Ganvam presenta un plan de impulso a la posventa para elevar un 10% los ingresos de los talleres
La Asociación
Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor, Reparación y
Recambios (Ganvam), que representa a más de 6.000 empresas dedicadas al
mantenimiento y reparación, ha presentado el 'Plan 360 de impulso a la
posventa', que permitirá según sus cálculos aumentar en un 10% los ingresos
anuales de los talleres.
La
asociación advierte de que, solo en el último año, la facturación de estos
talleros se contrajo un 4%. El déficit de matriculaciones y el creciente
envejecimiento del parque siguen lastrando la actividad de la posventa,
aquejada también de la rebaja de la cobertura de las pólizas y el menor número
de kilómetros que ahora se recorren, señala.
Estos factores, así como la menor afluencia a los talleres de coches de menos
de cinco años, la hipersensibilidad del consumidor al precio que impulsa la
proliferación de centros clandestinos o las imposiciones de las aseguradoras,
ponen en aprieto el sector de los talleres.
Ante esta coyuntura, Ganvam ha puesto en marcha un plan que aspira a "revitalizar
un área de negocio estratégica para el sector de automoción" y que se
orienta, por un lado, a aumentar la rentabilidad de los talleres y, por otro, a
conseguir un redimensionamiento certero de un sector que se mueve entre los
40.000 y 45.000 talleres.
Este esfuerzo pasa por que los centros de reparación vigentes cumplan con los
criterios que marca la normativa aplicable, pero también por cerrar aquellos
ilegales que han proliferado al calor de la crisis, indica.
Dentro del plan, Ganvam aboga por la creación de un registro oficial de
talleres que permita conocer con exactitud el número de centros actuales de
reparación y por fomentar la 'auto-inspección'. También pide acabar con los
talleres ilegales, que rondan los 10.000.
Ganvam, junto con Anfac, viene colaborando activamente con la Guardia Civil en
este aspecto, lo que culminará en breve en un acuerdo de colaboración entre las
partes para poner fin a estar práctica que "atenta contra la seguridad
vial, el medio ambiente, el consumidor, la seguridad de los trabajadores, la
calidad de esta actividad industrial y las haciendas públicas".
Según el presidente de Ganvam, Juan Antonio Sánchez Torres, "la reparación
ilegal tiene un impacto negativo en el consumidor, que queda desprotegido al no
disponer de facturas, presupuestos ni las garantías de reclamación".
Otras peticiones son las de acometer avances legislativos para proteger a los
talleres, aplicar una fiscalidad más favorable o impulsar planes de
achatarramiento, así como liberalizar las ITV.