Tamara Falcó convertida en una gran maruja atendiendo su hogar

Estoy muy preocupada. No se lo tomen ustedes a cachondeo porque la cosa es seria. Mucho además. Tamara Falcó se ha cambiado de piso. El que tenía frente al Palacio Real le aburría y ahora se ha ido a vivir a lo que viene siendo la zona más natural en ella, el Barrio de Salamanca. La zona del Real es también muy osea pero es más para el osea que lee mucho, que enlaza a Neruda en las conversaciones, que tiene otro aquél, digamos, más chic.
Como no podía ser de otra manera, Tamara nos lo cuenta en Hola en dieciocho páginas. Miren, lo primero que les digo es que hay qué ver cómo aguantan algunas las mudanzas. Todo el mundo sabe que son agotadoras y me imagino que ella se habrá afanado como cualquiera en el noble y engorroso arte de hacer y deshacer cajas. 
La terraza, con unas vistas ideales, se la ha dedicado a la Virgen. ¿Qué pasa? Cada uno se lo dedica a quién quiere. La decoración la define ella como, clásica y moderna ¿? Y divertida. ¿Se han dado cuenta ustedes la increíble capacidad que tienen las pijas para poner la palabra divertida a cosas, a todas, luces, inanimadas? "Es una lámpara muy divertida" te sueltan. Y tú te quedas así como con cara me mema preguntándote si una cosa puede ser divertida. Las pijas como Tamara tienen objetos divertidos y se lo pasan "bomba" con sus amigas a pesar de haber superado los treinta.  Dice Tamara que echa de menos las comodidades de su casa. Yo la comprendo; pasar el aspirador, pasar la mopa, poner lavadoras, tender la ropa, plancharla, fregar los baños es algo bastante coñazo y ella ahora lo estará padeciendo. Pobre. Eso sí, se siente un poco solita y por eso duerme a veces en casa de mami...ahí queda eso. ¡Congrats, Tamara!
El torero más chulo de todos los tiempos, Fran Rivera, se ha topado en el rastrillo de Sevilla con otra de armas tomar, la Duquesa de Alba, que pa chula, ella. Porque lo vale y porque lo tiene. Ni se miraron. Normal. Después de la faena (fuera del ruedo) que pretendió hacerle a la niña de sus ojos queriéndole quitar la custodia de su nieta, la Duquesa ni olvida ni perdona. Rivera, Rivera, que te me pierdes. Dedícate a tu Lourdes antes de que se le pase el amor que te tiene y deja a la niña con su madre y disfrútala los días que te toca. 
La familia real Holandesa posa junta y unida en la nieve. Es la primera vez que lo hacen desde el fatídico accidente que acabó con la vida de Friso, el hijo de la princesa Beatriz. La vida sigue y ellos están dispuestos a demostrarlo. Eso sí, su viuda esquía vestida de negro. 
Una pareja que se rompe: Miguel Ángel Silvestre y Blanca Suárez. Después de interminables broncas en la calle parece que, al fin, han decidido romper. Ya lo saben los y las fans de cada uno de ellos. Están de nuevo lbres. Y hablando de rupturas, las hay más o menos traumáticas. La de Hollande y Valérie fue muy heavy pero, oigan, si te ponen los cuernos y te pillan es muy doloroso, cierto, pero si te vas de vacaciones la caribe a razón de cabaña por 1240 euros la noche con unas amigas, las penas parece que son menos penas. ¿No les parece? Por cierto, la nueva novia de mister Hollande será muy joven y muy mona pero vaya tipazo que tiene Valerie, ya lo quisieran para sí muchas de treinta y pocos. Eso es poderío y lo demás, tonterías. 
Esta semana no sale Terelu en las revistas. ¿No les parece que les falta algo a sus vidas?  A mí, sí. En su lugar sale Rosa Benito que está la pobre ingresada en un psiquiátrico. Rosa Benito es la versión del pueblo llano de la infanta Cristina. Se ha dado cuenta en pocos meses de la perla del Turia que tenía como marido. Cuernos, estafas, faltas de dinero y nunca se sabrá qué más. Pobre mujer, lo que le queda por superar. 
Iker Casillas y Sara Carbonero han salido a cenar. ¿?. Vale, ¡qué notición! , ¿a qué sí? Pues es portada de Diez Minutos. Que algo tan cotidiano y normal como ir a cenar con tu chico sea motivo de portada de revista me da qué pensar, ciertamente. ¿Cuál será la próxima exclusiva? ¿Que han ido a leroy Merlin a comprar tornillos? Me temo que sí, rediós. 
Firmado: la jefa de las marujas