Afines a Duran sientan las bases para crear un nuevo partido desvinculado de CDC
jueves 26 de marzo de 2015, 13:57h
"Somos lo que construimos". Es el título del manifiesto
fundacional de una plataforma impulsada por personas afines a Josep
Antoni Duran que podría convertirse en un nuevo partido político,
Construïm, desvinculado de CDC. En el manifiesto, que ha publicado
hoy "La Vanguardia", los impulsores de la plataforma
explican que ya se han registrado "como partido político para
evitar usos indebidos del nombre de la asociación".
Sin embargo, la idea de los promotores de Construïm no es la de
entrar de inmediato en el ruedo político. Su intención es fomentar
un debate para buscar "soluciones políticas por la vía del
pacto y de la concordia" a la situación actual que vive
Cataluña, que está "a punto de destruir la paz social, la
convivencia", según indica el manifiesto.
De la posible ruptura entre los partidos de Artur Mas, CDC, y
Josep Antoni Duran, Unió, que actualmente están federados bajo las
siglas de CiU, se viene hablando desde hace meses. Las tensiones
entre ambas formaciones son públicas y radican en el hecho de que la
mayoría de los dirigentes de Unió no comparten las tesis
independentistas que se han impuesto en CDC.
No obstante, Unió no quiere romper con CDC de inmediato. No antes
de las elecciones municipales de mayo. Las listas de la federación
ya están bendecidas y sería una gran complicación. Lo que plantea
Duran es celebrar un referendo interno entre la militancia de su
partido el próximo 14 de junio para decidir de forma definitiva si
la formación se inclina o no por la secesión de Cataluña.
Si resulta que Unió se decide por la independencia, Duran tendrá
la puerta abierta para impulsar Cunstruïm un partido que recoge el
legado "y la experiencia histórica de Unió Democràtica de
Catalnya" y que plantea "impulsar un cambio en las
actitudes, las maneras, el lenguaje y las formas que utilizan casi
por igual todos los partidos tradicionales", según indica el
manifiesto firmado entre otros por Antonio Duran-Sindreu, Jordi Giró,
Josep Miró i Ardèvol o Alfred Pastor.
El posible ingreso de Cronstruïm en la vida política catalana
podría debilitar el independentismo, que quedaría únicamente en
manos de una minorada CDC, de ERC y de la CUP. El nuevo partido de
Duran se uniría a las filas de los partidarios de que Cataluña
permanezca junto al resto de España, es decir, de PSC, ICV, PP y C's
y Podemos, aunque cada uno con sus matices.
La aparición de un nuevo partido, con posibilidades de obtener
representación parlamentaria, según apuntan los analistas,
provocaría también una fragmentación aún mayor de la política
catalana, que dificultaría los pactos postelectorales y haría
todavía más ingobernable esta comunidad.