Armada, héroe o villano: ¿cómo saberlo?
lunes 02 de diciembre de 2013, 13:01h
Durante algunos años, me
dediqué a investigar los entresijos del intento de golpe del 23 de febrero de
1981. Entre varios periodistas, días después de la intentona brutal encarnada
por el hoy ex teniente coronel de la Guardia Civil Antonio Tejero, sacamos a la
luz un libro, titulado 'Todos al Suelo', en el que dábamos algunos nombres de
la presunta trama civil. Algunos notorios franquistas nos demandaron, y así
estuvimos, demandados, once años, sin que nadie se atreviese a celebrar un
juicio que habría supuesto reabrir un caso que se quiso enterrado y bien
enterrado, aunque jamás del todo esclarecido. Tal vez por ello, el
verdadero papel en la trama del ex general Alfonso Armada, fallecido hace pocas
horas, nunca ha quedado perfectamente aclarado. ¿Fue el héroe que evitó que se
consumase un golpe brutal que hubiese costado, como en Chile con Pinochet,
mucha sangre? ¿O fue el villano que traicionó la confianza del Rey y que, por
ambición de llegar a presidir un Gobierno, conspiró para derribar al
tambaleante Gobierno civil tras la dimisión de Adolfo Suárez?
Nunca he sido capaz de
responder de una manera categórica a esta pregunta. Y eso que, también junto a
otros dos periodistas, escribí otro libro de investigación, años después de
aquel 'Todos al Suelo', al que pusimos por título, rememorando la célebre
novela de John Kennedy Toole, 'La Conjura de los Necios'. En esta última obra
nos decantábamos más bien por la presunción de cierta inocencia -en esta
película nadie es del todo inocente y sí algunos, comenzando por Milans del
Bosch y Tejero, son del todo culpables-del ex general Armada. Lo que
pensábamos, y pensamos, después de hablar con no pocas fuentes, era que este
hombre, muy próximo durante tantos años al Rey, concibió un plan para 'salvar a
España' en momentos de gran actividad del terrorismo de ETA y cuando el
presidente del Gobierno que había pilotado la transición acababa de dimitir en
circunstancias no muy claras. Así, Armada, que jamás confesó esto
explícitamente, habría imaginado un Ejecutivo de concentración, naturalmente
encabezado por él mismo, en el que se daría entrada minoritaria a ministros
socialistas y hasta a algún comunista -se habló de Ramón Tamames- y que,
durante un tiempo limitado, pondría orden en la nación.
Ignoro si Armada pidió a no
permiso al Rey para poner en marcha su plan unipersonal -él alguna vez sugirió,
en privado, que algo de eso hubo--, pero tiendo a pensar, por lo que ocurrió
posteriormente, que Don Juan Carlos no solo no estaba informado de los planes
de quien tanto mandó en La Zarzuela, sino que se horrorizó al ver el desarrollo
de los acontecimientos aquel 23-f-1981. Sobre todo, por la compañía en cuyas
manos Armada había puesto sus proyectos, aquella tropa mal uniformada que
entró en el Congreso pegando tiros al techo, zarandeando a quien ostentaba el
poder civil -el teniente general Gutiérrez Mellado-y vejando a los padres de la
Patria. Me parece que el propio Armada también se horrorizó al contemplar todo
aquello, creo que tan lejano a sus planes ideales, y me parece que comprobó su
equivocación al evidenciar que aquella jornada, y ya ninguna otra, no iba a ser
recibido en el palacio desde el que el Rey iba a lanzar su célebre discurso
televisado.
Así, la historia de Alfonso
Armada sería no la de un golpista al modo bananero de Milans, de Tejero o de
Merry Gordon, sino la de un enorme equivocado. La de alguien que se creyó
llamado a una gesta de grandeza, pero nadie le había convocado a ella. La del
salvador de una nación -algo muy propio de un alto militar de su condición social
y trayectoria- que se negó a ser salvada por él. Triste papel el suyo, el del
general que será recordado más bien en las páginas negras de la Historia,
cuando se lo jugó todo por aparecer en las más brillantes. La del monárquico a
ultranza que acabó desprestigiado ante su Señor. La del ansioso de protagonismo
que acabó sus días olvidado y, dicen, amargado. Pero, eso sí, siempre guardó,
pensando que eso es acaso lo propio de un súbdito leal, 'su' secreto. Y ya son
muy pocos -quizá aquel comandante Cortina, del CESID, que escapó por los pelos
del juicio contra los golpistas en Carabanchel- los que podrían, quién sabe,
contar entera y desde dentro la macabra película del 23-F.
- El blog de Fernando Jáuregui: 'Cenáculos y mentideros'>>
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25389 | Centinela de Occidente - 10/12/2013 @ 14:59:39 (GMT+1)
Sobran los que están, faltan los que son.
Las «ausencias» de Fraga, los «silencios» de Fraga, el «ego» de Fraga..., las incongruencias de Fraga, los «esotéricos» misterios de Fraga. ..Lo veníamos comentando mis amigas y yo con Sol Jaúdenes cuando regresábamos de Campamento... Ir «allí» era emocionante y problemático, pero el regreso deparaba la sorpresa de un nuevo conocimiento. Nunca sabias con quién te tocaría volver en el «reparto» de coches; personas a las que no habías visto nunca y de pronto se te convertían en amigos de toda la vida, sólo por el. hecho de encontrarlos «allí»... Era como un lenguaje en clave, con silencios, o con palabras, o con miradas, que son todo un tratado de solidaridad, de sentimientos comunes en circunstancias adversas... Era que a todos nos dolía y nos duele España y el drama de los amigos entrañables del 23-F y unos encontrábamos como en las catacumbas los antiguos cristianos, con alegría, esperanza y fe.
Lo veníamos comentando. Fraga ha deshecho sistemáticamente toda posibilidad de un frente común contra el marxismo. El juego del liberalismo, desde sus tiempos de bombín y bastón británicos y sus «contactos» londinenses, le ha enloquecido... No es nueva esta metamorfosis... Los grandes ambiciosos, los afectados de megalomanía, suelen ser los más grandes ciegos, los más estrepitosamente fracasados... Siempre se quedan a las puertas del poder; aunque se cojan del brazo de la revolución, siempre acaban siendo sus victimas. Ya dijo Tejero la noche del 23-F que «Fraga era peor que Carrillo».
Fraga ha estado en Murcia. Y ha roto su silencio. No quiso decir nada sobre «la sentencia». Pero ha «excomulgado» a Tejero. Lo ha arrojado de su «Iglesia» a las llamas del infierno sin Fraga... «Desmiento rotundamente que en las tertulias de militantes de Alianza Popular se haya «piropeado» a Tejero porque el que lo hiciera seria automáticamente expulsado...» Gracias por su claridad. Yo ya lo sabía hace mucho tiempo. Desde sus primeros pasos en la carrera del poder. En Murcia nos dio una imagen muy gráfica de sí mismo por aquellos sus fulgurantes años de ministro de Información y Turismo. Sube la rampa de la catedral a paso de gimnasta. La comitiva asciende todavía con la lengua fuera cuando él baja como un ciclón. Devora los tres platos del banquete cuando los comensales van por los aperitivos. Los deja sin comer. Derriba de una patada la puerta de la garita del aterrado guardaagujas del paso a nivel de San Javier a La Manga que se atrevió a poner la cadena cinco minutos antes de la hora, sin adivinar que el ministro tenía que pasar... Cuando su eclipse del 69 se queda aparentemente «dormido»... Ya entonces, y antes, en el Instituto de Cultura era «esotérico»... Empieza a conspirar en la sombra... En 1973 «sabe» que va a ocurrir algo que cambiará la Historia y se va a Londres...; es su etapa de «britanización», su etapa de «contactos», su «prebildergerización»... Regresa cuando todo está ya consumado y obtiene su «premio», corto premio por el que pagará la factura de la presentación de Carrillo en el Club Siglo XXI... «Yo siempre le llamo don Santiago», dijo recientemente. Ni siquiera estas asombrosas veleidades le procuran otra tajada del poder. Está perpetuamente relamiéndose ante la tarta, mendigando a las puertas de la Moncloa, mandando recaditos a Santa Engracia. Le distraen, le entretienen, le prometen, pero la tarta siguen comiéndosela los otros: el tándem Leopoldo-Felipe y compañía. Y llega lo de Galicia. y ocurre lo de Andalucía. La gente que no quiere que le pille el toro y al final la cornada va a ser mortal. Y ya se cree un profeta. Fraga tronando su cólera, Dios en su sinaí de soberbia, relampaguea de ira: «¿Tejero?, la duda ofende», parece clamar con su mirada frenética, sus ojos vueltos; y desde su vanidad, miedo a que se le escape el poder por «sospecha de adhesión» a «los del 23-F», arroja a Tejero a las calderas hirvientes de su infierno particular e intransferible: Le excomulga.
Me alegro por muchos militares que aún siguen creyendo en el Milagro Fraga. Ese es el Fraga que yo conozco. El único Fraga. Fraga sólo sirve a Fraga. y a su inmensa megalomanía. Se aliará con el demonio si cree que esa alianza le puede procurar la Moncloa. Fraga invitado a la Bildeberg, Fraga «esotérico» no vacilará en ser Kerenski por un retazo efímero de poder. Conviene que no lo olvide ese Ejército que ha encajado «tan serenamente, según ver- Conviene que no lo olvide ese Ejército que pudo ser proclive a las «invitaciones» de Armada. Ese Ejército que ha encajado «tan serenamente», según versión del banquero-ministro, la sentencia del 23-F, la que rebaja 24 años a Armada, «machaca» a Miláns del Bosch y a Tejero, y pone en libertad a Cortina, dejando en el aire los flecos de las implicaciones del CESID... La sentencia que ha soliviantado por «las otras libertades» por lo que estiman su blandura al «patio» cuyos careos tienen a veces ecos de graznidos de cuervos... Hay que reformar urgentemente el Código castrense, reponer los suprimidos juicios sumarísimos... Ay, si se pudiera reponer también la pena máxima sin escandalizar a Sor Intrépida y los famosos derechos humanos... Las bocas democráticas lanzan espumarajos de rabia...
Vergüenzas ajenas cotidianas nos están quitando la capacidad del sonrojo. Una ve tanto, oye tanto, se asombra tanto, ante esta España mugrienta utilizada como prenda en los cambalacheos de tos mercaderes con siglas de poder, que una no puede evitar traer a la memoria a Spengler y su mensaje de esperanza. Pero una voz lejana que me llega desde Madrid, la voz de esa española del carlismo que es Maria Teresa Aubá, añeja de experiencias, de saberes, de estar de vuelta de tantas cosas, me echa un jarro de agua fría: «No te hagas ilusiones, me dice yo he estado cada día en la escena de Campamento... y he visto y escuchado tantas cosas que sonrojan, que avergüenzan... tantas dejaciones, tantas negaciones... que estoy convencida que en Alcalá queda el último reducto de aquella España viril, valiente y heroica que venció al comunismo...»
http://www.generalisimofranco.com/23f/13.htm
Sobran los que están, faltan los que son. Desenredando la madeja.
Conviene seguir en la labor.Uno de los ejercicios más apasionantes para entender las claves que se esconden tras el 23-F es volver continuamente sobre nuestros pasos, despejando el camino de falsas pistas, para adentrarnos sin miedo en el túnel del tiempo que nos depara sorprendentes hallazgos.
Si algo tan complejo y trascendente como el desmontaje y demolición del Estado del 18 de Julio tuvo sus lejanos antecedentes en Munich, en 1962, donde afianzaron su protagonismo para el futuro personajes que hoy están en la cumbre del Estado de las Autonomías, diseñado entonces, no resulta descabellado afirmar, y la realidad nos da la razón, que para llegar al ritmo de descomposición nacional que el mismo juicio de Campamento delata, hubo que preparar el terreno propicio con antelación. No nos cansaremos de repetir que en política, en la clase de política que padecemos, nada ocurre por casualidad. Por eso resulta tan estimulante y esclarecedor volver de cuando en cuando la vista atrás para buscar y descubrir claves reveladoras de tantos enigmas actuales.
Retrocediendo al año 1975, varios eventos reclaman nuestra atención. Los síntomas más patentes de decadencia del régimen tienen como telón de fondo en aquel verano, precursor de acontecimientos históricos que ocurrirían meses después: La visible decrepitud de Franco abrumado ya por la evidencia de que la España que él tanto amó cruje y se cuartea sin posibilidad de apuntalamiento, carcomida por las fuerzas oscuras contra las que ya no puede luchar y cuyo dato más perentorio es la situación del Sáhara, para el que la posición «oficial» ostenta ya, sin tener en cuenta la opinión de las Fuerzas Armadas, moral de abandono... Curiosamente, el coronel Carlos de Meer, defensor del capitán Dusmet, de la DAC, asegura, refiriéndose a la retirada del Sáhara, que su defendido sintió «rabia, vergüenza y deshonor»... reproche que parece un aviso al presidente del tribunal...
Con el «transitar» de la política, llegaría al quinto Poder: Director General de RTVE. Francisco Ansón detentó los más variados cargos, desde formar parte del equipo censor de RTVE, hasta poner en marcha un programa, en colaboración, con el Alto Estado Mayor, para la Defensa Nacional, que permitiría a los hermanos Ansón relacionarse con figuras de la Milicia que luego veremos en altos cargos en la «transición».
Aquel verano de 1975 Luis María Ansón, discrepante del franquismo, «cerebro gris» de Estoríl, presta un gran servicio a la Corona: «diseña», «sugiere» con un año de antelación el futuro presidente de la «transición», el «instrumento» que necesita el futuro Rey de España para romper las ataduras que le ligan, legalmente, al pasado. Este joven monárquico perpetuamente en la oposición, en aquel verano y en las páginas del semanario que dirige, «Blanco y Negro», otorga el titulo de «político del mes de junio» a un eterno aspirante «a lo que sea», un «segunda fila» del régimen, que un año después haría famoso un pueblecito abulense: Cebreros.
Van colocándose los peones. Un «accidente estúpido» había segado una vida prometedora: la de Fernando Herrero Tejedor. Adolfo Suárez, a remolque suyo constantemente, cesa como vicesecretario general del Movimiento. Luis Maria Ansón le «insufla» nueva vida política con el homenaje que patrocina «su» semanario. En el colmo de la fantasía escribe que «si Carrero Blanco no hubiera caído brutalmente asesinado», Adolfo Suárez hubiera sido ministro en la crisis que se «preparaba» para comienzos de 1974... Los Ansón nunca echaron en saco roto los «servicios» prestados dentro y fuera del Régimen: Habría una recompensa: La dirección de una de las todopoderosas agencias de prensa del mundo y un puesto de primera categoría en la Trílateral, el triángulo «esotérico» cuyos vértices se sitúan en Europa del Norte, Estados Unidos y Japón; una élite económica y política con un poder mundial estremecedor. El nombre de Ansón, suena en el 23-F, pero es «enterrado» con un desmentido fulminante.
«Rabia, vergüenza y deshonor» le produjo a Dusmet, capitán de la División Acorazada, el abandono del Sáhara, según manifestó su defensor, el coronel de Meer.
Esa rabia fue promovida por una amplia operación política en la que se encuentran destacados civiles y también militares.
Volviendo a aquel verano «sintomático», la «sugerencia» de Luis María Ansón surte efecto: El consejo de Ministros del 24 de julio nombra a Adolfo Suárez (el príncipe tiene mucho que ver en este nombramiento) delegado del gobierno en la Telefónica, donde empezaría a practicar las «escuchas» que se harían famosas en los años de «transición» y en el «juicio» del 23-F; es también la época donde no deja .crecer la hierba en el camino de la Zarzuela: El futuro ha comenzado, una vez desaparecido el obstáculo... En diciembre se consuma una de las dos operaciones militares que prepararían el terreno para ulteriores sorpresas: Un general, paisano del otro «cerebro gris» de la transición, Fernández Miranda, ocupa la subsecretaría de la Presidencia, donde pueden controlarse grandes secretos; este general, Sabino Fernández Campo, otro «cerebro» en un momento clave de la transición, sustituiría a otro general en la devoción y proximidad regia, un monárquico «de toda la vida» que se haría famoso en un juicio histórico: Armada. Los peones van colocándose por los «meneurs de jeu» en una partida trágica en la que España es la gran perdedora. La otra gran jugada que quedará para más adelante es la de «colocar» al «Guti» en «su puesto» en el edificio de «semillas selectas»... Cuando Suárez sea ya presidente, hasta llegar a ser «inseparables» hasta en el ocaso... Todas estas piezas del «juego» van a tener un protagonismo singular en cada uno de los momentos clave: Cuando el señor Gutiérrez «sugiere» dividir el ministerio de Defensa en dos departamentos, abre un portillo por donde se colaría andando el tiempo un Oliart, familia de los Ansón, un banquero con mentalidad «ad hoc» para planificar un Ministerio tan vital como si fuera una entidad bancaria; un ministro adecuado a un ejército, que se quiere «profesionalizado», aséptico y «robotizado» en el que no puedan caber «motivaciones» de patriotismo, «obediencia debida» o «estado de necesidad» a la hora de elegir entre la defensa de España o la defensa de la norma constitucional; y que pueda decidir con omnipotencia hasta para «hospitalizar» e «incomunicar» a quien puede «estorbar» los «planes»: Dicen que el «paciente» obligado aún continúa preguntándose por qué tantos «cuidados» para una antigua úlcera; «pero qué hago yo aquí que no estoy donde debiera estar»... Parecen totalmente métodos «sovietizados».
Aparecen los Cassinello. En todos los momentos clave de la «transición» sobresale un personaje que circula por los estratos subterráneos pegado a pespunte al tejemaneje de Adolfo Suárez: Andrés Casinello, de los «servicios secretos» de Presidencia, ya desaparecidos, para ser sustituidos por el «complejo de semillas», metido también en el CESID del señor Gutiérrez... Curiosamente éste es el enviado a parlamentar con un Tarradellas, todavía en el exilio, que, sorprendentemente seria el primero que en la España de las nacionalidades hablaría desde su confortable «ostracismo», con voz «autorizada», de la conveniencia de dar «un golpe de timón»... Este Casinello, hermano de otro Casinello de la sección logística de Paracaidismo, (entonces ambos comandantes) estuvo también detrás de todo el montaje para el reconocimiento del PCE; detrás también del «seguimiento» de la «operación Galaxia». Extrañamente desaparece su «pista» en el montaje del «contragolpe» y aparece Cortina... con un extraño pasado en el que se mezclan actividades de «instructor» de grupos castristas (ya teniente de Infantería), usando nombre supuesto de «Restarazu», colaborador con su hermano Antonio, de un personaje no menos extraño, Fernando Cadarso Preciado, uno de los testigos que luego no compareció en el 23- F, Y Esteban Sierra Muñiz relacionado con la organización Tercera República, que, curiosa coincidencia, estuvo implicada en el atentado contra Cubillo, el cabecilla del MPAIAC, del que se confiesa responsable un murciano, Espinosa Pardo, uña y carne de otro murciano, el presidente del Consejo Regional, de no menos turbio pasado... y que comió con Armada en diciembre de 1980 por motivo de una finca de su mujer, (la de Armada) sita en Algezares... Los hermanos Cortina tienen relación a su vez con GODSA y ASEPROSA, empresas conecta- das con Alianza Popular de Fraga, el Fraga-Frégoli de las misteriosas ausencias oportunas en fechas clave, el Fraga que sólo protesta a las nueve de la mañana del 24 de febrero, porque -tal vez- lo que se «esperaba» no ha lugar... Son demasiadas coincidencias alucinantes...
El CESID está detrás «de lo de Carrero», en «lo de la Galaxia» y en «el 23-F». Resulta demasiado sospechoso, y más parece un instrumento al servicio de los enemigos de España que de los intereses de España. Sólo con su «mediación» se explica el fracaso del 23-F, el éxito, por contrapartida, de la intervención de Tejero para parar el verdadero «golpe»... Yo me pregunto todavía ¿qué papel jugaba Casinello? ...
¿Puede resultar raro que con todos estos elementos dispares y contrapuestos, mezclados, se pueda preguntar Ángel López Montero, defensor de Tejero, con la historia en la mano, que quién es capaz de tirar la primera piedra. ¿Puede sorprender que el codefensor del teniente coronel Más, ese magnífico y leal prototipo del ayudante de campo, afirme «que la defensa de la soberanía de la Patria exige que los Ejércitos estén dispuestos a defenderla, INCLUSO DE LOS REPRESENTANTES DEMOCRATICOS»?..
Es evidente que Tejero, y en cadena, a excepción de tres, todos los principales protagonistas del 23-F que se sientan en el banquillo fueron utilizados. ¿Por qué y por quién? Es una incógnita que tiene vocación de cometa... FUE URDIDA UNA GRAN TRAMPA... A mí no se me olvida que Manchado me dijo en Alcalá que detrás de todo, moviendo los hilos, estaba la Masonería...
«SOBRAN LOS QUE ESTÁN y FALTAN LOS QUE SON»...
No se ha explicado bien, a estas alturas, el papel que han jugado los hermanos Casinello. El CESID, a través de sus actividades, más parece, en algunos momentos, un instrumento al servicio de los enemigos de España que de los intereses de nuestra nación.Feroz campaña de prensa contra los abogados defensores de la mayoría de los encausados, en especial a cargo de «Diario 16».
Asusta pensar que todas las voces que intentan descubrir la verdad van a quedar ahogadas por riadas de palabras tergiversadoras de los hechos; que este sumario, como un guadiana jurídico brota caudaloso en miles de folios pero quedan ocultas discurriendo por corrientes subterráneas, las auténticas fuentes cristalinas de esa verdad que, desesperadamente, tratan de sacar a la luz la mayoría de los defensores de los encausados en el 23-F. Difícil, arriesgada y vana tarea la de estos hombres, lumbreras del foro en su mayoría, sorprendentes revelaciones de jóvenes andaduras por estos vericuetos de la Justicia, en otros casos, pero todos luchando contra la zancadilla, la presión, la amenaza velada o expresa de la clase política empeñada en que «el juicio» machaque de tal forma a las Fuerzas Armadas, que arranque de raíz para el futuro cualquier nueva tentación «reconductora»... Y encima, teniendo que aguantar las continuas llamadas al orden del Tribunal que interfiere con harta frecuencia en la legitima y noble tarea de la Defensa.
Sorprende a este respecto que don Antonio Pedro Rius, ilustre trilateralista y Decano del Colegio de Abogados de Madrid, que se muestra tan circunspecto en cuanto al sumario del 23-F dando a entender que si no hubiera premisas democráticas la vista no discurriría por unos cauces tan amplios de libertad de expresión -siendo notoria la constante interferencia del presidente del Tribunal cuando se le «desmandan» los defensores en el ejercicio legal e su función-, dijo en una intervención en RTVE en un programa de Iñigo, a tenor de su aceptación como defensor del drogadicto que robó en su casa solariega de Reus, que , «la defensa debe exponer, para matizar las motivaciones de una acción contra la Ley, las circunstancias concurrentes y circundantes que han llevado al acusado a cometer tal acción», Al parecer lo que sirve para un enfermo inducido por la droga a una vida de delito, lo que sirvió para alzar en un pedestal de héroe popular a un vulgar «quinqui» tristemente famoso, elevado a conferenciante ilustre, LA CIRCUNSTANCIA, no sirve, o tratan de que no sirva de argumento legítimo a unos hombres patriotas que intentaron, en virtud de unas circunstancias adversas para la Patria, tratar de «reconducirla», en razón de lo que creían deseo regio, por caminos más estables y acordes con su tradición y con su historia más excelsa.
Por ello resulta todavía más admirable el valor de estos hombres de la Defensa que pese a tantos obstáculos no se arredran en el cumplimiento de su misión, incansables paladines de la verdad. Igual cabria decir de esa nueva figura (que no gusta al señor Pedro Rius y en cambio quizá aceptaría al Jurado) del codefensor, de tan brillantes y gallardas actuaciones en este juicio. Entiendo que pese a las dificultades que entraña su tarea, es hermoso y pienso que debe resultarles en cierto modo fácil defender a unos hombres que tienen por divisa el honor y el amor a España entre otras muchas y altísimas 'virtudes. Las defensas de Abad, Muñcas, Álvarez Arenas, Carricondo y Dusmet, tres oficiales de la Guardia Civil y dos de la Acorazada: En los unos la «obediencia debida», por sobre cualesquiera otro interés personal, como es el caso del capitán Abad que tenía ya el pasaporte para un curso en el extranjero: su concurso era necesario y no lo pensó dos veces cuando se lo pide Tejero. Luego, es el que tras largas horas de angustiosa espera comunica a Tejero que «por fin la autoridad militar ha llegado». a la vista de Armada. Los otros dos oficiales de la Acorazada, que se apuntan generosos al gesto noble de su jefe inmediato, Pardo Zancada, «un hombre de una pieza» que siente rabia y vergüenza del abandono o la traición a la Guardia Civil que manda Tejero en el Congreso. Actitudes, gestos, que pasarán con sus protagonistas a la historia del 23-F. Y estos hombres que les defienden que, como Solón, porten sabiduría, poesía y belleza literaria suavizando la fría letra de la Ley. No dejo de comprender por otra parte el difícil papel de unas defensas cuyos patrocinados han tenido en el 23-F un oscuro cometido, que, además, para mayor desdoro, niegan tozudamente. Así, por muchas filigranas y filtirés jurídicos que se empeñe en hacer el defensor de Gómez Iglesias, no tiene otra salida que recurrir «a la falta de pruebas», a falta de otros argumentos. No vale negar simplemente ante testimonios abrumadores. Si Tejero no habló de Gómez Iglesias en las primeras declaraciones, es porque éste no fue arrestado hasta mucho después que Tejero, y Tejero no es capaz de traicionar a un amigo. Cuando lo siente unido en su suerte ad- versa, espera todavía a que hable de «motu propio». Gómez Iglesias, el amigo, niega toda conexión con Tejero. Ante la traición, Tejero habla sin miramientos ya: Y dice la verdad. Caiga quien caiga
Es oportuna y necesaria la advertencia que en su magnífica defensa de Abad hace el general Aguado cuando apela al Tribunal para que no olvide el fallo de Dios y de la Historia; sobre todo, cuando advierte a los señores consejeros que los enemigos de España «quieren que seáis los miembros de esa orquesta ya tramada y cumpláis una misión amañada y al antojo de esa política democrática, que traducida en términos tácticos significa, en fin, haceros responsables de la condena de unos honorables militares creando la división del Ejército». Pero lo que más me ha impresionado, porque refleja exactamente la verdad, es su frase última al pedir la absolución: «convencido de que en esas sillas que frente al Tribunal ocupan los procesados sobran los que están y faltan los que son»...
Tejero guardó el «secreto» de Gómez Iglesias celosamente, y sólo cuando vio clara la traición rompió el silencio cayese quien cayese. De antología también es la de defensa Segura Fern, sobrino del cardenal, apelando a la justicia divina del Señor de los Ejércitos. Le recuerdo cuando me lo presentaron aquel día que conseguí una entrada de dos horas en la Sala de Campamento, con sus cabellos blancos, su fuerte anatomía, sus cejas pobladas, la mirada enérgica y la voz tronante y la toga que le hacía majestuoso... Su alusión a la JUJEM... y llama a Camicondo, el teniente bisoño, «convidado de piedra»; más eran convidados de hambre, allá arriba, en el patio de prensa, y un vaso de leche, en 18 horas.
Me quedé sin conocer a De Meer, a quien unos amigos comunes querían presentarme. Sé que tiene larga estatura y largo y ancho el corazón. Desde la cobardía ambiente, desde el agallinamiento general, yo me descubro ante este coronel con nombre extranjero y españolísima gallardía: Ahí va su andanada contra los que quieren envolver en papel de plata tanta debilidad, tanta hipocresía, tanta milicia cuadriculada con mentalidad de contable al detalle, mientras las fuerzas del frente popular avanzan sin apenas una voz ni una actitud de rechazo. Es ese «estado de necesidad» urgente, dice De Meer el sentido trascendente de la Patria amenazada, el que movilizó voluntades; y el de vergüenza y rabia el que movió a Dusmet (tuve el privilegió de escuchar la repetición de su juramento, aquel día memorable para mí, en que conseguí una invitación para el palco de la Historia) el 23 F, fracasada la «operación Tejero, a seguir a Pardo Zancada, en su gesto solidario con la Guardia Civil».
No sé si escapará indemne De Meer después de esta «conferencia política», según la definición del presidente del Tribunal, en la que no deja títere con cabeza. De Meer arremete sin miedo contra las vaguedades de una Constitución tan «sabiamente» elaborada que sin quitarle una tilde puede parecerse como una gota de agua a otra, el artículo 2, al artículo 70 de la Constitución vigente en la URSS... «Hay artículos de la constitución que son un verdadero ejemplo de nacionalismo disgregador»; o aquello: «el que asegura que la disciplina es la mayor virtud del Ejército nacional se equivoca, porque existen valores superiores, como su predisposición a defender a la Patria. La disciplina puede ser la mayor virtud en un Ejército mercenario, o en una guardia pretoriana, pero no en un Ejército nacional»... O «El Ejército debe depender del Rey o el Jefe del Estado»... Siento muchísimo no tener a mano el texto íntegro de esta intervención, que merecería un comentario mucho más extenso, porque se circunscribe a los deberes estrictos de un militar, ante la Patria en peligro, desde la óptica de un militar «en activo», de hoy, de ya mismo. No de un «nostálgico». Y además sin «tergiversaciones» interesadas, sin «interpretaciones» democráticas... Se ha atrevido a decir mucho De Meer, y no se lo van a perdonar. y así como ha dicho que Dusmet «sólo es valor y futuro», de De Meer se puede admirar su valor; pero yo apostaría muy poco por su futuro militar... a pesar de ser número uno de promoción y de muchas otras cosas, después de su hermosa y arriesgada defensa. Habida consideración de que vivimos en la peor de las tiranías: La que sólo permite, sin castigar el ultraje, a un genocida, en desahogo electoral, gloriarse de «quién nos iba a decir hace cinco años que iban a estar en el banquillo de los acusados los que están hoy». Efectivamente, como ha dicho muy bien el general Aguado: «sobran los que están y faltan los que son...»
http://www.generalisimofranco.com/23f/10.htm
25302 | Legión de Vanguardia - 04/12/2013 @ 22:39:17 (GMT+1)
Por la Unión en defensa de la soberanía, independencia, propiedad, libertad, de España, la Nación, Patria.
(Discurso pronunciado en el Parlamento el 4 de enero de 1934)
El señor Primo de Rivera:
Este diputado, que no pertenece a ninguna minoría, se cree, por lo mismo, con voz más libre para recabar para sí, y se atrevería a pensar que para todos, esta fiducia: la de cuando nosotros empleamos el nombre de España, y conste que yo no me he unido a ningún grito, hay algo dentro de nosotros que se mueve muy por encima del deseo de agraviar a un régimen y muy por encima del deseo de agraviar a una tierra tan noble, tan grande, tan ilustre y tan querida como la tierra de Cataluña. Yo quisiera que el señor presidente y quisiera que la Cámara separase, si es que admite que alguien faltó a eso, a los que, cuando pasamos por esa coyuntura, pensamos como siempre, sin reservas mentales, en España y nada más que en España; porque España es más que una forma constitucional; porque España es más que una circunstancia histórica; porque España no puede ser nunca nada que se oponga al conjunto de sus tierras y cada una de esas tierras.
Yo me alegro, en medio de todo ese desorden, de que se haya planteado de soslayo el problema de Cataluña, para que no pase de hoy el afirmar que si alguien está de acuerdo conmigo, en la Cámara o fuera de la Cámara, ha de sentir que Cataluña, la tierra de Cataluña, tiene que ser tratada desde ahora y para siempre con un amor, con una consideración, con un entendimiento que no recibió en todas las discusiones. Porque cuando en esta misma Cámara y cuando fuera de esta Cámara se planteó en diversas ocasiones el problema de la unidad de España, se mezcló con la noble defensa de la unidad de España una serie de pequeños agravios a Cataluña, una serie de exasperaciones en lo menor, que no eran otra cosa que un separatismo fomentado desde este lado del Ebro.
Nosotros amamos a Cataluña por española, y porque amamos a Cataluña la queremos más española cada vez, como al país vasco, como a las demás regiones. Simplemente por eso porque nosotros entendemos que una nación no es meramente el atractivo de la tierra donde nacimos, no es esa emoción directa y sentimental que sentimos todos en la proximidad de nuestro terruño, sino, que una nación es una unidad en lo universal, es el grado a que se remonta un pueblo cuando cumple un destino universal en la Historia. Por eso, porque España cumplió sus destinos universales cuando estuvieron juntos todos sus pueblos, porque España fue nación hacia fuera, que es como se es de veras nación, cuando los almirantes vascos recorrían los mares del mundo en las naves de Castilla, cuando los catalanes admirables conquistaban el Mediterráneo unidos en naves de Aragón, porque nosotros entendemos eso así, queremos que todos los pueblos de España sientan, no ya el patriotismo elemental con que nos tira la tierra, sino el patriotismo' de la misión, el patriotismo de lo trascendental, el patriotismo de la gran España.
Yo aseguro al señor presidente, yo aseguro a la Cámara, que creo que todos pensamos sólo en esa España grande cuando la vitoreamos o cuando la echamos de menos en algunas conmemoraciones. Si alguien hubiese gritado muera Cataluña, no sólo hubiera cometido una tremenda incorrección, sino que hubiera cometido un crimen contra España, y no sería digno de sentarse nunca entre españoles. Todos los que sienten a España dicen viva Cataluña y vivan todas las tierras hermanas en esta admirable misión, indestructible y gloriosa, que nos legaron varios siglos de esfuerzo con el nombre de España. (Aplausos.)
25299 | Legión de Vanguardia - 04/12/2013 @ 21:04:31 (GMT+1)
La OTAN y la red terrorista Gladio
En agosto de 1990 Giulio Andreotti, el primer ministro italiano, confirmó que durante el período de la Guerra Fría había existido en Italia y otros países occidentales, algunos de ellos adheridos a la OTAN, un ejército clandestino bajo el nombre en clave de Gladio. Sus revelaciones condujeron a un gran escándalo político, no sólo por admitirlo, sino porque él mismo lo había negado en 1974, cuando era ministro de Defensa.
Fruto de aquellas investigaciones llevadas a cabo en Italia entre 1974 y 1990 salieron a la luz las siguientes informaciones relacionadas con las actividades de la siniestra Gladio, que unas veces se presentaba como organización terrorista de extrema derecha, y otras veces de extrema izquierda, según conviniese a sus propósitos. Y ¿cuáles eran estos propósitos? Desestabilizar a determinados gobiernos europeos en beneficio de Estados Unidos que así aumentaba su influencia política en los mismos. La red Gladio jamás actuó en Gran Bretaña.
Algunas acciones terroristas ejecutadas por la Gladio:
1960 - Turquía: Los militares, apoyados por la Gladio y la CIA, todavía dirigida por Allen Dulles, organizan un golpe de Estado y asesinan al primer ministro Adnan Menderes.
1964 - Italia: Los ministros socialistas abandonan sus puestos en el Gobierno después de haber recibido sendas amenazas de muerte por parte de la Gladio. La maniobra de acoso se conoció como Operación Solo.
1967 - Grecia: La organización Gladio en ese país, actuando bajo las siglas de Fuerza de Incursión Helénica (Hellenic Raiding Force) protagoniza un golpe de Estado, estableciendo una dictadura militar.
1968 - España: Aparece la organización terrorista ETA y comete sus primeros asesinatos. En 1970 se celebró el juicio sumarísimo que ha pasado a la historia como el Proceso de Burgos. Los hechos juzgados se remontaban al año 1968. El 2 de agosto de aquel año era asesinado el policía Melitón Manzanas, jefe de la Brigada de Investigación de lo Social de la comisaría de San Sebastián y que fue la primera víctima de ETA.
El 7 de junio era asesinado José Pardines Azcay, agente de la Guardia Civil, durante un control de carretera. Estos fueron los primeros asesinatos de la red terrorista y se decidió juzgar a través de un tribunal militar a dieciséis de sus militantes.
1969 - Italia: Estalla una bomba en un banco en la plaza Fontana, en Milán, matando a 16 personas e hiriendo a 80. En 1999 el antiguo jefe del servicio de inteligencia italiano, el general Maletti, sostuvo que el atentado fue ideado por la Gladio y supuestos terroristas de extrema derecha, apoyados por miembros de las Fuerzas de Seguridad italianas que les habrían prestado cobertura.
1973 - España: Asesinato del almirante Carrero Blanco, jefe del Gobierno y previsible continuador del Régimen. El almirante, que se había negado a prestar apoyo logístico a los norteamericanos durante la reciente guerra árabe-israelí, era asesinado un día después de haberse entrevistado en Madrid con el secretario de Estado, Henry Kissinger.
1975 - España: Un comando de extrema derecha, vinculado a la red italiana de Gladio, ataca el despacho de un abogado laboralista en Madrid relacionado con el Partido Comunista, que todavía no había sido legalizado.
1976 - España: Mercenarios de la Gladio provocan un enfrentamiento entre diferentes grupos carlistas durante una manifestación en Montejurra en la que hubo varios muertos.
1977 - España: El 24 de enero Gladio perpetra la matanza en el número 55 de la calle de Atocha (Madrid). Fueron asesinados los abogados laboralistas Enrique Valdevira Ibáñez, Luis Javier Benavides Orgaz y Francisco Javier Sauquillo Pérez del Arco, el estudiante de derecho Serafín Holgado de Antonio y el administrativo Ángel Rodríguez Leal, y resultaron gravemente heridos Miguel Sarabia Gil, Alejandro Ruiz-Huerta Carbonell, Luis Ramos Pardo y Dolores González Ruiz, casada con Sauquillo. Estaba embarazada y perdió también al hijo que esperaba. La autoría de Gladio fue confirmada por un informe confidencial del Comité Ejecutivo para los Servicios de Información y Seguridad (CESIS), organismo dependiente de la presidencia del Consejo de Ministros de Italia.
1977 - Alemania: La Facción del Ejército Rojo (en alemán, Rote Armee Fraktion, o RAF), también conocida como la banda Baader-Meinhof (por el apellido de sus dos componentes más destacados), causó una gran agitación social en Alemania (especialmente en el otoño de ese año), lo que llevó a una crisis nacional sin precedentes desde la Segunda Guerra Mundial, y que se saldó con la muerte de 34 personas y 20 miembros del grupo terrorista debido a diversos atentados y enfrentamientos con las Fuerzas de Seguridad alemanas.
1978 - Italia: Asesinato del primer ministro Aldo Moro secuestrado por las Brigadas Rojas, una organización terrorista fundada en 1969 que se declaraba marxista-leninista. Moro fue secuestrado cuando iba de camino a una sesión del Congreso en la que se iba a votar una moción de confianza al nuevo Gobierno encabezado por Giulio Andreotti, con el apoyo del Partido Comunista italiano. Era la primera vez que se ponía en práctica el llamado Compromesso Storico por el que los comunistas italianos entraban a formar parte del gobierno de concentración para superar la grave crisis que sufría entonces Italia. Moro siempre había abogado por el entendimiento entre comunistas y cristianodemócratas.
1980 - Italia y Alemania: Estallan bombas en la estación ferroviaria de Bolonia y durante la celebración de la Oktoberfest de Múnich, matando un total de 98 personas e hiriendo a más de 400. En ambos casos se encontraron evidencias de la participación de la Gladio y de los servicios secretos norteamericanos.
1981 - España: envenenamiento masivo por consumo de aceite de colza desnaturalizado (Síndrome del Aceite de Colza) y supuesta intentona golpista del 23 de Febrero. Diversas acciones, planificadas y ejecutadas por la CIA, y relacionadas con el ingreso de España en la OTAN, forzaron la dimisión del entonces presidente del Gobierno, Adolfo Suárez, y allanaron el camino para la victoria del PSOE en las elecciones generales de 1982.
1983-1985 - Bélgica: Se produce una serie de acciones tan violentas como absurdas. Grupos de hombres armados dispararon indiscriminadamente matando a civiles en varios restaurants y supermercados en el distrito de Brabante. Hasta 28 personas perdieron la vida y muchas resultaron gravemente heridas. Las inconclusas investigaciones sugirieron la participación en los atentados de miembros de las Fuerzas Armadas belgas y supuestos grupos de extrema derecha relacionados con los servicios secretos norteamericanos y británicos.
1990 - Suiza: Encuentran muerto al antiguo jefe del ejército secreto suizo P26, el coronel Alboth, apuñalado con su propia bayoneta, después de haber asegurado que estaba dispuesto a revelar "toda la verdad" sobre las actividades clandestinas de la red terrorista Gladio en Suiza.
A medida que las informaciones sobre la organización Gladio se fueron publicando, la historia se fue tornando cada vez más siniestra. Desde el inicio de la Guerra Fría, agencias independientes franquiciadas por los servicios secretos de Estados Unidos y Gran Bretaña establecieron una vasta red de asesinos a sueldo, grupos paramilitares, organizaciones terroristas y depósitos secretos de armas a través de toda Europa occidental.
Gladio permaneció muy activa hasta que estalló el escándalo Andreotti en Italia en 1990. Después de la desintegración de la Unión Soviética al año siguiente se produjeron cambios vertiginosos en todo el mundo, y la actividad de Gladio disminuyó hasta desaparecer, aparentemente.
El Mayo del 68 en Francia, una de las mayores acciones acometidas por la CIA en Europa, tenía como objetivo provocar la caída del presidente Charles De Gaulle por haber seguido adelante con su programa nuclear y negarse a que la OTAN mantuviese sus bases militares en Francia. El Partido Comunista francés, y todas las formaciones de izquierda de aquel país, llevan cuarenta años proclamando que no tuvieron nada que ver con la organización de la pantomima del Mayo Francés.
Los servicios secretos norteamericanos sembraron Europa de sangrientos atentados durante dos décadas con el propósito primordial de desestabilizar a varios gobiernos democráticamente elegidos y desembarazarse de los políticos incómodos y poco dispuestos a plegarse a los intereses de Estados Unidos.
Tras el escándalo Andreotti se extendió por toda Europa una gran indignación por las actividades clandestinas de la Gladio y el asunto se investigó en diversos países además de Italia. Sin embargo, cuando Sadam Hussein invadió Kuwait el 2 de agosto de 1990, el escándalo por las actividades ilegales de la Gladio fue desplazado de las portadas de los periódicos y convenientemente silenciado.
Veinte años después de la confirmación de su existencia por Giulio Andreotti, la Gladio y la red de ejércitos secretos de la OTAN, siguen generando una gran cantidad de preguntas que han quedado sin respuesta, pero la existencia de la Gladio ha sido confirmada por varios jefes de Estado, por tres investigaciones parlamentarias (en Italia, Bélgica y Suiza), y en especial por una extraña denegación y subsiguiente confirmación de su existencia por parte de la propia OTAN en 1990. Aún así, aparte de aquellos involucrados en la red, muy pocas personas saben con certeza cómo funcionaba la misma, o cómo se definían sus objetivos.
Existen suficientes evidencias y testimonios personales que sugieren vínculos con grupos terroristas de extrema derecha y de extrema izquierda activos en las décadas de los años setenta y ochenta, y que la Gladio misma fue responsable de la ejecución de la "estrategia de la tensión" mediante el uso premeditado del terrorismo para crear pánico e influir en los resultados electorales de distintos países. Como sucedió en España en octubre de 1982, cuando la gente fue a votar bajo el síndrome de que "había que afianzar la democracia" amenazada por los sectores reaccionarios y el Ejército, tras la supuesta intentona golpista del 23 de febrero de 1981. Un paripé con todos los visos de haber sido urdido por la CIA para afianzar al rey Juan Carlos I como de Jefe del Estado español, y desembarazarse de todos los elementos "incómodos" que aún quedaban en el seno de las FFAA, reacios al ingreso de España en la OTAN. De facto: una rendición que permite la presencia de fuerzas de ocupación extranjeras en suelo español camufladas como "aliados".
Si Gladio ha desaparecido definitivamente, o simplemente ha evolucionado hacia otro tipo de organización criminal, es algo que no sabemos con certeza. Pero varios indicios sugieren que la red terrorista paramilitar no ha sido desmantelada. Es más, los atentados del 11 de marzo de 2004 en Madrid indican claramente que la red terrorista sigue operativa, y que actúa de forma intermitente.
En mayo de 2002, durante la campaña para los comicios generales de Holanda, fue asesinado el carismático y, según todas las encuestas, gran favorito para la victoria final, el candidato de la derecha nacionalista, Pym Fortuyn. Entre otras cosas, Fortuyn defendía la salida inmediata de Holanda de la Unión Europea, así como el cierre de fronteras a la inmigración ilegal extracomunitaria. Un "ecologista de personalidad compulsiva" llamado Volkert van der Graaf le asesinó días antes de las elecciones y fue condenado a veinte años de cárcel.
Asimismo, el presidente polaco Lech Kaczynski fallecía en un accidente aéreo a principios de abril de 2010 cuando su avión se estrelló cerca del aeropuerto de Smolensk en Rusia. A bordo viajaban 87 personas y no hubo supervivientes. Lech Kaczynski se había distinguido por ser uno de los líderes políticos más reacios a hacer nuevas cesiones de soberanía nacional a la Unión Europea. Kaczynski y era, por decirlo suavemente, un personaje "incómodo" en el seno de la UE.
Jörg Haider, gobernador del estado federado de Carintia (gobernado por Haider desde 1999 ininterrumpidamente) y jefe de la Alianza para el Futuro de Austria, defendía un programa político muy parecido al del holandés Pym Fortuyn.
Haider murió en octubre de 2008 en un grave accidente automovilístico al sur de la ciudad de Klagenfurt. Iba solo al volante de su vehículo cuando se salió de la carretera, en un adelantamiento, y se estrelló contra un pilar de hormigón. Haider había sido una figura determinante en el panorama político austriaco de los últimos 20 años. Su repentina muerte conmocionó a Austria en un momento de especial incertidumbre, dos semanas después de las elecciones legislativas que se saldaron con un nuevo triunfo de los nacionalistas.
Dado que en el seno de la UE no agradó lo que el electorado austriaco había decidido libremente en las urnas, Bruselas impuso a Austria una batería de sanciones diplomáticas e Israel retiró a su embajador. Cediendo a las presiones internacionales, Haider dejó a sus colaboradores a cargo del gobierno y se retiró a la región de Carintia para evitarle al país males mayores. El aviso fue demasiado claro y rotundo para ignorarlo.
Para muchos investigadores, periodistas y escritores, estas recientes muertes de políticos poco proclives al proyecto soberanista de la Unión Europea, demuestran que una red terrorista sigue actuando de forma contundente para influir en la política interna de los países miembros de la Unión, y todo obedece a un plan bien trazado: poner en marcha una "segunda estrategia de la tensión" para acelerar el proceso de consolidación de la Unión Europea como una realidad política supranacional. De ahí que, cuantos ponen en duda la conveniencia de dicho proyecto desaparezcan inmediatamente de la escena pública, o sean ejecutados sin contemplaciones.
Sobre la organización terrorista Gladio muchas preguntas han quedado sin responder porque, aun en el caso de las investigaciones parlamentarias, más pronto o más tarde aparece el insalvable obstáculo del secreto de Estado. Un representante de la OTAN comentó lo siguiente a un periodista de la agencia de noticias Reuters el 15 de noviembre de 1990, poco después del escándalo destapado por Andreotti: "No esperará usted que se respondan muchas preguntas, aunque la Guerra Fría haya terminado. Suponiendo que hayan existido vínculos [de la OTAN] con organizaciones terroristas, se habrá enterrado ese tipo de información bien profundamente".
Investigaciones llevadas a cabo en Bélgica durante la década de los noventa descubrieron valiosos detalles sobre la estructura de la red Gladio.
En ese país, como en otros que formaban parte de la OTAN, el primer paso fue dado con la fundación de un comité tripartito entre el país anfitrión, el Reino Unido y EEUU. Más tarde, en 1948, se creó un organismo general para coordinar a varios países de Europa occidental, conocido como Comité Clandestino de la Unión Occidental [Western Union Clandestine Committee]. El WUCC fue, en 1951, subordinado a la OTAN, y pasó a llamarse Comité de Planeamiento Clandestino [Clandestine Planning Committee]. Se fundó además un segundo organismo: el Comité Clandestino Aliado [Allied Clandestine Committee]. Después de que Francia abandonara la OTAN, los cuarteles generales de estos comités fueron trasladados a Bruselas. En todos los casos estas redes se organizaron de forma clandestina.
Los ejércitos secretos funcionaban como parte de la defensa colegiada occidental frente a la Unión Soviética durante la Guerra Fría. Pero la progresiva captación por parte de la Gladio de elementos de la extrema izquierda hizo que algunos se preguntasen si la auténtica función de la organización era organizar la resistencia de la defensa occidental en caso de invasión soviética o, por el contrario, crear el caos en los países aliados.
Gladio fue una red de terrorismo internacional organizada por los servicios secretos de Estados Unidos y Gran Bretaña bajo el paraguas de la OTAN. Charles De Gaulle lo comprendió inmediatamente y sacó a Francia de aquel embrollo, aunque le costó lo suyo y a punto estuvo de ser asesinado en varias ocasiones por la OAS, otra de las ramificaciones de la Gladio.
Para desestabilizar al Gobierno de España, la Gladio puso en marcha el terrorismo de extrema izquierda más brutal y sanguinario: ETA, GRAPO, FRAP... todas estas organizaciones terroristas empezaron a funcionar en esa época, hacia 1968, coincidiendo con el Mayo Francés, que fue la maniobra empleada por la CIA en Francia para acabar con Charles De Gaulle.
El supuesto riesgo (muy remoto) de una invasión soviética fue la excusa para que norteamericanos y británicos ocupasen buena parte de Europa occidental. Uno de los diseñadores de la Gladio fue Richard Helms, jefe de la CIA entre 1966-1973 y estrecho colaborador del presidente Richard Nixon. Las tácticas de terrorismo utilizadas por la CIA no han cambiado mucho desde entonces, y las estaciones de tren siguen siendo uno de sus escenarios preferidos, aunque ahora se atribuyan los atentados al terrorismo islamista en lugar de a la extrema izquierda.
En Italia, por ejemplo, el terrible atentado de la estación de Bolonia de 1980, muy parecido a los de Madrid del 11 de marzo de 2004, sigue aún vivo en la memoria de los italianos. Aquel feroz ataque terrorista se cobró 85 víctimas. Investigaciones realizadas para esclarecer la autoría del atentado se vieron obstaculizadas constantemente por el servicio secreto y un sector de la policía y del estamento judicial italianos.
Ese mismo año 1980, una bomba explotó en la Oktoberfest de Múnich, matando a 13 personas. En un primer momento las investigaciones policiales culparon a un supuesto activista de la extrema derecha de 21 años llamado Gundholf Köhler, que oportunamente falleció en el atentado. Según la policía alemana pertenecía al grupo Wehrsportgruppe Hoffmann. Los propios expertos de la policía reconocieron poco después que la bomba era demasiado compleja para haber sido fabricada por una persona de 21 años, sin experiencia previa en la fabricación de artefactos explosivos. En 1981, un año más tarde, la policía descubrió un enorme escondite de armas cerca del pueblo de Uelzen. La explicación oficial fue que los terroristas habían ocultado las armas, las cuales estaban controladas por un tal Heinz Lembke, pero la cantidad y el tipo de armamento que se encontró puso muchos signos de interrogación sobre tan oportuna explicación. Armas automáticas, equipos de guerra química y bacteriológica, 50 cañones anticarro, 156 kg de explosivos, 230 artefactos explosivos y 258 granadas de mano. ¡Demasiado sofisticado!
Varios periodistas de investigación relacionaron a Heinz Lembke con el ejército clandestino alemán BND. Posteriormente, las investigaciones oficiales desmintieron cualquier vínculo entre Lembke y la masacre de Múnich. A Heinz Lembke se le encontró muerto, ahorcado con una soga que jamás se aclaró de dónde había salido y cómo llegó hasta él mientras se encontraba bajo custodia policial en 1981.
En el caso de la masacre de la estación de Bolonia está probado que miembros de los servicios secretos italianos suministraron falsa información y colocaron una falsa bolsa con explosivos en un tren, lo que nos lleva a deducir que tuvo que existir una relación entre los que colocaron las bombas y los que les encubrieron. Las analogías entre la masacre de Bolonia en 1980 y la de Madrid en 2004 son innegables.
Este terrorismo teledirigido que se desarrolló con especial virulencia en el decenio 1975-1985, no afectó solamente a Italia y Alemania. En Bélgica, una extraña operación se llevó a cabo en 1984 en las cercanías de Vielsalm, municipio de Valonia. Un pelotón de marines estadounidenses saltaron en paracaídas sobre Bélgica y a su encuentro salió un miembro del servicio de la inteligencia militar belga. Se ocultaron durante dos semanas antes de atacar la comisaría de Vielsalm, como parte de un ejercicio que llamaron Operación Oesling durante el cual mataron a un agente de la policía belga. Un militar estadounidense resultó herido durante la operación, perdiendo un ojo. En un principio se creyó que el ataque había sido un acto de terrorismo, pero más tarde se probó que había sido una operación militar secreta conjunta estadounidense-belga, tal como lo confirmaron las investigaciones del Senado belga en 1991. Otros ataques sucedieron a éste en los cuales, tal como en el caso de Vielsalm, las armas y las municiones fueron confiscadas. Armas que llegaron subsiguientemente a manos de grupos extremistas. Una pregunta fundamental dentro de la investigación efectuada por el Senado belga sobre la red de ejércitos clandestinos fue si había tenido algo que ver con las famosas masacres de Brabante en la década de los ochenta. Éstos fueron una serie de ataques que se llevaron a cabo en los municipios del extrarradio de Bruselas durante unos dos años. Joyerías, restaurantes, bancos e incluso supermercados, se vieron atacados por bandas paramilitares compuestas por hombres despiadados y armados hasta los dientes. En todos los ataques realizados en aquella época en Bélgica, los delincuentes se llevaban pequeñas sumas de dinero, aunque actuaban como profesionales coordinados y empleaban una brutalidad inusitada. Un fenómeno que se está dando en España desde hace varios años, atribuyéndose esos robos a supuestas bandas paramilitares del este de Europa compuestas por antiguos miembros de las Fuerzas Armadas de esos países.
El 9 de noviembre de 1985, un grupo armado penetró en un supermercado y abrió fuego indiscriminadamente. Era sábado por la tarde y el centro comercial estaba abarrotado de gente. Ocho personas perdieron la vida, algunos mientras intentaban escapar. El dinero que se llevaron los atracadores ascendió a unas 2000 libras esterlinas, un mísero botín que fue encontrado en un canal metido en una bolsa de plástico sin abrir. La investigación encargada por el Senado belga y las autoridades judiciales determinó, más allá de cualquier duda, que el móvil de aquel ataque al supermercado no fue el dinero. Sin embargo, y debido a una especie de resistencia burocrática por parte de los servicios secretos y de la inteligencia militar belga, la investigación no logró establecer ninguna relación entre los asesinatos y la organización terrorista Gladio.
Lyndon LaRouche es un reconocido filántropo norteamericano que lidera varias organizaciones políticas en los Estados Unidos y otros países. Es el fundador y editor de la revista Executive Intelligence Review (Informe de Inteligencia Ejecutiva), una agencia independiente de noticias y análisis de información mundial, elemento principal del movimiento que LaRouche lidera. El día de los atentados en Madrid, el 11 de marzo de 2004, Lyndon LaRouche emitió un comunicado descartando la idea de que los ataques terroristas hubiesen sido realizados por el grupo terrorista vasco ETA o por terroristas musulmanes, y comentó que la atrocidad de Madrid le recordaba el ataque en 1980 a la estación de tren de Bolonia y, en general, a la "estrategia de la tensión" a través del terrorismo desarrollada por la Gladio en Italia a comienzos de los ochenta.
En los siguientes días, varios expertos entrevistados por EIR, como también comentaristas de periódicos independientes apuntaron en la misma dirección: los atentados de los trenes en Madrid, fueron planificados por servicios secretos occidentales, en necesaria connivencia con miembros de la policía y fuerzas de seguridad del Estado.
Entre 1969 y 1974, Italia fue sacudida por una serie de ataques terroristas mediante bombas. El comienzo de este período, que más tarde fue denominado la estrategia de la tensión, está oficialmente marcado por la bomba del 12 de diciembre de 1969 que explotó dentro de la Banca Nazionale dell'Agricoltura en la Plaza Fontana de Milán, conocida como la masacre de Piazza Fontana, en la cual 16 personas fueron asesinadas y 58 heridas. El final de la estrategia de la tensión, considerado estrictamente, está marcado por la bomba en el tren Italicus, el 4 de agosto de 1974, en San Benedetto Val di Sambro, que mató a 12 personas e hirió a 105. Durante este período hubo al menos cuatro intentos conocidos de golpe de Estado en Italia.
Pero la mayor masacre terrorista hasta entonces, tuvo lugar seis años después, el 2 de agosto de 1980 en Bolonia, cuando una maleta que contenía unos 20 kg de explosivos detonó en la estación de trenes, matando a 85 personas e hiriendo a más de 200. La responsabilidad fue oficialmente reivindicada por un grupo terrorista de extrema derecha llamado Nuclei Armati Rivoluzionari (NAR). Pero aquí hay una severa incongruencia, puesto que el término "revolución" o "revolucionario" no forman parte ni del lenguaje ni del ideario de la extrema derecha, ni en Italia ni en ningún otro país occidental. Es algo tan chocante como que una organización de extrema izquierda se proclamase "tradicionalista" o "nacionalista".
El atentado de Bolonia, por la época en que tuvo lugar, no pertenece estrictamente a la llamada estrategia de la tensión, no estaba relacionado con ningún plan para llevar a cabo un golpe de Estado o cambio brusco del Gobierno italiano de entonces. Sin embargo, las organizaciones terroristas involucradas eran comandos autónomos del período de la estrategia de la tensión que se habían reorganizado. Como en el atentado de la Piazza Fontana y otros casos, se produjo un encubrimiento sistemático de los autores de las masacres por parte de ciertos sectores dentro de las Fuerzas Armadas, la policía y los servicios secretos italianos.
Varias investigaciones judiciales y parlamentarias han establecido que existe una relación entre la matanza de Piazza Fontana, las bombas del tren Italicus y la masacre de 1980 en la estación de ferrocarril de Bolonia. Destacan la investigación oficial por los atentados de Bolonia, y la más reciente por los de la Piazza Fontana iniciada por el fiscal Guido Salvini en 1992 en Milán, y los resultados del Comité Parlamentario para la Identificación de los Autores de las Masacres Terroristas que trabajó en las investigaciones entre 1994 y 2001.
El juicio por el atentado en la estación de Bolonia en 1980 finalizó con la condena de Valerio Fioravanti y Francesca Mambro como autores materiales de las masacres, y del inquietante Licio Gelli, perteneciente a la logia masónica P2, implicada también en el asesinato del papa Juan Pablo I en 1978 y en varias muertes que siguieron al escándalo del Banco Ambrosiano en 1982 y que dejaron un sangriento rastro de cadáveres.
Piazza Fontana: el 11-M italiano
La técnica adoptada en la atrocidad de Madrid, la colocación de bombas simultáneas en trenes, no es nueva. La masacre de 1969 en Piazza Fontana fue precedida por una serie de acciones demostrativas que comenzaron en la noche del 8 al 9 de agosto, con diez bombas colocadas en diez trenes diferentes. Ocho de las cuales, de baja potencia, hicieron explosión. Esas bombas fueron colocadas por la organización neofascista llamada Ordine Nuovo, pero los investigadores fueron conducidos a la creencia de que fueron activistas de extrema izquierda [anarquistas] quienes lo hicieron. Hubo nuevas acciones demostrativas en los meses siguientes al atentado, hasta que el 12 de diciembre de ese mismo año, se produjo lo que podríamos calificar de salto cualitativo en la ejecución de aquellas acciones terroristas. Una serie de potentes bombas detonaron en la Piazza Fontana de Milán, pero también en Roma, donde tres artefactos hirieron a 13 personas. Por suerte, otra bomba colocada en el centro de Milán, en la Piazza Scala, no explotó.
Aquí nos encontraos con dos elementos que nos recuerdan claramente los atentados de Madrid: bombas y trenes. Se trata de que la acción terrorista sea brutal y que mate indiscriminadamente. En lugar de los actuales integristas islámicos, los supuestos terroristas de entonces eran activistas de extrema derecha o de extrema izquierda. Así, los auténticos autores de la masacre de Milán y sus encubridores guiaron a la policía y a los fiscales hacia la búsqueda de los asesinos en la extrema izquierda, eligiendo finalmente a los anarquistas como perpetradores del atentado de Piazza Fontana en agosto de 1969.
Dos conocidos anarquistas, Pietro Valpreda y Giuseppe Pinelli, fueron inmediatamente arrestados. Pinelli murió esa misma tarde al saltar desde una ventana de las dependencias policiales donde estaba siendo interrogado. La investigación oficial de su muerte concluyó que se trataba de un suicidio. Valpreda pasó varios años en prisión hasta que fueron retiradas todas las acusaciones y fue excarcelado. No obstante, varios testigos oculares, entre ellos un taxista, que aseguraron haber visto a unos individuos sospechosos poco antes de la explosión y haber declarado que podrían reconocerles, murieron en extrañas circunstancias nunca aclaradas.
Como en otros casos más recientes y cercanos, el encubrimiento de los auténticos autores de los asesinatos y actos de terrorismo fue orquestado desde el Ministerio del Interior, del que dependían la policía y una oficina llamada Ufficio Affari Riservati (UAR), una especie de agencia de Inteligencia interior, cuyo jefe era Federico Umberto d'Amato antiguo agente doble italiano que había iniciado su carrera durante la Segunda Guerra Mundial bajo las órdenes de James Angleton, a la sazón jefe de operaciones de la Office of Strategic Services (OSS) en Italia. En aquella época la OSS (futura CIA) estaba supervisada por la Inteligencia Militar norteamericana y el MI6 británico. Terminada la guerra, y gracias al determinante apoyo de James Angleton, D'Amato fue nombrado director ejecutivo de la Secretaría Especial de la OTAN, actuando como enlace entre esta organización y los servicios secretos de los Estados Unidos.
Guido Salvini, fiscal de Milán, había establecido que Delfo Zorzi, el terrorista inicialmente condenado, y después declarado inocente, por haber colocado la bomba de Piazza Fontana, había sido reclutado por D'Amato en 1968. Pero el fiscal Salvini descubrió mucho más. Un testigo, Carlo Diglio, decidió en 1992 colaborar en las investigaciones y reveló que había trabajado como infiltrado en el grupo de Zorzi para la inteligencia militar norteamericana encuadrada dentro de la comandancia de la OTAN en Verona. Los servicios secretos norteamericanos estaban al corriente del atentado que Diglio y los suyos preparaban para el 8 de agosto y el 12 de diciembre. El superior inmediato de Diglio, el capitán de la US Navy David Garrett, señaló más tarde que las órdenes eran que todas las acciones debían ser meras demostraciones de fuerza, sin que produjesen víctimas. Por su parte, Carlo Diglio admitió que Garrett estaba en permanente contacto con Pino Rauti en Roma, líder de la organización masónica Ordine Nuovo (ON), de la que Zorzi era uno de sus dirigentes en la región de Véneto.
Según las revelaciones de Diglio, el segundo participante en la acción de Piazza Fontana, Carlo Maria Maggi, era líder de la célula de ON en el Véneto y el tercero, Giancarlo Rognoni, era también miembro de la organización ON en Milán, y se encargó de facilitar apoyo logístico.
En 1971, dos miembros de Ordine Nuovo, Franco Freda y Giovanni Ventura, fueron arrestados en relación con la investigación de los atentados de Piazza Fontana, así como con otras acciones terroristas menores. Sin embargo, cuando los dos fiscales de Milán encargados de la investigación, Gerardo D'Ambrosio y Emilio Alessandrini estaban cerca de desenmascarar a la práctica totalidad de los componentes de la red terrorista y a su cúpula directiva, la titularidad de la investigación les fue arrebatada y trasladada a la ciudad de Catanzaro, en el sur de Italia, donde Freda y Ventura fueron exculpados y declarados inocentes en la vista.
La tenacidad del antiguo fiscal de Milán, Guido Salvini, que prosiguió con las investigaciones al margen de presiones políticas, obtuvo como resultado que varios testigos asegurasen que fue Franco Freda quien compró los temporizadores usados en las bombas, y que fue Giovanni Ventura quien los instaló en los artefactos explosivos. Pero ni Freda ni Ventura pueden volver a ser juzgados por un delito del que ya fueron absueltos.
En 1969 el objetivo del plan urdido por los servicios secretos norteamericanos consistía, básicamente, en desestabilizar Italia. Presentar a una derecha neofascista dispuesta a hacerse con el poder a toda costa, para que así los socialistas fuesen excluidos del Gobierno y los comunistas del influyente PCI diesen algún paso en falso que propiciase la intervención de la OTAN. Pero el primer ministro italiano, Mariano Rumor no mordió el anzuelo, bien aconsejado por el ministro de Exteriores de entonces, Aldo Moro, que se enfrentó al presidente de la República (jefe de Estado) Giuseppe Sagarat, para disuadirle de sus intenciones de declarar el Estado de Emergencia. Hubo una gran crisis de Gobierno, pero en apenas tres meses, gracias a la mediación de Aldo Moro en buena parte, el presidente de la República logró reunir otro gabinete y superar la crisis.
La actuación de Aldo Moro y su partido, la Democracia Cristiana, fue decisiva para superar la crisis. Pero no era la primera vez que Moro se enfrentaba a la amenaza de un golpe de Estado. En 1964, cuando él, como primer ministro, estaba negociando el primer gobierno con participación socialista, el presidente de la República, el cristianodemócrata Antonio Segni le hizo a saber que un importante sector del partido y de la oligarquía empresarial y financiera no veían con buenos ojos la inclusión de los socialistas en el Gobierno. Segni transmitió a Moro el mensaje que le había hecho llegar el coronel Renzo Rocca, jefe de la división económica del SIFAR, el servicio secreto militar italiano. Rocca (quien después de su período en el SIFAR fue recolocado en la fábrica de automóviles FIAT en Turín) informó a Segni que el establishment financiero y empresarial preveía una crisis económica catastrófica si los socialistas participaban en el Gobierno de coalición. El presidente de la República, Antonio Segni, fracasó en su intento de disuadir a Aldo Moro y en consecuencia tuvo que abandonar la presidencia el 6 de diciembre de 1964 tras sufrir un serio accidente cerebrovascular que le dejó hemipléjico.
La peor amenaza para que los especuladores puedan llevar a cabo sus planes de sometimiento de un país, como era el caso de Italia en aquella época, es que se cree un Gobierno de coalición, en el que, aparcando sus diferencias, participen las principales fuerzas políticas, con un propósito bien definido: sacar al país de una crisis, ya sea esta política, económica o social.
Como medida de presión, el presidente de la República italiana, Antonio Segni, manifestó su intención de retirarle el mandato de Gobierno al primer ministro Aldo Moro, y dárselo a un tecnócrata, Cesare Merzagora. Además, Segni recibió ayuda del vicepresidente de la comisión europea, el socialista Robert Marjolin, quién atacó públicamente el programa de gobierno de Moro en nombre de la Comunidad Económica Europea. Robert Marjolin se había reunido con Segni en París unos meses antes para diseñar la estrategia a seguir contra Moro.
Aldo Moro y sus aliados se tomaron las amenazas de Segni muy en serio, y así, el Gobierno de centro-izquierda, un proyecto que comenzó Moro en 1960 y que contaba con la ayuda de la administración Kennedy, ya nació como un caso perdido. Kennedy murió asesinado en Dallas en noviembre de 1963 y Aldo Moro fue secuestrado y asesinado por las Brigadas Rojas en mayo de 1978. Ahora bien: ¿qué motivo podían tener los supuestos guerrilleros comunistas de las Brigadas Rojas para asesinar al líder de la Democracia Cristiana que siempre había abogado por el entendimiento con el Partido Comunista y con los socialistas italianos?
Ninguno, salvo que dichos guerrilleros de extrema izquierda fuesen en realidad hombres de los servicios secretos italianos, agentes de la CIA o mercenarios de la Gladio.
25285 | kroker - 04/12/2013 @ 00:07:50 (GMT+1)
Y mientras tanto J. A. Primo de Rivera se revolvía en tumba de tanto asco...
Deberían de dejar ustedes los porros y dedicarse a otra cosa.
25284 | kroker - 04/12/2013 @ 00:07:44 (GMT+1)
Y mientras tanto J. A. Primo de Rivera se revolvía en tumba de tanto asco...
Deberían de dejar ustedes los porros y dedicarse a otra cosa.
25283 | Legión de Vanguardia - 03/12/2013 @ 22:52:01 (GMT+1)
COMPAÑÍAS DE OPERACIONES ESPECIALES:
COE 11 "JUAN PALAREA", Madrid.
COE 12 "ISIDRO MIR", Plasencia.
COE 21 "JULIÁN SÁNCHEZ", Tarifa.
COE 22 "MIGUEL DE QUERO", Huelva.
COE 31 "MILANS DEL BOSCH", Alicante.
COE 32 "EL CID", Paterna.
COE 41 "BARÓN DE EROLES", Barcelona.
COE 42 "GENERAL CABRERA", Tarragona.
COE 51 "ESPOZ Y MINA", Zaragoza.
COE 52 "PEDRO VILLACAMPA", Barbastro.
COE 61 "JERÓNIMO MERINO", Burgos.
COE 62 "MARIANO RENOVALES", Bilbao.
COE 71 "JUAN DIAZ PORLIER", Oviedo.
COE 72 "PELAYO", Gijón.
COE 81 "VIRIATO", Orense.
COE 82 "PABLO MORILLO", El Ferrol.
COE 91 "FERNÁNDEZ CAÑAS", Granada.
COE 92 "GENERAL CASTAÑOS", Ronda.
COE 101 "JOSÉ MANSO", Palma.
COE 102 "INDÍBIL", Tenerife.
COE 103 "MANDONIO", Las Palmas.
COE de la EMMOE, Jaca.
UOE de la Legión, Ronda.
25281 | Centinela de Occidente - 03/12/2013 @ 22:30:19 (GMT+1)
En 1937, el Generalísimo, en su discurso anunciando el Decreto de Unificación:
"Cuando hayamos dado fin a esta ingente tarea de reconstrucción espiritual y material, si las necesidades patrias y los sentimientos del país así lo aconsejan, no cerramos el horizonte a la posibilidad de instaurar en la Nación, el régimen secular que forjó su unidad y su grandeza histórica." Centinela de Occidente, Luis de Galinsoga, con la colaboración del Teniente General Franco Salgado.
25280 | Legión de Vanguardia - 03/12/2013 @ 21:45:53 (GMT+1)
Están leídas, en cuestiones varias, estoy de acuerdo.
25278 | kroker - 03/12/2013 @ 21:28:53 (GMT+1)
¿Pensamiento de Francisco Franco?. Pero,...¿Paca la culona tenía pensamientos?
25277 | kroker - 03/12/2013 @ 21:26:07 (GMT+1)
Efectivamente, la manipulación de las personas llegaba a esos extremos. Le recomiendo que se lea las "Estrategias de manipulación mediática", de N. Chomsky. Lo que describe se ajusta como un guante. Sigo pensando: golpista. Pero, si lo que pasaba en 1982, comparado con lo que pasa hoy es una broma (excepto lo de eta claro).
25276 | Centinela de Occidente - 03/12/2013 @ 21:20:15 (GMT+1)
Fundación Nacional Francisco Franco.
Fundadores (1977):
D. Agustín Aznar Gerner, D. Agustín Cotorruelo Sendagorta, D. Agustín de Asís Garrote, D. Agustín de Bárcena y Reus, D. Alejandro Fernández Sordo, D.Alejandro Rodríguez de Valcárcel, D. Alfonso Álvarez Miranda, D. Alfonso Díaz de Bustamante Quijano, D. Alfonso Pérez Viñeta y Lucio, D. Alfredo Galera Paniagua, D. Alfredo Sánchez Bella, D. Alfredo Serrano Pareja, D. Álvaro Domecq y Díez, D. Amaro Cimadevilla Álvarez, Dña. Ángeles Mellado Pérez de Meca, D.Antonio Barroso Sánchez Guerra, D. Antonio Cirerol Thomas, D.Antonio Gibello García, D. Antonio González Aller y Balseyro, D. Antonio Ibáñez Freire, D. Antonio José García Rodríguez-Acosta, D. Antonio María de Oriol y Urquijo, D. Antonio Martínez Cattaneo, D. Antonio Molina Jiménez, D.Antonio Oliva Sala, D. Antonio Vallejo Zaldo, D. Arsenio Fernández Soberón, D. Bartolomé March Servera, D. Bernardo Gil Mugarza, D. Blas Pérez González, D. Blas Tello Fernández-Caballero, D. Carlos Bonet Hernando, D.Carlos Cavero Beyard, D. Carlos de Meer de Ribera, D. Carlos Fernández Vallespín, D. Carlos Franco Iribarnegaray, D. Carlos García Riveras, D. Carlos Iniesta Cano, D. Carlos Martel Viniegra, D. Carlos Pinilla Turiño, D. Carlos Rein Segura, D. Carlos Robles Piquer, D. Carlos Rubio López-Guijarro, Dña. Carmen Franco Polo, Dña. Carmen López de Haro Caminero, Dña. Carmen Pichot Villa, Dña. Casilda Ampuero Gandarias, D. Cipriano Rodríguez Angulo, D.Constantino Lobo Montero, Dña. Consuelo Salgado Calderón, D. Cruz Martínez Esteruelas, D. David Cubedo Echevarría, D. Diego Cañamero Sánchez, D. Diego Salas Pombo, D. Dionisio Martín Sanz, D. Eduardo Comella de Torrents, D. Eduardo de Aznar y Coste, D. Eduardo González Gallarza Iragorri, D. Eduardo Peña Abizanda, D. Emilio de Miguel Moreno, D. Emilio Lamo de Espinosa y Enri, D.Emilio Ruiz Catarineu, D. Emilio Villaescusa Quiles, D. Enrique García Ramal Cellalbo, D. Enrique Thomas de Carranza, D. Enrique Urquiano de Miguel, D.Ernesto Andrés Vázquez, D. Eugenio Calderón Montero Ríos, D. Ezequiel Puig y Maestro-Amado, D. Faustino Ramos Díez, D. Felipe Solís Ruiz, D. Félix Álvarez Arenas y Pacheco, D. Félix Fernández Tejedor, D. Fernando Aguilar Galiana, D. Fernando Dancausa de Miguel, D. Fernando Fuertes de Villavicencio, D. Fernando Mateu de Ros, D. Fernando Ramírez Pálmer, D.Fernando Santiago y Díaz Mendívil, D. Fernando Suanzes de Viñas, D.Francisco Alemany Torres, D. Francisco Ángel Abella Martín, D. Francisco Castrillo Mazeres, D. Francisco Coloma Gallegos, D. Francisco Corell Ayora, D.Francisco Fernández Cigoña Núñez, D. Francisco Javier Lozano Bergua, D.Francisco Labadie Otermín, D. Francisco Muñoz Lusarreta y Pablo, D.Francisco Ruiz Jarabo y Baquero, D. Gonzalo Botija Cabo, D. Gonzalo Fernández de la Mora y Mon, D. Gregorio López Bravo, D. Hermogenes Mayoral Gonzalo, D. Íñigo de Oriol e Ybarra, D. Jaime Castell y Lastortras, D.Jaime de Argüelles y Armada, D. Jaime Miláns del Bosch y Ussía, D. Jaime Pascual Villanova, D. Jaime Togores Franco-Romero, D. Javier Carvajal Ferrer, D. Jesús Aramburu Olarán, D. Jesús Lample Opere, D. Jesús María Munarriz López de Guereño, D. Jesús Pérez Varela, D. Jesús Suevos Fernández, D.Joaquín de Juan Medrano, D. Joaquín Gias Jove, D. Joaquín Gutiérrez Cano, D. Jorge Vicente Jordana, D. José Angosto Gómez Castrillón, D. José Antonio Girón de Velasco, D. José Antonio Reol de Merina, D. José Casquero Medina, D. José Chicharro Lamamie de Clairac, D. José Cuesta Monereo, D. José Francisco Acedo Castilla, D. José García Hernández, D. José Guerra Campos, D. José Ignacio Escobar Kirkpatrick, D. José Lacalle Larraga, D. José Luis Moreno Balleteros, D. José Luis Sáenz de Heredia y Osio, D. José Luis Zamanillo González-Camino, D. José M. Rabanera y Ortíz de Zúñiga, D. José M. Tomé Marín, D. José Manuel Merelo Palau, D. José María Adán García, D.José María de Oriol y Urquijo, D. José María de Velo de Antelo, D. José María Sánchez Ventura y Pascual, D. José María Tormo Magrans, D. José Martínez Sánchez-Arjona, D. José Ramón Gavilán y Ponce de León, D. José Ruiz Gálvez López, D. José Sáinz y Ramírez de Saavedra, D. José Sánchez Alcaide, D. José Solís Ruiz, D. José Utrera Molina, D. Juan Antonio Álvarez de Estrada, D.Juan Castañón de Mena, D. Juan Chicharro Lamamie de Clairac, D. Juan de Contreras y López de Ayala, D. Juan García Carres, D. Juan Gonzalo Álvarez Arrojo, D. Juan Pablo Rodríguez Cayuela, D. Juan Terrasa Noguera, D. Julio García Ibáñez, D. Julio Iranzo Domínguez, D. Julio López Elola Rodríguez,
D. Julio Rodríguez Martínez, D. Julio Salvador y Díaz-Benjumea, D. Justo Fernández Fernández-Trapa, D. León Herrera y Esteban, D. Leopoldo Sanjuan González, D. Leopoldo Stampa Sánchez, D. Licinio de la Fuente y de la Fuente, D. Lucas María de Oriol y Urquijo, D. Lucio del Álamo Urrutia, D. Luis Álvarez Molina, D. Luis Benítez de Lugo y Ascanio, D. Luis Cano Portal, D. Luis Coronel de Palma, D. Luis de Lamo Peris, D. Luis Emilio Calvo Sotelo Grondona, D. Luis
Gómez de Aranda y Serrano, D. Luis Martínez Izquierdo, D. Luis Mombiedro de la Torre, D. Luis Soriano Rodríguez, D. Luis Valero Bermejo, D. Manuel A. Sáenz de Heredia-Buzarra, D. Manuel Abascal Pujadas, D. Manuel Aguilar
Hardissos, D. Manuel Álvarez de Linares Polo, D. Manuel Barroso Feltrer, D.Manuel Blanco Tobío, D. Manuel Hernández Sánchez, D. Manuel Maroto González, D. Manuel Nadal Romero, D. Manuel Pieltain Moreno, D. Manuel
Rivas Guadilla, D. Manuel Valdés Larrañaga, D. Manuel Valentín Gamazo y Cárdenas, D. Mariano Calviño Sabucedo y Gras, D. Mariano Sánchez Covisa Carro, D. Mario Antolín Paz, D. Mateo Tomás Trias, D. Miguel María Primo de Rivera y Urquijo, D. Miguel Martínez Sevillano, D. Miguel Vizcaino Márquez, D.Modesto Vigueras González, D. Nicolás Franco Pasqual del Pobil, D. Noel Zapico Rodríguez, D. Olegario Llamazares Gómez, D. Pedro González Bueno Benítez, D. Pedro González Bueno y Bocos, D. Pedro Nieto Antúnez, D. Pedro Zaragoza Orts, Dña. Pilar Primo de Rivera Sáenz de Heredia, D. Quirino Ruiz Martínez, D. Rafael de la Rosa Vázquez, D. Rafael Díaz Llanos Lecuona, D.Rafael Girón Setien, D. Rafael Hernando Sánchez, D. Rafael Piera Torma, D.Rafael S. Vadillo Duro, D. Raimundo Fernández Cuesta y Merelo, D. Ramón Almendral Montero, D. Ricardo Fernández Cellini, D. Ricardo García de Carellanay Ugarte, D. Roberto Reyes Morales, D. Rodrigo Vivar Téllez, D.Salvador Serrats Urquiza, D. Santiago Calderón Sola, D. Santiago
Galindo Herrero, D. Santiago Guillén Moreno, D. Santiago Pardo Canalís, D.Servando Fernández Victorio Camps, Dña.Teresa Loring Cortés, D. Tomás Allende y García Báxter, D. Tomás Alonso Morales, D. Tomás Romojaro Sánchez, D. Valeriano Barreiros Rodríguez, D. Vicente García Ribes, D. Vicente Mortes Alfonso, Dña. Vintila Horia Lucal.
Fines:
Difundir el conocimiento de Francisco Franco. Promover y realizar estudios sobre el pensamiento de Franco y sobre las realizaciones de los años de su mandato. Contribuir a la proyección de su ideario sobre el futuro de la vida española. Conceder premios periodísticos anualmente para difundir el pensamiento de Francisco Franco.
25274 | Legión de Vanguardia - 03/12/2013 @ 21:10:12 (GMT+1)
"Se palpa la sensación de que alguien o alguno en el actual Gobierno han llegado a su nivel de incompetencia", (Antonio Garrigues Walker, Crónica fiel de un golpe anunciado, de Juan Blanco, Colección Denuncia, FN Editorial.)
"Nunca en nuestra Historia, el Ejército se ha pronunciado por capricho, sino cuando civiles imprudentes o cobardes le han empujado o cuando se había desmoronado la autoridad del Estado...Nunca son los militares sino estúpidos provocadores quienes motivan los golpes de Estado", (Pueblo, 12/XI/1980).
"Porque no pueden ustedes hacerse una idea de lo que es esto, los pasillos del Congreso, como resuena en esta bóveda el golpe de los cascos, como se oye piafar, el jadear, hasta el respirar de los corceles...Una carrera de caballos de Pavía. Hace falta caradura para que alguno de estos señores del congreso hablen de golpismo. ¡Encima!. Pero oigan, si aquí, a estas alturas, el que no tiene su fórmula de golpe es un Don Nadie..." (Crónica Parlamentaria de Joaquín Aguirre, El Alcázar, 2/XII/ 1980)
"Estoy convencido de que es inevitable una intervención militar", (José Tarradellas , en el artículo "Sigue corriendo la sangre", El Alcázar, 30/XI/1980). "Dada la gravedad de la situación y para evitar un probable golpe de estado militar, Suárez dimitiría y un general, de plena confianza del Rey, asumiría la presidencia del Gobierno con el acuerdo de todos los partidos. Así se daría un "golpe de timón" que permitiría acabar con el terrorismo, estabilizar la democracia y tomar medidas para mejorar la economía".
"No hace falta que enumere los problemas, pero principalmente hay uno que, en mi opinión, es vital y que si no se resuelve o no lo reconsideramos desde el principio será muy difícil conseguir estabilidad alguna en el país. Es el problema de las autonomías,vasca y catalana." Tarradellas.
25267 | kroker - 03/12/2013 @ 19:11:20 (GMT+1)
Golpista.
25266 | Legión de Vanguardia - 03/12/2013 @ 18:51:49 (GMT+1)
En el 23 de febrero de 1981, el mensaje del actual Jefe del Estado no se emite hasta la madrugada, porque está a la espera de la gestión de Armada con el Teniente Coronel de la Guardia Civil D. Antonio Tejero Molina, en la farsa política del Congreso. Entrada en el Congreso que le autorizó Armada al Teniente Coronel Tejero, en la reunión de la Calle Pintor Juan Gris, de Godsa, y el CESID, SIGC,GOSSI, y el Ministerio de Defensa, Vicepresidencia y Presidencia.
Contrariamente a lo establecido anteriormente, en reunión de la Calle del General Cabrera, que era que no se produjera.
Y es posteriormente cuando, el actual Jefe del Estado, envía orden, que es cumplida, de acuartelamiento, por telex, al Capitán General de Valencia D. Jaime Miláns del Bosch y Ussía. Región anteriormente en alerta, acorde a la Operación Diana de las FAS, normas constitucionales, y ley de Orden Público, vigente, de 1959. Las Fuerzas Armadas, constituidas por el Ejército de Tierra, la Armada y el Ejército del Aire, tienen como misión garantizar la soberanía e independencia de España, defender su integridad territorial y el ordenamiento constitucional.
El año 1981, en la Operación Diana de las Fuerzas Armadas españolas, estaban previstas cuatro tipo de acciones en escala ascendente según lo alarmante de la situación: Minerva, Vulcano, Júpiter y Marte, que se correspondían con situaciones de prevención, alerta, máxima alerta y movilización.
En 1977 se estableció, con carácter institucional en la Junta de Jefes de Estado Mayor, la operación Diana, que señala la misión de las Fuerzas Armadas y de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, referente a solucionar determinadas situaciones graves en España. La operación Diana establece tres escalones de acción: alerta 1, alerta 2 y alerta 3, correspondientes a los estados de sitio, excepción y guerra, acorde a la Ley de Orden Público, vigente, de 1959, y normas constitucionales. Las Fuerzas Armadas, constituidas por el Ejército de Tierra, la Armada y el Ejército del Aire, tienen como misión garantizar la soberanía e independencia de España, defender su integridad territorial y el ordenamiento constitucional. La operación Diana es la derivada de dos operaciones precedentes: la operación Lucero y la operación Ariete, así como Operación Alborada, diseñadas por el Alto Estado Mayor.
La operación Lucero, se convirtió en la operación Alborada y Ariete, conforme a la cual se desplegaron los efectivos de las Fuerzas de Seguridad del Estado y otras unidades de las Fuerzas Armadas, que les dieron relevo en posiciones estáticas, durante las jornadas electorales de 1977.
Para fortalecer la soberanía, independencia,libertad y defensa de la Nación española, vulnerada, envilecida y degradada. Restableciendo, la democracia, libertades y el orden constitucional, en defensa de la sociedad civil ante cualquier tipo de acciones. Debido a que la sociedad civil, militares, Generales ,Coroneles muestran preocupación, crispación y descontento por la situación económica, social, cultural, política de España, del Estado, de la Nación, en relación así con cuestión autonómica, como los informes del Consejo Superior del Ejército. En el que para intentar encubrir dos problemas regionales, el vasco y el catalán, se crearon quince mas, terrorismo, internacional y varios.
Unas institucionales acciones loables, en defensa de la soberanía, independencia, propiedad, libertad, de España, extorsionada, confiscada, estafada, saboteada, tergiversada, vulnerada, distorsionada, falseada, acosada, saqueada, prevaricada, envidiada, discriminada, tiranizada, de populismo, despotismo, demagogia.
Por ello nunca tantos debieron tanto a unos, soldados y oficiales, vilipendiados despóticamente en prevaricación judicial. Víctimas de fuegos cruzados, cabezas de turco. Sobran los que están faltan los que son.
25254 | kroker - 03/12/2013 @ 00:04:08 (GMT+1)
Ese titular se puede tomar de muchas maneras, pero ninguna buena desde luego. Poner en duda a estas alturas el carácter de villano del personaje en cuestión es un insulto a la democracia Sr. Jáuregui. Si lo políticamente correcto es ensalzar los valores de la derechona más rancia, entonces está en el camino correcto, los demás es tanto como decir que el fin justifica los medios.
Ninguna acción como la perpetrada el 23F tiene justificación alguna, y si me dice que estuvieron involucrados socialistas, e incluso la Casa Real, son tan golpistas como Armada y Cia. Ese día sentí vergüenza de ser español. Esa pandilla de retrasados mentales estuvo a punto de acabar con algo perseguido desde 1.812, los mismos que a lo largo de los siglos nos han sumido en la barbarie apestosa del un régimen casposo apestado y sacristía.
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