Platos rotos y venganza: el Madrid, ya casi sin Liga, busca la semifinal de Champions ante el Dortmund, su verdugo de 2013
miércoles 02 de abril de 2014, 10:40h
El Real Madrid, que se ha alejado del título liguero, tratará de encarrilar este
miércoles (20.45 horas/Canal+ Liga Campeones) su pase a las semifinales
de la Liga de Campeones con una victoria lo más amplia posible ante el
Borussia Dortmund alemán -su verdugo en 2013 y al que quiere también que pague los platos rotos de sus desastres ante Barça y Sevilla- , mermado por las bajas, pero que no renuncia a
llevar la eliminatoria 'viva' al Signal Iduna Park.
El conjunto blanco, invicto en la competición, parte como favorito
en este cruce, donde quiere tomarse la revancha de su eliminación del
año pasado en las semifinales del torneo, un favoritismo que ha
aumentado por la cantidad de bajas, en todas las líneas, que tiene su
rival, menos 'temible' y menos 'tapado' que la anterior temporada.
Sin embargo, a las ausencias de los de Jurgen Klopp se unen en el
bando de los de Carlo Ancelotti las dudas surgidas tras perder el
'clásico' y en Sevilla que, sin llegar a igualar plenamente el choque,
afectan a la confianza de unos y otros a la hora de afrontar esta
eliminatoria. El 21 de marzo, fecha del sorteo, el conjunto blanco era
líder y mostraba una impecable solidez de 31 partidos sin perder, y una
decena de días ha perdido parte de esas sensaciones, lo que anima al
actual subcampeón continental, deseoso de aprovechar cualquier resquicio
para volver a Dortmund con aspiraciones de dar la sorpresa.
Con todo, los de Klopp tienen una gran cantidad de bajas que
merman considerablemente su potencial. El campeón de Europa de 1997 se
ha mostrado como un equipo competitivo en Europa, sobreviviendo a otro
'grupo de la muerte', aunque con más apuros, y en la Bundesliga apenas
ha podido inquietar al Bayern de Múnich, aunque en su debe está la plaga
de problemas físicos que complican mucho sus opciones, que pasan por
salir airoso del Santiago Bernabéu.
Así, Subotic y Schmelzer, dos pilares en defensa, y Gundogan,
Bender y Blaszczykowski, piezas claves del medio, sobre todo el primero,
ausente todo el año por problemas de espalda, no estarán en todo el
cruce, mientras que en la capital tampoco estará Robert Lewandowski,
sancionado y que el año pasado fue un auténtico quebradero de cabeza
para la zaga blanca, a la que endosó cinco goles, cuatro de ellos en la
goleada de la ida de las semifinales.
Esta situación no la puede dejar escapar el Real Madrid, ansioso
de recuperar su mejor línea en un momento clave de la temporada y
también de tomarse una revancha deportiva después del revés de la pasada
campaña donde el equipo 'borusser' se le atragantó. El equipo germano
era uno de los apetecibles para los madridistas en el sorteo y ahora no
quieren dejar opción a la sorpresa.
Para ello esperan una buena noche europea en el Santiago Bernabéu,
que ya dio un pequeño aviso al equipo el pasado sábado ante el Rayo
Vallecano, pero que se volcará para hacer un viaje sin agobios a un
todavía un 'territorio maldito' pese a la exhibición en Gelsenkirchen.
Aprovechar el potencial ofensivo y volver a la sobriedad atrás para no
encajar ningún gol que dé alas al Borussia se presentan claves.
CRISTIANO QUIERE REVANCHA.
No habrá excesivas sorpresas en el once titular de Ancelotti, que
se ha encontrado sin embargo con un problema de última hora, con la
lesión de Marcelo, que no jugará seguramente tampoco la eliminatoria
completa. Fabio Coentrao entrará por el brasileño, con lo que el equipo
ganará en fortaleza defensiva a costa de perder la ofensiva.
También volverá Iker Casillas, en medio del 'eterno' debate de la
portería, mientras que el centro del campo recuperará su figura más
habitual con el trío Xabi Alonso, Luka Modric y Ángel di María, después
de que el croata descansase ante el Rayo. Arriba, Cristiano Ronaldo,
Gareth Bale y Karim Benzema, que buscarán hacer daño a una zaga, que
prácticamente anuló al portugués en los cuatro enfrentamientos del año
pasado, pero que es de menor solidez.
El Real Madrid tratará de hacer daño con el de Madeira y el de
Cardiff sobre todo dado que el Dortmund 'cojea' por los laterales donde
el polaco Piszczek no está al nivel del año pasado y Klopp tiene que
decidir qué hace en la izquierda para sustituir al solvente y peligroso
Schmelzer, si poner a un centrocampista como Kevin Grosskreutz u optar
por el joven e inexperto Durm, que tendría la papeleta de frenar al
galés.
En el centro del campo, el carismático técnico alemán confiará en
el veterano Kehl, superviviente de los enfrentamientos con los blancos
de 2002-2003, y Nuri Sahin, que intentará mostrar las credenciales por
las que el club madridista apostó por él. Arriba, Marco Reus, clave el
año pasado y que llega de firmar un 'hat-trick' al Stuttgart, acaparará
todas las miradas y las posibilidades ofensivas visitantes, sin
descuidar la figura de Aubameyang.