SATSE se posiciona, en un comunicado, "en contra de
cualquier decisión que en base a criterios economicistas pase por la reducción
de profesionales sanitarios y la destrucción de empleo, con la consiguiente
repercusión en la salud de la población".
Este
sindicato quiere recordar a los dirigentes
y gestores sanitarios que la Atención Primaria de Salud es la puerta de
entrada a la asistencia sanitaria de toda la población, con la que se garantiza
la atención urgente, la continuidad de tratamientos y cuidados, así como la
promoción y prevención de la salud.
Por
ello, SATSE alerta sobre las consecuencias que la disminución de plantilla
pudiera acarrear en una población de más de 80.000 habitantes y con cuatro
núcleos de población anejos y dispersos,
que se ha traducido en la atención a lo largo de este año 2013 de más de 65.000 pacientes, de los que más de
5.000 fueron tratados directamente en su domicilio.
El
Sindicato de Enfermería considera que cualquier reducción del personal
sanitario de este ámbito repercutirá directamente sobre la población,
provocando un deterioro en las condiciones de salud y, como demuestran numerosos
estudios científicos, el aumento de la morbimortalidad y la reducción de la
esperanza de vida.
Además, dice que supondrá el aumento de la demanda del servicio de Urgencias hospitalarias y, por tanto, la saturación de un servicio ya
desbordado por las medidas de recorte, así como también el incremento de las llamadas
al servicio de emergencias 112, lo que
conllevará un mayor coste y una disminución de su eficiencia.
Por
ello, SATSE insta a los gestores "a que reflexionen esta medida, que se llevaría
a cabo sin ningún tipo de negociación y cuyo único fin es el ahorro, cuando en todo caso el objetivo final debería ser la
garantía de una asistencia sanitaria de calidad, gratuita y accesible para toda
la población".