un
doble-doble de 38 puntos y 12 rebotes, con seis asistencias y ninguna
perdida de balón. Rose no tuvo la mejor noche, anotó solo 7 de 24
tiros de campo (16 puntos), y para eso llegó Gasol a los Bulls, para
ser el jugador que ocupase su puesto de estrella y líder en los momentos
decisivo.
Pero Gasol no estaba en la pista del Quicken Loans
Arena, sino en el banquillo, sentado, vestido de calle, frustrado por no
poder ayudar a sus compañeros y al equipo a luchar por una victoria que
hubiese sido factible de conseguir, como lo fue el primer partido de la
eliminatoria cuando el jugador de Sant Boi pudo competir.
Los
Bulls han comprendido que, a pesar de que Butler y Rose puedan jugar a
su máximo nivel, sin Gasol en el campo no pueden ganar a los Cavaliers
con James pleno de inspiración y liderazgo. Rose reiteró al
concluir el quinto partido que la motivación del equipo estaba más alta
que nunca, pero a la hora la verdad, la ausencia de Gasol en el juego
defensivo se hizo sentir al capturar rebotes y lo mismo cuando
necesitaron anotar los tantos decisivos, que el jugador español sabe
cómo hacerlo mejor que nadie.
Y si no, que le pregunten al
escolta Kobe Bryant y a Los Ángeles Lakers de qué manera consiguieron
los dos últimos títulos de liga que tienen en su poder. Además,
el poder físico de Gasol, nunca agresividad, intimida al rival, aunque
sean los Cavaliers, que han sabido aprovecharse de su ausencia más que
nadie.
Aunque no se sabe en qué condición física se encuentra
Gasol y qué grado de recuperación de la lesión ha logrado con el
descanso, si los Bulls quieren tener alguna posibilidad de ganar el
sexto partido y no quedar eliminados necesitan la presencia del jugador
de Sant Boi, aunque solo sea para que aporte el equilibrio emocional y
táctico que les ha faltado en los dos últimos encuentros.
Gasol,
de 34 años, que durante la temporada regular fue irónicamente el jugador
más saludable y resistente del equipo y solo se perdió cuatro partidos,
dijo antes del encuentro del martes que todavía no había podido hacer
carrera completa, pero nadie duda de que el jueves, tiempo de vencer o
morir en los 'playoffs', el internacional español estará en la pista del
United Center de Chicago.
Mientras el ala-pívot hispano
montenegrino, el novato Nikola Mirotic, siguió sin tener su mejor
inspiración encestadora, y en los 18 minutos que jugó aportó 10 puntos
al anotar 2 de 7 tiros de campo, incluido un triple en tres intentos, y 5
de 6 desde la línea de personal. El exjugador del Real Madrid capturó dos rebotes, que fueron ofensivos, dio una asistencia y puso un tapón.