La participación de Anro en este proyecto internacional consiste en la fabricación en sus instalaciones de Tomelloso (Ciudad Real) de 10 grandes vigas metálicas, de 42 metros de longitud por 2,6 de altura y 40 toneladas de peso cada una, que serán posteriormente enviadas hasta Panamá despiezadas y una vez en destino montadas con uniones atornilladas en las se emplearán unos 12.000 tornillos.
Los puentes han sido calculados para soportar las grandes cargas de los equipos a transportar hasta y desde la zona minera y salvarán dos ríos panameños: el Río del Medio y Río Uvero, dentro del complejo acceso al megaproyecto minero denominado Cobre Panamá, el principal proyecto de cobre en desarrollo a nivel mundial, con más de 6.000 millones de dólares de inversión, que entrará en explotación en 2017 y es la mayor inversión privada en la historia de Panamá.
Anro ha participado anteriormente en otros proyectos en Panamá, como la construcción de las cubiertas del nuevo Tribunal Electoral, tres pasarelas cubiertas para la ciudad de Panamá o una nave de máquinas para una central hidrológica en este país centro americano.