UBS cree que CaixaBank y el Sabadell podrían cambiar su sede si Cataluña se independiza
martes 23 de septiembre de 2014, 13:49h
El banco suizo UBS cree que CaixaBank y Banco Sabadell "ya han dado los
pasos necesarios para reubicar sus sedes, si fuese necesario, para
minimizar cualquier impacto potencial en el acceso a financiación
potencial" en el caso de que Cataluña se independizase, según un informe.
El documento, fechado el 12 de septiembre, considera que la secesión
"parece una posibilidad lejana para Cataluña, si es que alguna vez llega
a producirse", pero pueden crecer los riesgos en los mercados, según
publica este martes 'El Mundo'.
En todo caso, UBS no prevé contratiempos "inmediatos" para los
bancos con sede en Cataluña incluso si se celebra la consulta sobre la
independencia, prevista para el 9 de noviembre.
Fuentes de CaixaBank han declinado hacer comentarios al respecto
del informe, y desde Banco Sabadell han afirmado que es un escenario que
ahora no se da y por tanto no les preocupa.
Fuentes de la entidad presidida por Josep Oliu han añadido que,
llegado el caso, el banco "adoptaría las medidas adecuadas para estar en
igualdad de condiciones competitivas que el resto de entidades
españolas y europeas, y proteger como siempre los intereses de sus
clientes y accionistas".
OTRAS COTIZADAS CATALANAS
UBS también valora los efectos que podría tener el proceso
independentista en otras entidades catalanas cotizadas, entre las que
cita a Catalana Occidente, Abertis, Gas Natural Fenosa, Grifols y
Fluidra.
En el caso de Catalana Occidente, señala que el 40% de su
facturación procede de su aseguradora de crédito Atradius, con sede en
Holanda; Gas Natural Fenosa solamente tiene el 15% de su actividad en
Cataluña, y Grifols tampoco tiene ventas locales significativas, aunque
sí producción.
El banco apunta a posibles impactos en estas compañías en forma de
volatilidad bursátil, costes de financiación y cambios tributarios o de
la normativa energética.
En el caso de la multinacional presidida por Salvador Alemany, UBS
alerta de que "un conflicto podría ser particularmente perjudicial para
Abertis, que podría afrontar una situación incierta" porque su
principal concesión de autopistas (la AP-7) cruza Cataluña.