Censura el libro sobre la sumisión de la mujer
A Sáenz de Santamaría no le gusta el Arzobispado de Granada... o sus moralinas casamenteras
miércoles 27 de noviembre de 2013, 17:59h
Se acabó lo de 'a Dios rogando y con el mazo dando'; o, al
menos, se acabó la primera parte del susodicho refrán, es decir, lo de 'a Dios -o
al arzobispo, en este caso- rogando', aunque siga vigente la segunda parte. Y es que la vicepresidenta del Gobierno,
Soraya Sáenz de Santamaría, como una laica más, ha censura la 'obra' -esta vez,
con minúscula- del Arzobispado de Granada, que pedía a la mujer en general algo
tan razonable como que se casara y fuera sumisa. Tampoco le gusta a Sáenz de
Santamaría que se ilustre una asesinato de una mujer con imágenes de una
picadora de carne, como hizo la tele de Cospedal.
Tan destacado hecho ha tenido lugar en la sesión de
control al Gobierno de este miércoles en el Congreso de los Diputados. Preguntaba
a la sazón la portavoz parlamentaria socialista, Soraya Rodríguez, que censuraba
con toda acritud la actitud de tibieza, según ella, mantenida por el PP y el
Gobierno en cuanto a la lucha contra la violencia de género.
Soraya Rodríguez pidió a la vicepresidenta que liderara un
pacto de Estado en la lucha contra la violencia de género: que no se reduzca un
solo euro de los presupuestos para luchar contra la misma, que no retrocedamos
en la prevención de la violencia, que en la reforma del Código Penal se elimine
la necesidad de denuncia de la víctima en el delito de hostilidad y
acosamiento, que no se elimine ni un solo servicio dirigido a las víctimas en
los ayuntamientos en la reforma local.. o que "ninguna entidad que reciba
fondos públicos, como la Iglesia Católica, pueda editar estos libros (muestra
un libro) que, atentando a la dignidad de las mujeres, lo que hacen es fomentar
el sometimiento y el acatamiento de las víctimas, que es donde está el germen
de la violencia".
Y añadía aún la portavoz socialista algún otro ejemplo, como
que "reúna a todas las comunidades autónomas para que en ninguna desde un medio
público de comunicación se pueda ilustrar un asesinato criminal con una
picadora de carne, con el silencio de todo el Gobierno".
A SS de Santamaría no le gustan esos libros ni esas
informaciones
En su respuesta a la dura crítica socialista, y tratándose
de un tema esencial, Soraya Sáenz de Santamaría llegó a admitir lo siguiente: "A
mí tampoco me gustan esos libros [el del Arzobispado de Granada y la sumisión
de la mujer casada] ni me gustan esas informaciones [la de la televisión de
Castilla-La Mancha sobre el asesinato de una mujer, que lo ilustraron con una
picadora de carne], pero creo que lo que menos puede convencer a una mujer hoy
para que denuncie y para que sea valiente -porque les estamos pidiendo
valentía- es que usted y yo nos tiremos los trastos a la cabeza. Si quiere,
trabajamos juntas y hacemos un pacto de Estado, señoría, pero desde la seriedad
y desde la integridad ética".
Claro, que antes de llegar a ese punto, Sáenz de Santamaría
puso a caldo a Soraya Rodríguez, a la que también le dijo que "cuando se quiere
un pacto de Estado, se demuestra todos los días con las declaraciones y con las
acciones. Y si este tema lo enfoca de esta manera para hacer un motivo de
oposición, yo le digo que a mí ni hoy ni nunca me va a encontrar".