Gran Hermano VIP: no hubo sorpresas
viernes 27 de febrero de 2015, 12:11h
Ni en la audiencia ni en las
expulsiones. Si alguien a estas alturas tiene la mínima duda sobre quién ganará
el concurso, que las despeje. Mediaset es una máquina de hacer dinero y sabe
que con Belén fuera de la casa no hay los mismos datos de audiencia. Por lo
tanto Belén no va a salir hasta el final.
Tanto para la gente que la
sigue adorando como para quienes la defenestran, la ex princesa del pueblo
sigue siendo un buen reclamo para los telespectadores. Por lo tanto es absurdo
echarla. Claro que es la gente quién la echa pero se teme que eso a los
productores del programa les da bastante igual. Belén Esteban demostró, una vez
más, que es una máquina de hacer dinero y que eso es lo único que les importa.
Si cae en barrena en un futuro, ya se verá. Tampoco les importa demasiado. Ya
se encargarán otro de recomponer el destrozo.
La de Paracuellos no defraudó e
hizo, como siempre, el numerito. Lloró, rabió, solo le faltó tirarse al suelo a
patalear. Habla como una niña de 6 años. Decía que no quería irse pero no se lo
cree ni ella. Ayer debió de dormir mejor que nunca.