Estado Islámico ha publicado este domingo
un supuesto nuevo vídeo donde se muestra la decapitación de 21
cristianos egipcios secuestrados en Sirte (Libia). En las imágenes aparecen milicianos vestidos de negro que
acompañan a los secuestrados por la orilla de una playa. Los rehenes
llevan un mono de color naranja y son obligados a arrodillarse antes de
ser decapitados.
La pieza está titulada "Un mensaje con sangre para el pueblo de la
cruz", dura cinco minutos y ha sido publicada en una cuenta de Twitter
afín a Estado Islámico, ha sido recogida por SITE, una organización
especializada en la identificación de vídeos yihadistas.
Este vídeo va dirigido a los "seguidores de la hostil iglesia
egipcia" en referencia a los cristianos coptos del país norteafricano,
muchos de los cuales han viajado a Siria durante los cuatro últimos años
en busca de empleo tras la revolución de 2011.
Antes de efectuar los asesinatos, uno de los milicianos se dirige a
la cámara para provocar a los espectadores. "La seguridad de vuestros
cruzados no es más que una ilusión", aseguró.
El presidente de Egipto, Abdelfatá Al Sisi, ha convocado una
reunión de emergencia para verificar la autenticidad del vídeo, como ya
hiciera con las anteriores imágenes de los secuestrados que Estado
Islámico difundió el pasado jueves.
Los egipcios habrían sido secuestrados por seguidores de la
formación yihadista entre los meses de diciembre y enero en la localidad
de Sirte, controlada por milicias islamistas.
En un artículo publicado por la revista en inglés del grupo,
'Dabiq', figuraban varias fotografías en las que los secuestrados
aparecen vestidos con monos de color naranja como los portados por
varios de los rehenes ejecutados por la formación.
En el mismo, el grupo asegura que varias mujeres egipcias
cristianas que se convirtieron al Islam fueron "torturadas y asesinadas"
por la Iglesia Copta, según ha recogido el diario egipcio 'Al Ahram'.
Varios egipcios coptos han sido asesinados en los últimos años en
Libia. En 2014, los cuerpos de siete cristianos fueron localizados cerca
de la localidad de Benghazi (este) con signos de haber sido ejecutados.