El Atlético disputa un amistoso con el América
Simeone, estrella máxima en México: recibido con la parafernalia de un actor de cine y confundido con Ricky Martín
martes 29 de julio de 2014, 09:49h
Otro triunfo para Diego Simeone, al margen del balompié. Porque el argentino entrenador del Atlético de Madrid, llegó a México en medio de una parafernalia reservada a los actores de cine y se adaptó tan rápido al papel de visitante ilustre que algunos viajeros lo confundieron en el aeropuerto con el cantante Ricky Martin. Simeone, genio y figura.
Simeone, de 44 años, dirigirá al
Atlético que este miércoles enfrentará en un amistoso a las
Águilas del América, pero su recibimiento por parte de los medios fue
como si su equipo fuera a disputar la final del Mundial de Clubes contra
el rival mexicano. Con una barba bien cuidada, pelo corto y una
bermuda azul en juego con una playera con los colores de su equipo,
Simeone se paseó por el pasillo de la Terminal como un Jesús resucitado y
sordo, aclamado por varias decenas, e incapaz de reaccionar a las
preguntas de los periodistas y los pedidos de fotos de los hinchas.
"Vamos a hablar cuando hagamos la conferencia", fueron las únicas
palabras que pronunció durante su traslado al autobús, protegido por dos
personas del club, una de pelo negro que gritó y repartió codazos como
si estuviera a cargo de la seguridad de un político y otra con palabras
de amenazas a los reporteros más insistentes.
A la misma hora,
decenas de seguidores de Ricky Martin esperaban la llegada del artista
puertorriqueño y al ver al "Cholo" Simeone tan en su papel de gente
importante entre cámaras y micrófonos corrieron confundidos hacia el
argentino. "No es él, debe ser un futbolista uruguayo", le dijo una
joven con una perla en la nariz a un amigo adorador de Ricky.
El lado más humano
En
la ciudad donde el escritor Gabriel García Márquez escribió "Cien años
de Soledad", su mejor novela, la llegada de Simeone pareció hoy más una
historia de las del realismo mágico del colombiano que una nota previa a
un partido de fútbol. El atraso del vuelo llegado de San
Francisco, donde el Atlético venció ayer en serie de penaltis al San
José Earthquakes, fue la primera señal de una cobertura anormal que
siguió con rumores sobre cambios del lugar por donde arribaría el equipo
español.
Los periodistas se fueron y regresaron varias veces de
la puerta buena a la equivocada y si pudieron dar con el entrenador, no
fue por astucia, sino porque Edgar Chain, un abogado que llevaba cuatro
horas de espera de que Simeone le firmara una camiseta, descubrió al
técnico a la entrada de un baño y dio la voz de alarma.
"Me la
firmó y también me tomé una foto con el volante Mario Suárez", dijo a
Efe el mexicano que sigue al Atlético porque su abuelo era español y
adoraba al club. Mañana, espera que Simeone saque su lado más
humano en una conferencia de prensa. Como suelen hacer los entrenadores
extranjeros en México, quizás agradezca jugar en el Azteca donde se
hicieron campeones mundiales Pelé y Maradona y jure buscar la victoria
ante América, a pesar de no contar con el delantero croata Mario
Mandzukic ni con el centrocampista portugués Tiago Mendes.