Sólo 2 de cada 10 autónomos tiene cubiertas las contingencias profesionales
viernes 25 de abril de 2014, 14:03h
En
diciembre de 2013, el número total de autónomos inscritos
en contingencias profesionales ascendía a 653.188 personas (436.977 hombres y
216.211 mujeres), representando una cobertura del 21,56%[1] total
del colectivo de autónomos. Teniendo en cuenta este porcentaje, 12.876
autónomos con la contingencia profesional cubierta sufrieron un accidente de
trabajo a lo largo de 2013, de los cuales 15 resultaron mortales, según se
desprende de un informe elaborado por la Federación Nacional de Asociaciones de
Trabajadores Autónomos, ATA, en colaboración con Mutua Universal en el que se
analiza la siniestralidad de los trabajadores autónomos a nivel nacional, y en
el que se incluyen datos por comunidades autónomas.
El informe refleja cómo aún ocho de cada diez autónomos
no tienen cubiertas las contingencias profesionales, por lo que "si extrapolamos
estos datos al resto de autónomos que no tienen las contingencias profesionales
cubiertas, la siniestralidad en el colectivo sigue siendo
muy elevada" señala José Luís Perea, director del área de prevención de riesgos laborales
de ATA.
A pesar de que únicamente dos del cada diez autónomos -
el 21,56% - cotizaba en 2013 por contingencias profesionales, el porcentaje ha
aumentado ligeramente con respecto a los autónomos que lo hacían en 2012,
cuando el número de autónomos que tenían cubierta esta cobertura era 16 décimas
inferior, el 21,40% del total de autónomos (647.519, de los que 433.453 eran
hombres y 214.066 mujeres).
Además, durante 2013 el número de accidentes de
trabajo disminuyó con relación a 2012: si en 2013 del total de autónomos
que tenían cubiertas las contingencias profesionales (un 20,56% del colectivo)
se accidentaron 12.876 trabajadores, en 2012 lo hicieron 13.171.
ASTURIAS, CANTABRIA
Y CASTILLA LA MANCHA, LAS QUE MÁS ACCIDENTES SUFREN
El informe elaborado por ATA incluye los datos de
siniestralidad del colectivo según las comunidades autónomas. Para ello, se ha
utilizado el denominado "índice de
incidencia que mide la
siniestralidad en función de los autónomos con los que cuenta dicha región
cotizando por contingencias profesionales.
Teniendo
en cuenta el número de accidentes en jornada laboral que han sufrido los
trabajadores autónomos con la contingencia profesional cubierta (12.876), y el
total de autónomos que tienen la contingencia profesional cubierta a nivel
nacional (653.188); la
siniestralidad de los trabajadores autónomos
en base al índice de incidencia
para el periodo de estudio, es de 1.971,25.
Así,
las comunidades autónomas de Asturias, Cantabria y Castilla la Mancha fueron
las que sufrieron mayor siniestralidad del colectivo de autónomos a lo largo de
2013: Asturias, con un índice del incidencia de 3.000,11 (de entre los
19.099 autónomos asturianos que tenían cubiertas las contingencias de trabajo,
se produjeron 577 accidentes de trabajo en 2013), Cantabria, con un índice del
incidencia de 2.689,09 (entre los 9.185 autónomos cántabros que tenían cubiertas
las contingencias de trabajo, se produjeron 247 accidentes) y Castilla La
Mancha, con un índice del incidencia de 2.511,73 (de los 38.858 autónomos
castellanomanchegos que tenían cubiertas las contingencias de trabajo, se
produjeron 976 accidentes).
En
el otro extremo, las comunidades en las que se dio una menor siniestralidad
en 2013, teniendo en cuenta el número de accidentes y el total de autónomos, fueron
la Comunidad de Madrid, Región de Murcia e Islas Canarias: Madrid, con un
índice del incidencia de 1.465,36 (de los 81.004 autónomos madrileños que
tenían cubiertas las contingencias de trabajo, se produjeron 1.187 accidentes
de trabajo en 2013), Murcia, con un índice del incidencia de 1.476,11 (de los
19.172 autónomos murcianos que tenían cubiertas las contingencias de trabajo,
se produjeron 283 accidentes) e Islas Canarias, con un índice del incidencia de
1.537,42 (de los 31.221 autónomos que tenían cubiertas las contingencias de
trabajo, se produjeron 480 accidentes).
En términos
absolutos de los 12.876 accidentes sufridos por los trabajadores autónomos, en jornada
laboral y con la contingencia profesional cubierta. Las comunidades autónomas
que registraron mayor accidentabilidad en números absolutos fueron Andalucía (2.641 accidentes), Cataluña
(1.307), Galicia (1.275) y Madrid (1.187). En el extremo opuesto se sitúan
Ceuta (3 accidentes), Melilla (4), La Rioja (133) y Navarra (209).
CONSTRUCCIÓN
Y AGRICULTURA CONCENTRAN EL 60% DE LOS ACCIDENTES MORTALES
Si
analizamos los datos de siniestralidad en valores absolutos, atendiendo al
sector de actividad donde se produjeron, así como la gravedad de los mismos,
cabe destacar que construcción y agricultura concentraron seis de cada diez
accidentes mortales, con 5 y 4 victimas mortales, respectivamente, a lo largo
de 2013.
La distribución de los accidentes de trabajo en jornada
de trabajo según gravedad por división de actividad y en números absolutos, son
los siguientes: Servicios (4.145 accidentes), agricultura (3.834 accidentes),
construcción (2.761 accidentes), industria (1.261 accidentes) y transporte, con
un total de 875 accidentes en 2013.
El 97,27% de los
accidentes de los autónomos en la jornada de trabajo son de grado leve,
concretamente 12.525 accidentes frente a los 15 mortales. Para los trabajadores
por cuenta ajena el 99,12% de los accidentes son leves, dos puntos más que los trabajadores autónomos.
UNA DE CADA DOS MUJERES
ACCIDENTADAS, MAYOR DE 45 AÑOS
En
cuanto a los datos de los accidentes de trabajo de los autónomos atendiendo a
la edad y diferenciando por género, resulta enormemente llamativo el hecho de
que una de cada dos, el 54,66%, de las mujeres que sufrieron un accidente de
trabajo en 2013, y que tenían cubiertas las contingencias por accidente, eran
mujeres mayores de 45 años.
En
el caso de los varones accidentados, los
hombres con edad comprendida entre los 35 y 44 años los que mayor porcentaje de
accidentes ofrecen, un 34,84% del total. Los accidentes entre los autónomos
varones mayores de 45 años supusieron el 43,35% de los accidentes laborales
ocurridos en 2013.
Por
último, el informe elaborado por ATA con la colaboración de Mutua Universal
analiza el perfil de autónomo que sufre accidentes de trabajo, siempre teniendo
en cuenta que los 12.876 accidentes laborales que ocurrieron en 2013 es sobre
los 653.188 autónomos inscritos en contingencias profesionales, que representan
únicamente el 21,56% del total de autónomos.
La mayor siniestralidad de los autónomos recae en hombres
de edad comprendida entre los 35 y 44 años que trabajan en el sector de la
construcción. El diagnóstico de los accidentes es de grado leve y producido por
esguinces y torceduras mayoritariamente en la pierna incluida rodilla. La forma
más habitual son los sobreesfuerzos y los golpes resultado de una caída,
perteneciente a la actividad física específica de "andar, correr, subir, etc".
"La siniestralidad en los
autónomos sigue siendo muy elevada. La prevención de los riesgos en el trabajo
es una gran asignatura pendiente. Es necesario que se frene la elevada siniestralidad en los
autónomos y se cree una conciencia preventiva. De nada sirve festejar el día Internacional de la Seguridad y Salud en el
Trabajo, si el resto del año no se llevan a cabo medidas eficaces para prevenir
la siniestralidad.", señala
José Luís Perea, responsable del área de prevención de riesgos laborales de
ATA.