El sueldo del alcalde Trias y algunos más
viernes 31 de enero de 2014, 11:43h
"No estoy
de acuerdo en que me marquen el sueldo desde Madrid. Encuentro ridículo que un
ministro desde Madrid quiera decir cuál es el sueldo del alcalde de
Barcelona", ha defendido Trías, que como primer edil cobra 143.708
euros entre el Ayuntamiento y dietas de dos organismos. Y creo que esta declaración, este
desprecio nada sutil refiriéndose a lo "ridículo" que le resulta al señor Trías
que "un ministro desde Madrid..." etc., resume en buena medida el fondo no
económico del problema Cataluña versus España.
Porque lo que no
parece entender muy bien el señor Trías son varias cosas que para un político
de su talla deberían estar meridianamente claras, al menos por ahora. Y quizás
lo primero que debería entender -aun antes que otras cosas, como paso previo-
es que visto desde fuera resulta absolutamente inmoral que un alcalde gane lo
que él gana cuando en su ciudad, según se ha reconocido ya en muchos sitios, -y
no sólo en la suya, claro, pero también en Barcelona- hay ya bolsas de pobreza
en la que viven niños que no tienen asegurada la comida todos los días. Mire,
señor Trías, que usted gane casi 143.780 euros al años (casi dos millones de
pesetas al mes en 12 pagas) me resulta -a mí- impúdico, vergonzoso, me da rabia
y hasta me llena ira, pacífica, pero no dude que ira al fin. No sé cómo es
capaz. Y se lo digo a usted porque es el alcalde con el mayor sueldo de España,
pero por algo menos, hay bastantes ediles más con que sin gastar en coche, ni
ocio, ni prácticamente nada, se están embolsando cantidades que nos son las de
un servidor público en un país con seis millones de parados. Ya sé que me dirán
que compare con lo que ganan directivos de empresas privadas o consejeros de
los bancos; pero no vale. La única comparación posible es lo que han
cobrado/robado legal e ilegalmente gerifaltes de algunas cajas de ahorros. Pero
eso no le justifica a usted ni a otros alcaldes, solo les pone al mismo nivel
de vergüenza.
Y una vez
explicada mí por lo visto desvariada visión de lo que debería ser el servicio
público, paso a lo que creo que usted confunde y expresa tan torpemente.
De entrada no es
"un ministro desde Madrid" el que decide su sueldo; a ver si nos vamos
entendiendo. Es cierto que la decisión de fijar límites de los sueldazos de los
alcaldes se toma desde Madrid por una razón comprendo que dolorosa para usted:
porque Madrid, por ahora sigue siendo la capital de España como París lo es de
Francia y es en la capital del estado donde reside físicamente el Gobierno de
la Nación. Y sigamos con las explicaciones: no parece tampoco muy serio que
achaque usted la bajada de su sueldo "a un ministro". Hombre, señor Trías, que
estas cosas no se hacen así y usted lo sabe, que la decisión no es de "un
ministro" sino el acuerdo que toma un Consejo de Ministros del Gobierno de
España elegido democráticamente por todos los españoles. Comprendo que debe ser
duro de aceptar por usted, pero a día de hoy las cosas son como son y Cataluña
sigue perteneciendo a España. Tiempo habrá cuando sea para lo que sea si es que
alguna vez llega a ser.
Y que le parezca
ridículo el hecho, pues no deja de ser una expresión pelín despectiva porque si
nos preguntaran a muchos, incluidos muchos catalanes y muchos barceloneses,
diríamos que lo ridículo es que usted tenga el sueldo que tiene. Ridículo y
ominoso. Lo suyo y lo de otros. Es más: lo que es ridículo para muchos de
nosotros es que después de tanto pregonar la reforma, el Gobierno de España
(que no de Madrid) haya sido tan absolutamente timorato y haya fijado en
100.000 euros el tope máximo para los alcaldes. Usted tranquilo, señor Trías,
unos pocos miles de euros menos repartidos entre doce o catorce pagas y ganando
más de cien mil, no va a perjudicar seriamente su economía. Seguro que
recortando un poco de aquí y de allá llegan a fin de mes. Fíjese, hay gente que
vive con pensiones de 400 euros...