La crisis se lleva por delante más de 43.000 negocios emprendidos por mujeres, según ATA
jueves 06 de marzo de 2014, 11:07h
Los negocios liderados por mujeres se mantienen más en el tiempo porque
arriesgan menos y sus expectativas son más prudentes, según un informe
de ATA elaborado con motivo del Día Internacional de la Mujer, que se
conmemora el próximo sábado, 8 de marzo.
Pese a ello, la crisis se ha llevado por delante más de 43.000
negocios emprendidos por mujeres, aunque eso sí, esta cifra es mucho
menor que la de los varones. En concreto, desde mayo de 2008 hasta
diciembre de 2013 se han perdido en España 357.213 autónomos, de los que
314.023 eran varones frente (el 87,9%), frente a 43.190 mujeres
(12,1%).
Así, el ritmo de pérdida de empleo autónomo masculino desde el
inicio de la crisis ha triplicado al de las mujeres, con descensos del
13,6% en el caso de los hombres y del 3,9% en el de las mujeres.
A pesar del fuerte retroceso en el número de autónomos registrado
en los últimos años, 2013 fue por fin un año positivo para el
autoempleo, pues por primera vez en la crisis creció la cifra de
emprendedores, con un total de 28.815 altas.
El comportamiento registrado por las mujeres fue más favorable que
el de los varones, al haber cerrado 2013 con un crecimiento del 1,9%,
frente al 0,4% de los hombres, de manera que el ritmo de crecimiento de
empleo autónomo femenino en 2012 multiplicó por cinco el de los varones.
De los 28.815 nuevos emprendedores que sumó el RETA el año pasado,
20.310 son mujeres, el 70,5%. "Numerosos estudios concluyen que la
diversidad de género en la economía es rentable puesto que las empresas
que la aplican obtienen mejores resultados empresariales", ha subrayado
la responsable del área de la Mujer de ATA, Ana Cabrero.
No obstante, el peso de la mujer autónoma en España es aún muy
inferior al de los varones, ya que representan el 34,8% del total de
autónomos, es decir, que uno de cada tres trabajadores por cuenta propia
es mujer, frente a dos de cada tres hombres.
Las mujeres autónomas son más numerosas que los hombres en
prácticamente todos los sectores: comercio; hostelería; actividades
profesionales, científicas y técnicas; actividades sanitarias;
actividades administrativas; actividades financieras y de seguros;
actividades artísticas y de entretenimiento, y actividades
inmobiliarias.
Por su parte, además de en la construcción, los varones son más
numerosos proporcionalmente en la agricultura, el transporte, la
industria y el sector de información y comunicación.