La halitosis, o "mal del aliento", puede ser una de las situaciones más incómodas a las que hacer frente en la vida. Puede hacerte sentir sucio e incapaz de interactuar con los demás porque temes que te juzgarán por tu aliento. Aunque algunas formas de halitosis pueden ser fácilmente controladas a través de técnicas sencillas, otras requieren la intervención de un profesional para ser resueltas. Hay que tener especial cuidado con este problema durante el tratamiento de ortodoncia: la presencia de los aparatos en la boca requiere unos mayores cuidados de higiene y limpieza que, de no realizarse, pueden desencadenar, entre otros, un problema de halitosis.
Existe una serie de técnicas
sencillas que pueden utilizarse para mantener a las formas menores de halitosis
en jaque. En primer lugar, hay que asegurarse siempre de cepillarse los dientes
y usar hilo dental a fondo después de cada comida. Algunos casos de halitosis están
simplemente causados por alimentos que no se eliminan de la boca lo
suficientemente rápido. En segundo lugar, el uso de colutorios con regularidad.
Debemos asegurarnos de elegir un tipo de enjuague bucal que mate los gérmenes
en lugar de limitarse a proporcionar sabor.
Además, es muy importante
hacer revisiones dentales de forma sistemática. Tanto los niños como los
adultos deben visitar al dentista para una revisión periódica y un chequeo cada
seis meses. En esta visita se recomienda realizar una limpieza profesional de
los dientes y de la boca en general, así? como la evaluación del estado de las
estructuras bucales y de la alineación de los dientes. Las personas con un
mayor riesgo de enfermedades orales deben someterse a chequeos dentales más de
dos veces al año.
¿Cómo saber si con dos
visitas al año es suficiente? El profesional indicara?, según los diversos parámetros
de riesgo, cuál es la frecuencia y el tipo de cuidados más adecuados para cada
caso particular. La falta de espacio, el consumo de dulces, el consumo de
tabaco y alcohol, la diabetes, el embarazo, las enfermedades periodontales y de
las encías, así como la mala higiene oral son algunos de los muchos factores
que se tienen en cuenta a la hora de decidir con que? frecuencia necesita la
limpieza dental y el chequeo.
La mejor manera de mantener
una buena salud oral es visitar a su profesional habitual de forma regular.
Por el doctor
Ramón
Xam-mar, miembro de
Saluspot, ortodoncista y fundador de
Ziving.