Brufau no sólo no dimite, sino que sale reforzado del acuerdo con Argentina
miércoles 27 de noviembre de 2013, 10:19h
Brufau no es hombre que alimente tensiones, ni busque discutir. Su talante se lo impide. Fue lo primero que dijo en noviembre de 2012, en una entrevista concedida a El País, "vamos a usar todas las vías jurídicas hasta el límite y acudiremos al
CIADI cuando lo veamos más conveniente, pero la demanda se puede retirar
si hay acuerdo".
Hace 24 horas casi nadie apostaba por la disposición de Argentina a compensar a Repsol. Fue ayer, cuando se conoció el preacuerdo entre Repsol e YPF, amparado por los
gobiernos de España, Argentina y México. Lo que llamó la atención fue la moneda de cambio: acciones.
La mayoría de los expertos del sector se hartaron de decir que sería muy
difícil que la multinacional española llegara algún día a recuperar un solo
dólar de la inversión realizada en la petrolera argentina, pero la
estrategia judicial que ha llevado acabo Brufau, desde la discreción que le caracteriza, ha dado sus frutos y antes de lo esperado.
Algo ha pasado en Argentina
Fue hace un año cuando el gobierno de Cristina Fernández de Kichner, juraba y perjuraba que no pagarían un dolar por YPF; a la semana pasada, que el jefe de
gabinete de Kirchner, Jorge Capitanich confirmaba
el éxito de la estrategia de la empresa española al reconocer que "para nosotros
constituye un sendero que nos va a permitir seguir generando mecanismos de
inversión en exploración en la Argentina".
Detrás de este cambio de opinión hay, ni más ni menos, una reunión a tres bandas: el ministro de Industria, José Manuel Soria, el presidente de la Caixa, Isidro Fainé y directivos de la petrolera española que cerraban en Buenos Aires.
El ministro trasladó tanto a Lozoya, en México, como al ministro de Economía argentino, Axel Kicillof, el
pasado lunes la petición de Brufau. La compensación debía ser, como mínimo, de 5.000 millones de dólares y «en activos líquidos»
evaluables por hasta tres independientes. Repsol considera que el pago
de esa cifra en bonos argentinos emitidos en dólares, no es el ideal, pero
cumple la condición si se garantiza el cobro.
La
alternativa, años de enfrentamiento en los
tribunales y ninguna certeza de obtener una compensación razonable. Y la salud de la Presidenta, no muy buena, dicen, que también ha influido. Miembros del equipo de gobierno argentino nos han declarado que Cristina tenía una espina clavada con YPF, "puesto que su marido, Nestor de Kichner tenía en alta estima a Brufau".
Aunque Repsol se muestra satisfecha con el acuerdo alcanzado, "vamos a mirar con lupa la letra pequeña de de los activos líquidos, que son y deben estar garantizados", nos puntualizan.
Brufau no dimite
Este miércoles, el consejo de administración de Repsol tiene una "predisposición
positiva" a aprobar el acuerdo alcanzado
entre España, Argentina y México acerca de la compensación por la
expropiación en 2012 de un 51% de YPF, indicaron a Diariocrítico
fuentes cercanas al Consejo.
"Antonio está muy tranquilo, diría que feliz. Para él ha sido una satisfacción conseguir este acuerdo, que entregó en mano al Ministro Soria. El papel del éste ha sido determinante en este acuerdo". Acuerdo que lleva fraguándose desde Junio de este año, y Brufau es el mayor valedor, nos señalan fuentes del Consejo a Diariociritico.
Ayer se dispararon los rumores de dimisión del Presidente de la petrolera, "Brufau no va a dimitir hasta tener atado y bien atado el tema de Argentina", nos comenta su equipo.
Cuando comenzaron los rumores, ya en 2012, de una posible dimisión, Brufau lo quieso dejar meridianamente claro "no parece muy lógico que la parte que inicia el conflicto sea la que
pide que cambien al interlocutor en la negociación. Esto no es un tema
personal, sino entre Repsol y el Estado argentino y la prioridad es que
esta casa recupere lo que es suyo. Pero si fuese cierto, el día que
hayamos recuperado lo que es nuestro, ese mismo día convoco el consejo
de administración y le pongo mi cargo a disposición. Ese día."
"Ningún consejero pedirá en el Consejo de Administración que renuncie. Es él el que debe decidir",
pronostican fuentes próximas al consejo, que señalan que la prioridad
en la reunión de la cúpula de Repsol de hoy es aprobar el principio de
acuerdo alcanzado por Soria, Lozoya y Fainé.
"Por ahora, tres gobiernos se han sentado en la mesa y han empujado un acuerdo siendo México un interlocutor entre dos gobiernos que
tenían un conflicto [Argentina y España], por lo tanto, esperaremos qué
se decide en el consejo del miércoles y en base a eso actuaremos",
declaró ayer Lozoya a la cadena Radio Fórmula al ser preguntado sobre si
Brufau intenta algo contra Pemex.
La de hoy es la primera reunión del consejo desde que el presidente de Pemex, Emilio Lozoya, arremetiera contra Brufau acusándole de gestionar la compañía peor que el resto de petroleras,
especialmente la estadounidenses.
¿Cuándo se rompió la cuerda?
Es difícil saberlo. Hasta noviembre de 2011, Repsol era una de las compañías
favoritas de Argentina y de sus autoridades, según lo que decían
públicamente. En el último trimestre del año, tras muchos años de
esfuerzos, realizaron un gran descubrimiento de crudos y
gases no convencionales de Vaca Muerta, que iba a representar un nuevo
paradigma energético para Argentina. Algo tan positivo resultó como detonante de la expropiación. Argentina no llevaba bien que fuese una empresa
privada, en este caso YPF, la que tuviese la responsabilidad de
desarrollar un yacimiento así.
Hoy, en YPF sólo se habla de Vaca Muerta.
Este fue el origen del problema. No había otros
problemas. El propio Brufau lo señaló en una de las primeras entrevistas que le realizaron tras la expropiación, "si en noviembre pasado (2011), la presidenta, los ministros o el
propio representante del Gobierno en el consejo de YPF decían que todo
se estaba haciendo a plena satisfacción del Gobierno, no puedo entender
cómo en enero, tras la reelección de la presidenta, pasase lo que pasó".