A solo
una carrera de finalizar la competición, el líder del Mundial de Rallies Cross
Country, el español Marc Coma, hace balance de todo lo conseguido hasta la
fecha y comenta sus sensaciones sobre el rally. Lo hace después de llevarse una
nueva victoria en la cita brasileña, el Rally dos Sertões, hito que ya logró en
2010. Los números hasta la fecha son abrumadores: Coma ha subido al podio en
nueve de cada diez carreras y ha ganado el 64%. Y aun así, afronta cada prueba
como si fuera la primera.
El
piloto español destaca ante todo el sacrificio y la preparación que se requiere
para afrontar con garantías una competición tan exigente como ésta. A pesar de
que se considere un privilegiado por poder hacer lo que más le gusta, no se olvida
de todo el trabajo previo necesario para rendir a este nivel. En este sentido,
Marc Coma asegura que en el pasado Rally dos Sertões la victoria estuvo
especialmente dedicada a todo el equipo, ya que la puesta a punto de la moto
fue muy buena y ello neutralizó la gran competencia de sus rivales.
Aunque a sus 37 años le queden muy pocos retos por superar, Marc Coma asegura
que la concentración y la motivación van explícitas cada vez que se sube a la
moto. Solo así, asegura, puede conseguirse un rendimiento lo suficientemente
alto como para superar a competidores más jóvenes. Preguntado por las opciones
de su principal rival por el título, el también veterano Paulo Gonçalves, Coma
se limita a señalar que para él no es ninguna sorpresa pelear con el piloto
portugués hasta la última jornada, alabando a su rival. Los diez puntos que les
separan en la tabla pueden ser suficientes pero prefiere no especular.
Justo
cuando
se cumplen diez años de
colaboración con AMV, el vigente campeón del Rally Dakar desea poner la guinda a una gran
temporada con el anhelado título mundial. El próximo Rally de Marruecos es una
prueba dura, si bien Coma ya lo ha ganado en dos ocasiones (2006 y 2009). El
propio piloto catalán reconoce que se trata de una prueba más agradable para su
equipo, a pesar de descartar cualquier atisbo de relajación. Tras tomarse un
fugaz descanso, se pondrá de inmediato a preparar la última carrera del rally.